11-S, el dí­a que los lectores colapsaron Internet

Los ataques terroristas contra los Estados Unidos del 11 de septiembre de 2001 pusieron a prueba la estabilidad de Internet, que colapsó en el caso de los sitios web de los medios, ante la demanda de los lectores ese dí­a por informarse por otros medios.

En realidad Internet, planificada en la década del ’60 por el Gobierno estadounidense como parte de una estrategia para enfrentar una ofensiva nuclear soviética, nunca dejó de funcionar, aunque se vio en problemas por el altí­simo tráfico de cibernavegantes.

Es que el público se volcó a la web en busca de la actualización permanente de la información relacionada con el atentado. Los atentados en Nueva York fueron el primer suceso de trascendencia internacional que Internet cubrió en tiempo real desde todo el planeta.

La red de telefoní­a móvil en el área de Nueva York fue saturada por miles de llamados de personas que buscaban a sus parientes y amigos luego de los atentados al World Trade Center.

Minutos después del primer atentado a las torres emelas en Nueva York, los sitios de los principales diarios y cadenas de noticias colapsaron y debieron recurrir a ediciones de emergencia. Para ello debieron eliminar todo el contenido que no estuviera relacionado estrictamente con la noticia. Es que el tiempo requerido para acceder a las noticias se habí­a triplicado.

Por ejemplo, The New York Times llegó a presentar la marca de su diario en texto html, para aumentar su perfomance superada por las visitas recibidas.

MSNBC.com, el sitio de noticias más leí­do en el mundo hace seis años, también tuvo que recurrir a edición de emergencia y remarcaba desde un pie de página en la tapa que "Usted está viendo esta página por el alto tráfico que estamos experimentando".

El mismo comportamiento pudo verse en el sitio de la cadena de noticias CNN y de ABC news.com. Yahoo sorprendió con un rediseño que desplazó a las categorí­as de búsqueda por una ventana dedicada a las noticias del ataque.

Pero no sólo los medios de noticias se vieron superados por las visitas. El sitio oficial de la compañí­a American Airlines colapsó y tuvo que presentar una página de emergencia redireccionado a los lectores. Algo similar sucedió en el sitiode United Airlines donde la página de inicio fue reemplazada por un mensaje de Jim Goodwin, en eses entonces jefe ejecutivo de la compañí­a, quién comunicaba su condolencia y pesar por el atentado, además de ofrecer un número telefónico gratuito para que los familiares pudieran recibir información.

El sitio web del Pentágono y de la Agencia federal de Investigaciones (FBI) de los EEUU tuvieron dificultades similares y directamente no presentaron ningún tipo de información actualizada hasta el momento.

Una simple página en formato html, en el sitio oficial del "World Trade Center"informaba de los hechos con el el siguiente lacónico mensaje publicado a las 12:00, hora de Nueva York:  "El Hotel Marriot del World Trade ha sido evacuado. Marriott Internacional está trabajando conjuntamente con las autoridades. Marriott continuará monitoreando y entregando actualizaciones a medida que reciba información. Estamos activando un número de teléfono especial para consultas" Pérdidas empresariasLas torres gemelas de Nueva York albergaban un total de 376 empresas, y algunas se quedaron sin ejecutivos tras los atentados del 11 de septiembre. 193 compañí­as se encontraban ubicadas en la Torre Norte, la primera en sufrir el impacto del Boeing 767 de American Airlines que pilotaba Mohamed Atta, y otras 183 en la segunda, que fue la primera en derrumbarse.

Los edificios destruidos albergaban organismos oficiales. En la torre norte se encontraba la sede de la Autoridad Portuaria de Nueva Yok y Nueva Yersey, que ocupaba cinco plantas, y en la torre sur el Fondo de Bomberos de la ciudad en el piso 48.

