No todo lo que lanza Tim Cook es exitoso: el último gran fracaso de Apple
Apple se asocia en general con algunos de los mejores ingenieros y diseñadores en el mundo de las tecnologías de la información y la comunicación, como lo demuestran el iPhone, la iPad y las Mac. Sin embargo, la empresa californiana tuvo fracasos rotundos, el último de ellos fue AirPower, un producto que, según los informes, era tan malo que nunca se envió.
Anunciado junto con el iPhone X, en 2017 AirPower prometía ser un nuevo tipo de cargador inalámbrico, que cargaría hasta tres dispositivos a la vez. Por ejemplo, un iPhone, un Apple Watch y AirPods.
Pero hacer que esa tecnología funcionara en conjunto fue más difícil de lo que Apple pensó. Un año y medio después de su anuncio, la compañía canceló en marzo de 2019 AirPower sin contemplaciones.
Fue la primera vez en la historia reciente de Apple bajo el mando de Tim Cook que el gigante tecnológico canceló un producto anunciado.
AirPower: una plataforma de carga inalámbrica innovadora
AirPower era en esencia una base con espacio para el iPhone, el Apple Watch e incluso AirPods con un nuevo accesorio opcional de estuche de carga inalámbrica. Los cargaría a todos sin necesidad de cables.
AirPower utilizaba un nuevo tipo de estándar de carga que admite la carga de múltiples dispositivos, lo que podría explicar por qué no se lanzó de inmediato: requería más trabajo para llevarlo a la producción a gran escala.
El accesorio resolvía muchos de los inconvenientes del uso de la carga inalámbrica, como el soporte para un solo dispositivo por pad, que requiere una ubicación específica.
Sin embargo, en marzo de 2019, Dan Riccio, vicepresidente senior de ingeniería de hardware de Apple, reconoció en un comunicado: "Después de mucho esfuerzo, llegamos a la conclusión de que AirPower no logrará nuestros altos estándares y cancelamos el proyecto. Pedimos disculpas a aquellos clientes que esperaban con ansias este lanzamiento. Seguimos creyendo que el futuro es inalámbrico y estamos comprometidos a impulsar la experiencia inalámbrica".
Después de un retraso de más de un año desde que se anunció por primera vez en septiembre de 2017, AirPower se convirtió en otra muestra más del hábito reciente de Apple de anunciar productos y no enviarlos a tiempo.
Los AirPods tuvieron un poco de retraso antes de estar ampliamente disponibles, y se enviaron en cantidades limitadas antes de finalmente alcanzar su ritmo y convertirse en un momento cultural genuino.
Un extraño paso en falso de Apple
AirPower fue cancelado por Apple, aunque las cajas de los nuevos estuches de los AirPod tenían imágenes del cargador y los nuevos conjuntos de AirPod tenían menciones de AirPower.
Fue es un raro paso en falso en público para Apple. A lo largo de la discusión sobre cuándo se podría lanzar AirPower, la tendencia general de la discusión se inclinó hacia "nunca".
Eso es un testimonio de la capacidad de sus equipos de ingeniería de hardware para ejecutar funciones que parecían casi imposibles a lo largo de los años.
En este caso, parece que los problemas de ingeniería resultaron, al menos en este punto, insuperables.
El hecho es que el hardware era difícil. Los conceptos básicos de la carga inalámbrica son bien conocidos y establecidos, pero al prometer la capacidad de colocar varios dispositivos en cualquier lugar de una plataforma, permitiéndoles cargar en forma simultánea mientras comunican los niveles y las tasas de carga, Apple puso el listón muy alto para AirPower.
Fue la primera vez en la historia reciente de Apple que el gigante tecnológico canceló un producto anunciado.
Las causas de un fracaso sonoro de Apple
Sin embargo, no es raro que Apple anuncie productos que enviará en una fecha posterior. En realidad, desde el regreso de Steve Jobs a la firma, este fue un procedimiento estándar.
Pero, por lo general, la disponibilidad real del producto a partir de la fecha del anuncio es de unos días a seis semanas y hasta seis meses en el caso del iPhone original.
En cualquier caso, la pregunta de la causa por la cual Apple canceló un producto tan simple como una plataforma de carga inalámbrica, a pesar de sus recursos de investigación y desarrollo casi ilimitados, tanto en talento como en presupuesto.
Con AirPower, los ingenieros de Apple intentaron resolver uno de los principales, si no el principal, problema del uso de una plataforma de carga inalámbrica.
Para que tu dispositivo se cargue de forma inalámbrica, se debe asegurar de que las bobinas de alambre dentro de tu dispositivo estén colocadas encima de las bobinas de alambre del soporte o pad. De lo contrario, no se cargará.
Sin embargo, la promesa de Apple fue clara: AirPower cargará de forma inalámbrica cualquier dispositivo Apple sin importar dónde se coloque en la plataforma.
El problema de los estándares
El primer problema que los ingenieros de Apple tuvieron que resolver fue un problema técnico creado por Apple: el Apple Watch usa un estándar de carga inalámbrica patentado, diferente del estándar Qi que se usa en sus iPhones y el estuche de carga inalámbrica AirPods.
Para que AirPower sea compatible con ambos esquemas de carga inalámbrica, los ingenieros de Apple tendrían que desarrollar mucha inteligencia y complejidad dentro del pad, con más potencia de procesamiento y sensores, lo que haría que su fabricación fuera difícil y costosa.
La segunda razón de la falla de AirPower fue la elección tecnológica de Apple de usar muchas bobinas pequeñas para producir la inducción electromagnética para cargar el dispositivo.
Una vez más, la razón de esto fue proporcionar una experiencia perfecta para el consumidor que podía dejar caer cualquiera de sus dispositivos Apple en cualquier lugar del AirPower.
Sin embargo, esta arquitectura crea problemas significativos de interferencia electromagnética y calentamiento, especialmente si el AirPower funcionaba a plena potencia para cargar los tres dispositivos al mismo tiempo, un iPhone, un Apple Watch y el estuche de carga inalámbrica AirPods.
Para evitar un fiasco al estilo del flamígero teléfono móvil Samsung Note 7, donde literalmente se incendió, Apple decidió dejar de lado su producto en el último minuto antes de enviarlo, después de más de dos años en desarrollo.