Dólar: cómo se sostiene y fortalece su hegemonía como moneda global
El dólar es más que nunca la moneda global. Más de 60% de las reservas de los bancos centrales del mundo están constituidas por dólares estadounidenses; y más de 90% del comercio internacional, sumando importaciones a exportaciones, se realiza en la divisa norteamericana.
Esto incluye, y en primer lugar, a la totalidad de las cadenas globales de producción, constituidas por 88.000 empresas trasnacionales y sus 600.000 asociadas o afiliadas que constituyen la base estructural del capitalismo del siglo XXI.
Es altamente significativa en este sentido la acción de la Reserva Federal fuera de EE.UU., sobre todo en los últimos 2 años, en el transcurso de la pandemia del coronavirus que cambió para siempre la historia del mundo.
En ese período, la Reserva Federal realizó más de 60 acuerdos de intercambio de activos ("swaps") con otros tantos bancos centrales del sistema global, con lo que no solo calmó los mercados, y redujo significativamente la honda incertidumbre desatada por la pandemia, sino que recortó prácticamente el costo del capital, y por lo tanto el monto real de las tasas de interés.
Por supuesto, esto a su vez profundizó la hegemonía del dólar en el mercado mundial, estableciendo una tendencia de fondo que va a extenderse en los próximos meses y años. Esto es lo que convierte a la Reserva Federal en lo que ya es efectivamente, y sin necesidad de metáforas, en el Banco Central de la economía globalizada del siglo XXI.
La Reserva Federal y su política externa
La conversión de los "swaps" en instrumentos fundamentales de la política externa ("off-shore") de la Reserva Federal ocurre esencialmente a partir de 2008, al estallar la crisis financiera internacional provocada por el colapso de Lehman Bross. -la cuarta banca de inversión del mundo- el 15 de septiembre de ese año en Wall Street.
En ese momento quedó de relieve en forma de súbita y drástica la crisis: que los más de 11.000 fondos mutuales, fondos de pensión y "edges funds" (inversiones de riesgo) norteamericanos, que son el cuerpo absolutamente mayoritario de la estructura financiera estadounidense y mundial (frente a solo 330 bancos globales), habían construido enormes exposiciones en dólares en mercados externos a EE.UU, en especial los situados en la zona Euro, de Europa, formada por 19 países que comparten el euro como moneda común.
"Más de 90% del comercio internacional, sumando importaciones a exportaciones, se realiza en la divisa norteamericana"
De pronto, los organismos financieros no-bancarios estadounidenses se encontraron que sus inversores de la eurozona -que representaban 35%/40% de sus inversiones totales-, reclamaban imperiosamente sus activos debido al pánico provocado en los mercados por la caída de Lehman Bross., y que les resultaba imposible hacerlo.
De ahí el programa de "swaps" establecido con urgencia por la reserva federal después de 2008, que permitieron al Banco Central Europeo (BCE), y a los 4 Bancos Centrales de Suiza, Reino Unido, Japón, y Canadá abastecer de dólares a sus mercados locales.
El dólar, en el centro de la estructura financiera global
La Escuela de Economía de la Universidad de Cambridge señalo que el sistema de "swaps" establecido por la Reserva Federal transformó de hecho al BCE y los otros 4 grandes Bancos Centrales de Europa en sucursales de la banca central estadounidense, otorgando a la estructura financiera internacional un nítido carácter jerárquico con la hegemonía indisputada de EE.UU.
Esta estructura financiera está fundada en la hegemonía prácticamente absoluta del dólar norteamericano, que tramita a través de un sistema institucional profundamente organizado y jerárquico. Este sistema surgió de la crisis financiera internacional de 2008, y como respuesta a ella.
Esta estructura financiera fundada en el dólar admite otras "monedas globales", como el euro, la libra esterlina, el franco Suizo, el Yen Japonés, y crecientemente, el reminbi de la República Popular, pero en la medida que admitan 2 condiciones: una completa convertibilidad con el dólar estadounidense, y asuman lucidamente un papel de subordinación.
"La estructura financiera mundial está fundada en la hegemonía prácticamente absoluta del dólar norteamericano"
Todo adquiere un carácter contractual / institucional en el capitalismo avanzado. También en la fenomenal extensión de los créditos en dólares y monedas convertibles y subordinadas, que ha ocurrido en las primeras 2 décadas del siglo XXI.
En el momento actual, son 14 los bancos centrales –incluidos los de Brasil y México, a partir de marzo de 2020- que constituyen la trama institucional de la hegemonía financiera estadounidense. El resultado ha sido que la Reserva Federal ha suscripto "swaps" por más de u$s446.000 millones en el último trimestre de 2021, lo que puede considerarse el núcleo de la trama financiera esencial del sistema capitalista plenamente integrado de nuestra época.
EE.UU. experimenta una situación de extrema debilidad internacional a partir de su derrota a manos de los Talibanes en Afganistán ocurrida en agosto de 2021. Pero ese debilitamiento político/estratégico no se extiende de modo alguno a la indiscutible hegemonía financiera norteamericana, que es hoy más fuerte que nunca.