Este gigante mediático se planta ante Google por el negocio publicitario
Gannett, el editor de periódicos más grande de los Estados Unidos, demandó en un tribunal federal de la ciudad de New York el martes a Google por monopolio publicitario en el mercado digital.
La empresa editora del diario USA Today argumentó en los documentos judiciales que Google y su empresa matriz, Alphabet, controlan cómo los editores compran y venden anuncios en línea.
"Google ha llevado a cabo un plan sofisticado, anticompetitivo y engañoso durante más de una década", recalca la demanda de Gannett, empresa de servicios de marketing y medios enfocada que posee más de 500 marcas de medios y noticias digitales.
El presidente y director ejecutivo de Gannett, Michael Reed, dijo a la cadena de TV estadounidense CNBC que Google ha "monopolizado el comercio de mercado para su ventaja y a expensas de los editores, lectores y todos los demás".
"La publicidad digital es el elemento vital de la economía en línea. Sin una competencia libre y justa por el espacio publicitario digital, los editores no pueden invertir en sus salas de redacción", subrayó Reed.
El vicepresidente de Google Ads, Dan Taylor, calificó las afirmaciones de Gannett como "simplemente incorrectas" y dijo que cuando los editores eligen usar las herramientas de Google, se quedan con la gran mayoría de los ingresos.
La publicidad es la principal fuente de ingresos de Google y, según la consultora eMarketer, la compañía controla aproximadamente una cuarta parte del mercado de publicidad digital de los EE. UU. Esta demanda se produce cuando el gigante tecnológico afronta varias causas antimonopolio por su negocio de publicidad en los Estados Unidos y la Unión Europea.
¿Google y Facebook tendrán que responder legalmente por los contenidos que publican?
El máximo tribunal de Estados Unidos examinó un caso histórico que podría transformar Internet si decide que las empresas tecnológicas como Google o Facebook deban responder legalmente por los contenidos que difunden.
Los nueve jueces que componen la Corte Suprema comenzaron a abordar el alcance de una ley que, desde 1996, les otorga inmunidad a las empresas tecnológicas.
El caso está vinculado a los atentados de noviembre de 2015 en París y se deriva de una denuncia contra Google presentada por familiares de Nohemi González, una de las 130 víctimas de estos ataques, según consignó la agencia de noticias AFP.
González, que estudiaba en Francia, murió en la cafetería La Belle Equipe a manos de un comando del grupo Estado Islámico (EI). Sus padres acusan a YouTube de haber recomendado vídeos del grupo yihadista a algunos de sus usuarios. Según ellos, "al recomendar videos del EI a sus usuarios, Google ayudó al Estado Islámico a difundir su mensaje y, por lo tanto, le brindó apoyo material".
Un decreto da inmunidad a las empresas de Internet
En 2015, los tribunales federales desestimaron la denuncia en nombre de una disposición legal conocida como "sección 230", que fue adoptada cuando internet estaba en sus inicios y que se convirtió en uno de sus pilares. Esta "sección 230" decreta que las empresas de Internet gozan de inmunidad legal por el contenido que publican porque no son "editores".
Por el contrario, los familiares de Nohemi González estimaron, que Google no se limitó a distribuir contenidos del EI, sino que su servicio seleccionó usuarios para ofrecerles los videos del grupo yihadista, por lo que no puede reclamar esta inmunidad.
"La selección de los usuarios a los que se recomendaron los videos del EI se hizo mediante algoritmos informáticos creados e implementados por YouTube", argumentaron en un recurso remitido a la Corte Suprema.
El alto tribunal aceptó este recurso e insinuó que estaría dispuesto a cambiar la jurisprudencia.
En tanto, Google pidió a la corte que "no debilite una parte central del internet moderno, ya que las recomendaciones proporcionadas por los algorítmos son las que hacen posible encontrar las agujas en el pajar más grande de la humanidad", enfatizó.
Por su parte, el grupo Meta (Facebook, Instagram, WhatsApp), insistió en que "las recomendaciones solo sirven para organizar el contenido publicado en línea, pero no constituyen un trabajo de edición".
La Corte Suprema dictará sentencia antes del 30 de junio.