Este volcán gigante podría extinguir a toda la humanidad
Cómo algo tan hermoso puede ser algo tan peligroso. El volcán Yellowstone y otros súpervolcanes sufren las consecuencias el cambio climático, esto podría hacerlos entrar en erupción y si sucediese sería una catástrofe para la humanidad.
Los habitantes del planeta Tierra se enfrentan a peligros existenciales más grandes que nunca.
El supervolcán de Yellowstone (un volcán grado 8 en la escala de 8 del Índice de Explosividad Volcánica) ha hecho erupción tres veces en los últimos 2,1 millones de años; su erupción más reciente ocurrió hace 640.000 años. Una erupción en Yellowstone no se parecería a nada que haya visto la humanidad anteriormente, explican en el New York Times.
Primero se presentarían terremotos cada vez más intensos, una señal de que el magma debajo de Yellowstone sube apresuradamente hacia la superficie. Luego el magma saldría proyectado desde el suelo en una erupción titánica, descargaría los gases tóxicos de las entrañas de la tierra en el aire. Esto continuaría durante días y Yellowstone quedaría sepultado en lava dentro de un radio de más de 60 kilómetros.
Sin embargo, la devastación en Yellowstone sería solo el inicio. Los vulcanólogos creen que una supererupción del volcán de Yellowstone enterraría amplios trechos de Colorado, Wyoming y Utah debajo de hasta 90 centímetros de ceniza volcánica tóxica.
Dependiendo de los patrones climatológicos, en gran parte del Medio Oeste también caerían algunos centímetros de ceniza, lo cual sumergiría a la región en la oscuridad.
Incluso sería probable que el polvo pudiera llegar a las costas, donde vive la mayoría de los estadounidenses, a medida que se esparciera la nube de ceniza. Se perderían las cosechas; los pastizales se contaminarían; los cables de alta tensión y los transformadores eléctricos quedarían inservibles, lo cual podría afectar gran parte de la red eléctrica.
Eso sería solo en Estados Unidos. Los modelos de los meteorólogos han revelado que los aerosoles liberados en el aire podrían propagarse a nivel global si la erupción ocurriera durante el verano.
A corto plazo, conforme la nube tóxica bloqueara la luz solar, las temperaturas mundiales promedio podrían caer significativamente y no volver a la normalidad durante varios años. La lluvia se reduciría de forma pronunciada. Eso podría ser suficiente para desencadenar el final de las selvas tropicales.
La agricultura colapsaría, empezando por el Medio Oeste. Como escribió para la Fundación Europea de Ciencias un grupo de investigadores en un informe en 2015 sobre geopeligros extremos, sería "la mayor catástrofe desde los albores de la civilización".
Los supervolcanes como el de Yellowstone representan lo que se conoce como riesgos existenciales: ultracatástrofes que podrían ocasionar una devastación global e incluso la extinción de la raza humana. Pueden ser naturales, como las supererupciones o el impacto de un gran asteroide de la misma escala del que contribuyó a eliminar a los dinosaurios, o pueden ser provocadas por el hombre, como una guerra nuclear o un virus diseñado.
Por definición, son peores que todas las peores situaciones que la humanidad ha vivido, pero no son nada comunes, y eso sí supone un gran desafío tanto a nivel psicológico como político.
Aunque son los asteroides los que por lo general llegan a las primeras planas y a las películas de Michael Bay, los expertos en riesgos existenciales coinciden en su mayoría en que los supervolcanes (hay veinte en todo el planeta) son la amenaza natural que ostenta la mayor probabilidad de extinguir al ser humano.
Sin embargo, esto no quiere decir que la probabilidad sea alta, ya que la probabilidad de que ocurra una supererupción en Yellowstone en un año cualquiera es de una en 730.000.
No obstante, sumamente improbable no quiere decir imposible, aun cuando la naturaleza humana mezcle ambos términos. Lo que distingue los riesgos existenciales de los peligros de la vida cotidiana no es la probabilidad de que ocurran, sino las consecuencias.