Cómo comprar viviendas en pozo en Buenos Aires: ventajas, en qué prestar atención y costos claves
Comprar inmuebles en etapa de construcción es una oportunidad atractiva en Buenos Aires, donde adquirir propiedades en pozo ofrece precios más bajos y mayor flexibilidad de pago que los inmuebles terminados. Además, esta modalidad permite a los compradores asegurar un valor de mercado favorable que tiende a revalorizarse a medida que avanzan las obras.
Estas condiciones financieras brindan acceso a propiedades en zonas con alto potencial de apreciación, lo que resulta en un retorno sobre la inversión favorable. Según Kevin Savelski, director de Grupo 8.66, esta tendencia representa una ventaja estratégica para quienes buscan invertir en inmuebles con bajo estrés financiero y alta revalorización.
Al invertir en etapas tempranas de construcción, los compradores pueden beneficiarse de precios más bajos que tienden a revalorizarse a medida que avanza la obra, lo que genera un retorno sobre la inversión antes de la entrega.
En términos de precios, el costo por metro cuadrado de las viviendas en pozo varía considerablemente según la ubicación y el tipo de construcción. En barrios de alto valor como Palermo, Caballito o Villa Devoto, los proyectos de construcción premium tienen un precio promedio de u$s 2.600 por metro cuadrado. Estas propiedades suelen ofrecer características de alta calidad, como amenities exclusivas y diseños de vanguardia. Por otro lado, en áreas periféricas de la ciudad, los proyectos de construcción estándar tienen un precio promedio de u$s 1.600 por metro cuadrado, siendo más accesibles pero con características más simples.
La compra de una propiedad en pozo también ofrece flexibilidad en la financiación. Savelski destacó "que este tipo de ventas permite a los compradores abonar en cuotas durante el período de construcción, lo que reduce la carga financiera inicial".
Además, los pagos suelen ajustarse al ritmo del avance de obra, proporcionando mayor seguridad al comprador. Otra ventaja es la posibilidad de personalización, ya que los compradores pueden participar en la elección de acabados y distribución interna, adaptando la vivienda a sus gustos y necesidades.
Etapas
El proceso de compra de una vivienda en pozo implica varias etapas. Inicialmente, el comprador firma una reserva, dejando una seña que manifiesta su interés en la unidad. Si la oferta es aceptada, se firma la confirmación de la oferta y un refuerzo de reserva, donde se realiza un pago adicional como compromiso de compra. Finalmente, se firma el boleto de compraventa, que detalla todos los aspectos de la operación, incluyendo el precio, forma de pago y plazo estimado de construcción.
Además del precio pactado, los compradores deben considerar costos adicionales al adquirir una vivienda en pozo. Estos incluyen el sellado del boleto de compraventa, que representa el 3,5% del valor del inmueble, y la comisión inmobiliaria, que suele ser del 4% del valor de la propiedad. También se debe contemplar un fondo de alhajamiento o equipamiento, destinado a la compra de mobiliario para los espacios comunes del edificio, y un fondo de reserva para cubrir los primeros gastos de funcionamiento. Savelski amplió: "Los gastos de escritura, que incluyen honorarios del escribano y otros costos notariales, representan aproximadamente un 6% del valor del inmueble".
En cuanto a la financiación, las opciones suelen ser en dólares o en pesos ajustados por el índice CAC (Cámara de la Construcción). Esto generalmente implica un anticipo seguido por el saldo en cuotas hasta la entrega de la llave. Algunas desarrolladoras, como Grupo 8.66, ofrecen cuotas post-possession a través de una Sociedad de Garantía Recíproca (SGR), lo que amplía las opciones financieras para los compradores.
Por último, el impacto del blanqueo de capitales en la demanda de propiedades en pozo aún no ha sido tan significativo como se esperaba, aunque existe optimismo en el mercado. "Los desarrolladores confían en que, con el tiempo, el blanqueo comenzará a reflejarse más claramente en el aumento de la demanda, especialmente en proyectos de mediano y largo plazo", concluyó Savelski.