¿Cómo saber si su teléfono móvil puede convertirse en una "bomba Molotov"?
En las últimas semanas, tres modelos de teléfonos móviles de alta gama fueron protagonistas de noticias pero no por sus innovaciones sino por convertirse en causantes de una muerte, heridas graves e incendios.
En julio se registraron dos casos de electrocución en China relacionados con productos de Apple.
Un hombre de Beijing, Wu Jiantong, quedó en estado de coma después de electrocutarse cuando tocó supuestamente su teléfono móvil -un iPhone- mientras se estaba cargando.
Después del accidente, se descubrió que Wu tenía un cargador falso para recargar su teléfono móvil y que éste podría ser la causa de la descarga.
En la provincia noroccidental de Xinjiang, el 11 de julio, un mujer de 23 años llamada Ma Ailun murió electrocutada, según certificaron los primeros análisis.
Se estudia si fue su móvil -también un iPhone- el que provocó la descarga eléctrica, como aseguran sus familiares.
Asimismo, una adolescente suiza sufrió graves quemaduras en la pierna por la explosión de su teléfono Samsung Galaxy S III.
El 11 de julio, el diario suizo Le Matin publicó la noticia del estallido del “smartphone” en el bolsillo de la joven suiza en la localidad de La Chaux-de-Fonds, lo cual le causó una quemadura de tercer grado en la pierna derecha.
Fanny Schlatter, de 18 años, portaba su teléfono en el bolsillo mientras realizaba prácticas de aprendizaje de pintura de edificios, cuando de pronto explotó y se prendió fuego su pantalón.
El dueño de la empresa le ayudó a arrancar la prenda para evitar que la quemadura sea más seria, informó Le Matin.
La serie de noticias finaliza, por ahora, de nuevo en Asia con la explosión de un Samsung Galaxy S4 que provocó presuntamente un incendio en el departamento de una pareja de Hong Kong.
De acuerdo con el testimonio de uno de los damnificados, tanto el cargador como la batería de su "smartphone" eran originales de Samsung.
Según informó el medio chino Xianguo, el departamento ardió en llamas por culpa de la explosión del famoso teléfono de la marca surcoreana.
Según el titular del móvil, éste utilizaba una aplicación denominada Love Machine cuando de repente su Galaxy S4 se apagó emitiendo un fuerte sonido y comenzó a arder.
La reacción de Du fue arrojar el teléfono debajo del sofá, pero esto no sirvió más que para agravar la situación, porque generó un incendio que destruyó el departamento. La pareja china consiguió salir de la casa y solo sufrieron unas heridas leves.
El dueño del móvil fue interrogado acerca del origen y garantía del "smartphone", y aseguró que el cargador y la batería eran originales de la marca Samsung.
Respuesta de AppleLuego de los sucesos en China, Apple añadió una página en su portal oficial en ese país, en la que solicitó a los usuarios que utilicen cargadores oficiales de la empresa para sus dispositivos.
“Apple siempre antepone la seguridad del usuario, así que todos nuestros productos están sujetos a una seguridad estricta y a pruebas de fiabilidad, además de estar diseñados con los estándares de seguridad gubernamentales en todo el mundo, incluidos los cargadores de electricidad USB para iPhone y iPad”, afirma la página creada por la empresa.
“Cuando cargues tu iPhone o tu iPad, sugerimos que utilices los cargadores con sus correspondientes cables. Todos ellos se pueden comprar de forma individual en Apple y en tiendas asociadas”, añadió.
Teléfonos cargadosSegún los expertos, la probabilidad de que alguien se electrocute con un “smartphone” es muy baja.
Estos teléfonos se cargan a través de un cable USB que tiene un cable de alimentación de unos cinco voltios, insuficiente para lastimar gravemente a una persona.
Los riesgos aumentan cuando un usuario alimenta un teléfono con un cargador que no cumple los estándares o es incompatible, al no contar con aislamiento adecuado.
Estas falencias lo exponen al sobrecalentamiento, a un incendio o a una descarga eléctrica.
Otra inquietud de seguridad es la combinación de “smartphones” y el agua, porque puede reducir la resistencia natural de una persona a las descargas eléctricas.
En rigor, esto no tiene que ver con los propios dispositivos, sino con problemas en los enchufes o claves de extensión deteriorados.
Por ejemplo, un experto chino dijo que un cargador falso podría ser el causante de la muerte de la joven debido a que estos aparatos economizan en la calidad.
El protector del circuito, aseguró, pudo tener un desperfecto que permitió el envío de 220 voltios de energía directamente a la batería del teléfono, con la trágica consecuencia comentada precedentemente.
Los cargadores reducen la tensión eléctrica o voltaje desde los 220 voltios del tomacorriente hasta los 3,3 voltios o 5 voltios que requieren los celulares o tabletas para alimentar su batería con seguridad.
Si el cargador, estando conectado al enchufe, tiene una falla, la fuente permite la salida de 80 voltios o 100 voltios o más y el usuario sentirá una electrocución en cuento tome contacto con el teléfono.
El caso de las baterías es más delicado: los compuestos químicos que contienen cambian si se las presionan o sufren golpes. Estas fallas pueden desencadenar una reacción como una explosión.
Consejos
A fin de evitar estos problemas y serios incidentes, los expertos aconsejan:
- No enrollar el cable porque puede dañarlo.
- Evitar doblar muy fuerte el cable del cargador porque se rompería el aislante del conector y provocaría un corto circuito cuando se enchufa al tomacorriente.
- No guardar el cargador en lugares de alta temperatura porque el calor cambia el comportamiento de sus componentes electrónicos.
- Cargar la batería del celular cuando esté cerca de consumirse por completo.
- El celular debe cargarse apagado.
- No dejar el cargador del celular o la tableta enchufado. Aunque no esté conectado a un equipo, consume energía y las piezas están en funcionamiento y se desgastan.
- Nunca usar el teléfono cuando el aparato se está cargando.
- No comprar cargadores “genéricos”. Estos dispositivos no fueron fabricados bajo estándares de calidad, ni con los materiales indicados.
- Tampoco comprar baterías “genéricas”. Las originales son más costosas pero garantizarán la calidad, seguridad y eficiencia necesarias.
- Si se percibe que el celular o la tableta se recalientan mucho, apagarlos y confirmar el origen del fenómeno.
- No llevar el móvil en los bolsillos internos, muy cercanos al cuerpo. El calor corporal eleva la temperatura y riesgos de cortos.