G20: el Gobierno refuerza la ciberseguridad de la cumbre con ayuda de Israel
Israel no integra el Grupo de los 20 (G20), el principal foro internacional para la cooperación económica, financiera y política que tendrá su cumbre de líderes en Buenos Aires el 30 de noviembre y el 1 de diciembre.
Sin embargo, el país asiático tendrá un rol estratégico antes y durante las deliberaciones en Costa Salguero gracias a un acuerdo firmado este año entre su gobierno y la administración Macri por el cual se reforzará la ciberseguridad de la reunión histórica.
Paradójicamente, varios de los países que integran el G20 son potencias cibernéticas que, según sospechan otros miembros del grupo, fomentan ataques informáticos entre esas naciones. Son los casos de China, Estados Unidos, el Reino Unido y, sobre todo, Rusia.
Aunque el Gobierno argentino se preocupó en lo que va de noviembre en hacer anuncios sobre la seguridad física de la cumbre, que incluyeron la exhibición pública de armas y otros equipos militares y policiales para custodiar a los líderes visitantes y reprimir manifestaciones opositoras al encuentro, no descuidó el costado cibernético del cónclave.
El Departamento de Tecnología Informática de la Fuerza Aérea será la encargada de “brindar una extrema seguridad en el campo informático”, según informó el Poder Ejecutivo.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el ministro de Defensa, Oscar Aguad, visitaron el 15 de noviembre las instalaciones de esa repartición, ubicada en el edificio Cóndor, la sede de la Fuerza Aérea, en el barrio porteño de Retiro, a pocos kilómetros de Costa Salguero, donde deliberará el G20. Desde ese lugar monitorean las distintas áreas involucradas en el control y monitoreo de datos de la red cibernética de la defensa nacional.
Según informó el subsecretario de Ciberdefensa, Alfredo Raúl Parodi, las tareas apuntan a prevenir ataques de ciberterrorismo o código malicioso que puedan afectar a los sistemas y redes de las Fuerzas Armadas y del Estado Mayor Conjunto (EMCO), además de las del Ministerio de Defensa, que servirán de soporte a las operaciones que se llevarán a cabo durante la cumbre.
El objetivo de los dispositivos instalados, que incorporaran inteligencia artificial y aprendizaje automático (“machine learning”, en inglés) será la de reconocer anormalidades en las redes y detectar su origen con ayuda de un sistema que colaborará con el funcionamiento conjunto de las fuerzas.
Mediante una resolución firmada por Aguad, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich y el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, se dispuso la adopción de “medidas excepcionales que prevean situaciones extraordinarias a los efectos de garantizar la continuidad de los servicios aéreos, más allá de cualquier vicisitud propia del desarrollo comercial, teniendo en cuenta el rol de Argentina en la presidencia del G20”.
“De esta manera, cualquier anomalía o evento sospechoso que se detecte en las redes cibernéticas podrá ser reconocido con el objetivo de morigerar sus efectos”, se informó oficialmente.
Focos
Los objetivos de este plan es enfrentar el ataque de intrusos (“hackers”) y delincuentes cibernéticos, la encriptación de la información sensible que se comparta en la cumbre, y la protección de las “infraestructuras críticas” del Estado y el sector privado, como por ejemplo, el suministro de energía eléctrica y de agua potable y las comunicaciones.
El operativo de seguridad informática comenzó hace más de un año bajo la hoy Secretaría de Modernización que encabeza el vicejefe de Gabinete Andrés Ibarra aunque intervienen en este proyecto de ciberseguridad los ministerios de Defensa, Relaciones Exteriores, Seguridad, Justicia y la secretaría de Asuntos Estratégicos de la Presidencia que lidera Fulvio Pompeo.
Este plan, que se puso en marcha por medio del decreto 577/2017, tuvo un paso fundamental establecido en la decisión administrativa 1658/2018 de la Jefatura de Gabinete, por el cual se autorizó la contratación de un arsenal cibernético y de seguridad física a Israel, por 5,2 millones de dólares.
El Gobierno argentino también adquirió en Israel un sistema inhibidor de drones, que según aseguró el director de Cooperación Internacional del Ministerio de Seguridad, Gastón Schulmeister ya se usó con éxito durante los recientes Juegos Olímpicos de la Juventud.
Además del aporte israelí, hubo colaboración británica para la ciberseguridad de la cumbre del G20. En los meses previos hubo intercambio de información entre Buenos Aires y Londres en este tema e incluso una actividad con referentes de las fuerzas de seguridad federales de los dos países que incluyeron al Ministerio de Defensa.
Potencia cibernética
¿Por qué el Gobierno eligió a Israel para reforzar la seguridad informática de la cumbre, pese a que ese país no integra el G20? Además de la sintonía ideológica entre los gobiernos de Mauricio Macri y Benjamín Netanyahu, hay un hecho concreto: la posición de liderazgo global que tiene el Gobierno hebreo en ciberseguridad.
El Estado israelí tomó hace décadas un papel activo para impulsar a la industria. Existe una colaboración constante entre el gobierno, las universidades y las empresas. El Poder Ejecutivo toma un papel de asesor, guiando las cosas a lo largo. Hay más de 400 empresas de ciberseguridad en Israel. El Ejército también desempeña un papel importante en el avance de la industria.
La Unidad 8200, que es una parte de élite de la Fuerza de Defensa Israelí, en realidad está sirviendo como un campo de entrenamiento para algunas de las principales compañías de seguridad cibernética del mundo.
En un movimiento inusual, las Fuerzas de Defensa de Israel emitieron un comunicado de prensa este año en el que afirmaban que la unidad 8200 impidió un ataque aéreo del ISIS contra un país occidental el año pasado.
Los militares reclutan a personas con fuertes habilidades de lenguaje y computación cuando ingresan a las fuerzas armadas a la edad de 18 años. Pasan tres años trabajando en ciberseguridad antes de regresar a la vida civil.
Estas unidades operan de la misma manera que un negocio inicial (“startup”). Las personas trabajan juntas como equipos, tienen oportunidades para dirigir a otras personas, son responsables de tomar decisiones importantes y deben sobrevivir al fracaso. Estas son habilidades empresariales esenciales, razón por la cual muchas de las personas en estas unidades lanzan sus propias “startups” de ciberseguridad.
Israel es el único país del mundo que ofrece ciberseguridad como una especialización en la escuela secundaria y es el primer país en ofrecer un doctorado en ciberseguridad. Cuenta con seis centros universitarios de investigación dedicados a la ciberseguridad. En ese contexto, no es de extrañar entonces que la inversión en empresas de ciberseguridad se triplique en los próximos dos años en ese país.