Si desconectas este dispositivo de tu casa, mejorás tu señal de WiFi

Los problemas con el WiFi de casa no son algo nuevo. El simple hecho de que no llegue la señal a cualquier rincón de tu hogar o que la velocidad sea inferior en algunos momentos, puede estar provocado por diferentes causas.

Entre ellas, un pequeño dispositivo que pasa desapercibido, pero que afecta a la conexión inalámbrica. Si querés notar una mejora en la red, debés desconectar algunas cosas para que no interfieran más.

Hay electrodomésticos o aparatos que interfieren en la señal inalámbrica de tu router. Desde un microondas, de los más evidentes, a una heladera, algo en lo que muchos no pensarían, existen decenas de obstáculos en nuestra casa para que la conexión inalámbrica rinda como debe.

Sin embargo, hay algunos que no son tan comunes como otros. En este caso, se trata de los dispositivos USB 3.0. Pueden afectar y llegar a dar interferencias en el WiFi. Lo bueno es que es muy fácil de corregir, solo hay que desconectarlos y así evitamos males mayores.

El problema de los dispositivos USB 3.0 con el WiFi

Los dispositivos USB 3.0 suelen estar en los hogares. Están en memorias accesorias, conexión de mandos o consolas de juegos, receptores para el televisor. Algunos cables de dispositivos USB 3.0 pueden dar interferencias en la banda de 2,4 GHz.

Esto se debe a que no cuenten con el blindaje suficiente para no interferir. Y es que, al funcionar bajo esta frecuencia, es otro de los elementos que puede afectar negativamente a la red de tu casa, hasta el punto de generar cortes o desconexiones con Internet.

Cable de conexión a puerto USB 3.0

La opción en este caso es muy sencilla: desconectar los dispositivos USB 3.0 que tenés en casa. No podrás quitar todos, ya sea porque los usas a diario o porque te hacen falta para algo. En esa situación, lo ideal es que desconectes aquellos que son más prescindibles. Y más cuando tenés uno conectado a otro aparato que tiene fallos con el WiFi.

Esto también incluye a los routers en los que se conecta un USB por cualquier motivo como, por ejemplo, un disco duro. De ser así, lo cierto es que es mejor comprobar si al desconectarlo mejora la conexión inalámbrica. Así te evitarás este problema con el Wi-Fi.

Si has comprobado que el cable USB con el que conectas un dispositivo a otro es el culpable, tenés la alternativa de cambiarlo por otro más nuevo, para no generar esas interferencias que afecten a la banda de 2,4 GHz.

El uso de la banda de 5 GHz es una alternativa, pero no siempre es compatible con los dispositivos que tenemos en casa, sobre todo con los de la Internet de las cosas como cámaras, sensores de puertas e incluso robots aspiradores.

Comprobá en todo momento qué conectás a un dispositivo, especialmente cuando notes que no funciona igual que antes la conexión WiFi en ese aparato. Y siempre que sea posible, desconéctalo o aléjalo lo máximo que puedas. De esta manera conseguirás mejorar la red inalámbrica de tu casa.