En invierno, el desayuno no se toma vacaciones. Desafíos y consejos para no perder este hábito fundamental
Lo hemos escuchado muchas veces: el desayuno es la comida más importante del día. Durante las mañanas de invierno, las bajas temperaturas hacen que levantarse de la cama se convierta en misión imposible. En las vacaciones de invierno, niños y niñas suelen dormir más, los hábitos se dejan de lado, y el desayuno se superpone con el almuerzo. Mantener las rutinas saludables en el receso escolar es fundamental para evitar así la pérdida de hábitos alimentarios que se construyeron durante el año.
Dedicarle al menos 15 minutos, sentados en la mesa, compartiendo en familia, antes de comenzar las actividades diarias resulta fundamental para mantener una vida saludable. Si los niños se levantan más tarde, se puede retrasar el almuerzo y asegurarse de que no se salteen el desayuno, hábito nutricional necesario para arrancar el día con la energía que nuestro cuerpo necesita.
En esta época del año que debemos enfrentar bajas temperaturas, se recomienda aportarle a nuestro cuerpo, las calorías que necesita, con la finalidad de mantener la temperatura corporal. El desayuno debe significar un 25% del aporte energético total ingerido en todo el día, pero para sacarle el máximo provecho es importante que elijas alimentos saludables.
Un desayuno completo debe estar compuesto por una porción de lácteos, ya sea un vaso de leche o una porción de queso, una fruta y cereales/legumbres y así asegurarse de cubrir los requerimientos de nutrientes esenciales, como el calcio, la vitamina D, entre otros.
¿Por qué incluir estos alimentos en nuestro desayuno? Alimentos como la leche o queso contribuirán a los aportes de proteínas de buena calidad y de calcio, necesarios para la salud ósea. Además, están fortificados con Vitamina D, nutriente clave cuando nos exponemos menos a la luz solar.
Combinar cereales integrales, nos aportará la energía necesaria para comenzar el día y fibra para el cuidado de la salud intestinal e incluir variedad de frutas, seleccionando las de estación, es una manera de sumar vitamina C a nuestro desayuno.
Una buena opción para los días fríos de invierno es preparar un bowl de avena con frutas que cumple con los requisitos de un desayuno completo y saludable, fácil de hacer y pudiendo realizar varias combinaciones: avena, leche o bebida vegetal, fruta de estación, algún fruto seco o semilla a gusto.
Una buena opción para los días fríos de invierno es preparar un bowl de avena con frutas que cumple con los requisitos de un desayuno completo y saludable, fácil de hacer y pudiendo realizar varias combinaciones: avena, leche o bebida vegetal, fruta de estación, algún fruto seco o semilla a gusto. Un desayuno que te brindará saciedad y con ingredientes nutritivos
Pero si contás con poco tiempo, prepará desayunos sencillos con alimentos saludables, como puede ser una infusión acompañado de un bowl de frutas y una rebanada de pan con queso preferentemente integral, o sino optar por un vaso de leche con un puñado de frutos secos y una fruta para el camino.
El desayuno es una de las comidas más importantes del día y por ello es importante que reparemos en el tipo de alimento que elegimos, cubriendo así las necesidades nutricionales. Las vacaciones de invierno pueden ser una buena ocasión para involucrar a niñas y niños en su preparación. De esta manera se fomenta el hábito de desayunar incluyendo alimentos saludables.
A veces lo olvidamos y no le damos la importancia que merece: el desayuno es primordial y no se toma vacaciones tampoco en invierno.
Por Agustina de Momi* – Nutricionista M Nº 10.591
* Integrante del Equipo de Información del Departamento de Información Nutricional de Mastellone Hnos.