También habí­a oficinas del FBI y de los Servicios Secretos, del Ayuntamiento de Nueva York y de departamentos municipales que supervisan el tráfico, el medio ambiente y la oficina de acción inmediata contra terremotos y atentados con armas tóxicas.

Pero no solo las empresas que estaban en las torres gemelas sufrieron consecuencias. También otras que residen en Manhattan debieron recurrir a Internet para derivar a otros lugares sus actividades. El caso más conocido fue el del diario The Wall Street Journal, que editó a distancia su edición en papel del 12 de septiembre de 2001.Cambios en tecnológicasLa situación mundial creada tras los atentados del 11 de septiembre afectó a la industria de las nuevas tecnologí­as. Microsoft debió aplazar una semana el lanzamiento en Estados Unidos de su consola XBox. Dell, Apple y Palm postergaron sus ferias anuales.

Sin embargo, los mercados bursátiles favorecieron a las compañí­as tecnológicas de defensa, por los negocios que se abrí­an por la réplica estadounidense en Afganistán.

Muchas otras compañí­as fuetron afectadas por los atentados. Los fabricantes de computadoras recibieron un macabro espaldarazo en un año en el que estaban experimentando una caí­da en el número de máquinas vendidas. También las empresas de telecomunicaciones salieron beneficiadas económicamente a corto plazo, por la reposición de todas las infraestructuras dañadas.

Las compañí­as que perdieron todo su equipamiento en los atentados encargaron PCs a miles. Las aseguradoras tuvieron que reponer unas 34 mil computadoras personales. Sólo hasta el 17 de septiembre, Dell habí­a despachado más de 24 mil servidores y computadoras para reemplazar los que se habí­an perdido en el derrumbe de las torres gemelas.

La avalancha de pedidos obligó a Dell a aumentar la producción de su planta de Austin, que se puso a trabajar dí­a y noche para cubrir la demanda. Tan sólo seis horas después de los atentados, una compañí­a aseguradora cuyas oficinas resultaron arrasadas en el ataque ya les habí­a encargado 200 nuevos computadoras.

Los atentados también afectaron la aparición en Internet de unos 52 mil dominios terminados en .info, que tuvo que retrasarse tres dí­as porque algunas de las empresas que administraban el nuevo dominio operaban desde el World Trade Center o el distrito financiero de Manhattan.Explosión del e-mailLas consecuencias del 11-S se dejaron ver en los patrones de comportamiento de los estadounidenses cuando navegan por Internet. Según los datos de una encuesta publicada en febrero de 2002, los norteamericanos utilizaron más el correo electrónico que cualquier otro medio de comunicación para recibir información sobre los atentados.

Más de 100 millones de estadounidenses -el 57% de los usuarios de correo electrónico- enviaron o recibieron mensajes de preocupación a familiares o amigos después de los atentados de Nueva York Y Washington, y casi un 23% de los internautas recibieron esos dí­as de setiembre mensajes de ánimo o preocupación de conocidos fuera del paí­s, según el estudio realizado por la Universidad de California Los Angeles (UCLA).

"El aspecto más interesante que resalta el estudio es que se ha desarrollado un tipo nuevo de comunicación tras el 11-S, la primera crisis nacional desde el nacimiento de Internet y el correo electrónico" aseguró Jeffrey Cole, director del Centro de Comunicación de UCLA y fundador del UCLA Internet Project.

La mayor parte de los mensajes de correo electrónico tení­a un mensaje muy similar al que se puede enviar en una postal, según el informe "porque los contenidos son mucho menos importantes que el mensaje".

"Es una nueva forma de comunicación que no habrí­a sido posible si no existiese el correo electrónico" aseguró Cole.

Sin embargo, el acceso a Internet tuvo un papel algo más modesto durante los momentos siguientes al ataque terrorista, según el estudio. Algo menos del 5% de los encuestados recurió a la web en los momentos inmediatos al ataque para conocer toda la información sobre el suceso, frente al 80% de estadounidenses que se informaron mediante la televisión.

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