Por qué la melatonina no es la solución para todos los problemas de insomnio
Tomar melatonina para dormir es una práctica bastante habitual. Es un suplemento barato, fácil de obtener y con menos riesgos que las pastillas para dormir (somníferos).
Pero aunque se la conozca como "hormona del sueño", no sirve para combatir todos los problemas de insomnio. Esto se debe a su rol en el ciclo sueño-vigilia.
Según estimó una investigación en JAMA, los estadounidenses estaban tomando en 2018 más del doble de la cantidad de melatonina que tomaban una década antes. El número de niños que la reciben en Reino Unido aumentó un 170% entre 2015 y 2022, indicó el sitio business insider.
Los especialistas suelen aconsejar la terapia cognitiva para tratar los problemas subyacentes del sueño, algo que desgraciadamente suena a un desembolso no apto para todos. A diferencia de las pastillas para dormir, la melatonina no requiere de receta. Además tiene muchos menos riesgos y efectos secundarios que los somníferos, aunque no está exenta de consideraciones.
Una afección que en su estado crónico se ha duplicado en España en los últimos 20 años, desde el 6,4 por ciento en 1999 al 14 por ciento en 2019, según un estudio de la Sociedad Española de Sueño (SES). Sin embargo, la melatonina no siempre es la solución.
Qué es la melatonina
Tu cerebro produce de forma natural melatonina. Es la principal hormona implicada en el control del reloj circadiano y el ciclo sueño-vigilia.
Es secretada en la glándula pineal desde donde cruza la barrera hematoencefálica y penetra en los tejidos del cuerpo para realizar sus funciones. Su síntesis conlleva una serie de reacciones encimáticas que comienzan tranformando el triptófano en serotonina.
Una vez sintetizada, la melatonina se libera al torrente sanguíneo y se distribuye por todos los fluidos corporales, llegando a la saliva, la orina, los folículos antrales, el semen, el líquido amniótico y la leche materna. Esto se debe a que no solo desempeña un rol en el sueño. También se ha relacionado, por ejemplo, con el metabolismo. La melatonina se metaboliza principalmente en el hígado, y sus metabolitos se excretan por la orina.
Cómo ayuda a dormir
Aunque se la suele llamar la hormona del sueño, el sobrenombre no es del todo preciso. Algo más exacto sería "hormona de la noche". Esto se debe al papel que desempeña en la regulación del sueño.
Su liberación se activa en respuesta a la oscuridad. De ahí que los niveles crecen durante la noche y se reducen con el día. La melatonina se sintetiza entre las 20:00 y las 22:00, alcanzando un máximo entre las 00:00 y las 03:00. Su liberación produce la sensación de somnolencia. No hace dormir, sino que le comunica al cuerpo que es la hora de dormir.
También transmite información sobre la duración de la noche al cerebro y otros órganos para mantener el ciclo del sueño.
No es una pastilla para dormir
La melatonina ha demostrado una alta eficacia para adelantar los tiempos de inicio del sueño y de vigilia y mejorar funciones cognitivas en personas con un trastorno del ritmo circadiano del sueño.
Los niveles de melatonina cambian a lo largo de la vida. La producción comienza entre los 3 y 4 meses de edad, aumenta progresivamente con los años, alcanzando su punto máximo entre los 8 y los 10. A partir de los 40 o 45 años los niveles comienzan a disminuir progresivamente, por lo que hacia los 70 años apenas representan el 10% de los niveles de juventud. Las investigaciones han encontrado eficacia en la suplementación para mejorar la calidad del sueño que empeora con la edad en adultos mayores.
Se han demostrado asimismo efectos clínicamente significativos del tratamiento con melatonina para trastornos del sueño relacionados con desfase horario, -la Mayo Clinic la recomienda para el jet lag- y trabajo por turnos, o con afecciones como, hipertensión nocturna y enfermedad de Alzheimer.
Pero la evidencia científica aún es insuficiente para recomendar su uso en el tratamiento del insomnio crónico para adultos, según las pautas de la Academia Estadounidense de Medicina del Sueño y el Colegio Estadounidense de Médicos. Estos organismos "recomiendan encarecidamente" el uso de la terapia cognitivo-conductual para este fin.
Muchos de los problemas para dormir surgen de problemas que la melatonina no puede tratar, por estrés, ansiedad o depresión, cualquiera de los cuales puede causar dificultad para conciliar el sueño, permanecer dormido o lograr un sueño profundo y reparador. O problemas de salud. Algunos como la apnea del sueño o el síndrome de las piernas inquietas requieren de atención médica.
Entonces, ¿por qué tantas personas recurren a este suplemento? "El efecto placebo en humanos es muy poderoso", sopesa en The Washington Post Mark Wu, neurólogo y médico especialista en medicina del sueño de la Universidad Johns Hopkins.
Si las personas "creen que la melatonina les ayuda a conciliar mejor el sueño, entonces, por supuesto, se relajarían y calmarían, se sentirían más en paz y luego se dormirían más fácilmente. Pero yo diría que podrías obtener lo mismo si te diera una pastilla de azúcar".