Los 4 restaurantes para probar la mejor comida vegana: aptos para todos los paladares
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El crecimiento del veganismo en el mundo también tuvo su impacto en Buenos Aires y sus mil propuestas gastronómicas. A tal punto ganó terreno, que los que no tienen este modelo de vida y alimentación, empezaron también a sumarse a las propuestas y restaurantes veganos. Se ramifica entre los más jóvenes y no es solamente un estilo de vida, sino también un negocio prometedor para los gastronómicos.
En los últimos años, con un claro movimiento en la pospandemia, las generaciones más nuevas comenzaron a plantearse qué comían y de dónde provenía lo que comían. Descartaron los ultraprocesados primero, luego dejaron la carne, por último abandonaron todo lo que procediera de animales, hasta la leche y los huevos.
Según un estudio que realizó en 2020 la consultora Kantar para la Unión Vegana Argentina (UVA), el 12% de la población de la Argentina es vegana, marcando un aumento del 3% respecto al 2019. Entre ellos, la mayoría pertenece al rango etario entre 35 y 49 años. Además, el 52% son mujeres, mientras que el 48% son hombres. Pero además, y como dato curioso, revela que otro 12% de la población se definió como flexitariano, es decir, que han bajado sustancialmente el consumo de carne.
Nuevos restaurantes que acompañan la tendencia
Esto abrió un negocio interesante para los empresarios del sector e inversores. No solo tenían que buscar en sus cartas algunas propuestas veggie, sino que además se les abría la posibilidad de armar restaurantes enteros que dieran de comer a este nuevo grupo. Y se volvió tan profesional el tema y le pusieron tanta garra que algunos lograron que personas que el domingo comen un asado a la vieja usanza argentina, también reservaran mesas en sus espacios veganos.
A continuación, cuatro opciones de restaurantes que apostaron a una carta 100% vegana y que reciben a públicos de todo tipo.
Let It V: una sofisticada propuesta a base de plantas
Es el proyecto gastronómico de dos socios y hermanos -Gabriel y Uriel Hendler- que se unieron con una misma idea: ofrecer un menú rico y saludable a la vez. La idea se materializó y, hoy en día, ya cuentan con tres sucursales, donde no solo promueven el fortalecimiento de la salud física y mental a través de la alimentación, sino que también refuerzan el concepto con una mirada sustentable y socialmente responsable.
El local de Palermo, donde todo empezó, tiene barra y terraza incluida y el de Manduca – el nuevo paseo gastronómico del Paseo La Plaza - es Street & Arts, una propuesta en el centro más bien descontracturada. Hay uno más en la calle Honduras de delivery y take away.
"Nuestro público va desde los 24 a los 50 años, porque cada día son más y más las personas que llegan a este tipo de cocina gracias a que los jóvenes las adentran en esta experiencia de descubrir nuevos sabores y combinaciones a base de plantas", explica Uriel.
Y agrega que invitan a "experimentar una aventura culinaria única, donde los sabores, colores y texturas se combinan para crear una experiencia sensorial inolvidable. Ya sea para desayunar mientras se trabaja, almorzar en pareja, tomar un buen cóctel de autor después de un día de trabajo, o bien, una cena con amigos, siempre con buena música y en un ambiente relajado".
El precio del ticket promedio por persona es de $10.000. Sucursales y más datos en su Instagram: @letit_V
Mudrá, en el Patagonia Flooring Design
Con una fórmula que combina un innovador diseño y lo más primitivo de la tierra, este restaurante seduce con su cocina libre de productos de origen animal. Y se llena todas las noches. Su ambientación en tonos rosados y luces bajas logró hacer de este espacio un punto de reunión favorito de grupos de amigas para los jueves y viernes por la noche.
En marzo de 2020, días antes del confinamiento, Mudrá abrió sus puertas en dos locales y bastante particulares: uno ubicado en el último piso del imponente edificio de la Fundación Patagonia Flooring Design & Art Center y su más reciente apertura en el Centro Comercial Nordelta.
Tienen platos simples, como hamburguesas y pizzas, pero también pastelería de especialidad, sushi y preparaciones sofisticadas, elaboradas con los llamados "superalimentos" y sin ningún ingrediente de origen animal.
El ticket promedio por persona es de $25.000. Reservas en @mudraplantbased
Seibo, la propuesta de cocina criolla a base de plantas
El proyecto nació de la mano de tres amigos con una visión en común: llevar la tendencia plant based a Recoleta bajo un formato poco explorado y con mucho potencial como lo es la cocina tradicional.
Tienen platos sencillos, como empanadas del estilo salteño y buñuelos, milanesas de gírgolas, humita en cazuela y una provoleta de papa. Su carta pasea por opciones para almuerzos, meriendas, brunchs y cenas que exploran la gastronomía tradicional argentina, pero sin carne, huevos o leche tan presentes en las recetas de la maestra de la cocina local, Doña Petrona.
"Con nuestros platos y sabores, buscamos constantemente representar nuestra gastronomía mediante una elaboración 100% artesanal y muy lograda. Pensamos que, en Recoleta, a diferencia de Palermo, hacía falta una propuesta con un plus poco explorado hasta ahora, que es hacer cocina criolla de alto nivel a base de plantas", asegura Agustín Zavalía, socio del restaurante.
El valor de ticket promedio es $30.000 y están en Azcuénaga 1876, en pleno centro de la Ciudad, solo cierran los lunes. Instagram: @seibo.ar
Sacro: un lugar que ya está en la Guía Michelin
Damián Harburguer hace unos seis años fue pionero en armar este enorme restaurante, con una decoración impecable y una carta muy completa, pero absolutamente plant based.
Harburguer es un emprendedor serial, anteriormente fundó varias startups tecnológicas en gaming, dating, fintech (Geopagos) y hasta una proptech. Graduado cum laude en la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, se entusiasmó con la propuesta del veganismo y su tipo de alimentación hasta querer ser parte con un restaurante propio, Sacro.
En Sacro hay opciones para todos, incluso para no los son veganos. La carta es amplia y tiene platos a base de plantas y hongos inspirados en los distintos sabores del mundo. Le suman cócteles de autor con y sin alcohol elaborados con frutas, vegetales, flores, hierbas medicinales y aromáticas.
Dentro de su carta, algunos platos se convirtieron en clásicos: la empanada de carbón activado, la palta masala, el spaghetti asiático y la palta Lime pie.
El año pasado, Sacro fue uno de los 57 restaurantes recomendados por la Guía Michelín y se puso en cola para en un futuro ser ganador de alguna estrella.
El ticket promedio ronda $30.000 por persona y está en pleno Palermo. Tiene muchas mesas, así que se puede llegar cualquiera sin reserva. IG: @sacroresto
La oferta gastronómica vegana en Buenos Aires se diversificó exponencialmente en los últimos años, ofreciendo opciones para todos los gustos y presupuestos. Los cuatro restaurantes mencionados son solo una pequeña muestra de la variedad y calidad que se puede encontrar en la ciudad y el país.