Textiles amenazan con asambleas en los principales shoppings de país ante la falta de acuerdo salarial
La industria textil es una de las perdedoras del modelo económico, al que critican tanto los gremios como los empresarios. En ese marco, las organizaciones de la actividad coincidieron en disponer el estado de alerta y movilización, al tiempo que advirtieron que se realizarán asambleas en los principales centros comerciales y shoppings del país, con el propósito de visualizar el conflicto.
Las protestas coincidirían con las compras de las fiestas de fin de año, que amenazan con afectaría la comercialización en los locales de las marcas tops. Más allá de esta medida de fuerza, también evalúan comenzar con quite de colaboración en las plantas para luego pasar a paros progresivos.
Textiles: estado de alerta ante la caída del poder adquisitivo de los salarios
Las conducciones del Sindicato de Empleados Textiles de la Industria y Afines (SETIA), la Asociación Obrera Textil (AOT), el Sindicato de Obreros de la Industria del Vestido y Afines (SOIVA) y la Unión de Cortadores (UCI) armaron una mesa no sólo para plantear sus demandas, sino para tener una mirada unificada sobre las necesidades de la industria y contar con más fuerza a la hora de discutir con los empresarios.
Justamente, cuestionaron la postura de los representantes de la Federación Argentina de la Industria de la Indumentaria y Afines (FAIIA) por negarse a otorgar una mejora salarial "acorde con la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores y trabajadoras", agregando que "tampoco quieren otorgar el bono de fin de año".
Fuentes gremiales indicaron a iProfesional que "nos provoca una mezcla de rechazo y asombro la actitud de la patronal, rechazando otorgar una suba salarial cuando la ropa está cada vez más cara" y agregaron que "hoy contamos con ingresos que ni siquiera alcanza para poder cubrir las necesidades básicas de los trabajadores".
Profundización del plan de lucha si no atienden las demandas gremiales
Según las fuentes gremiales, este lunes podrían llevarse a cabo las asambleas en las puertas de las firmas de ropa más importantes en los shoppings, como paso previo a medidas de fuerza en las propias fábricas. La intención es que el conflicto cobre notoriedad, aunque esta protesta no habilitaría a la secretaría de Trabajo a dictar la conciliación obligatoria.
Asimismo, explicaron que "el bono se venía en los últimos años como una forma de compensar la pérdida del poder adquisitivo por efecto de la inflación" y agregaron que "ahora, en un año con un ajuste económico muy fuerte, los empresarios se niegan a otorgarlo bajo una decisión totalmente arbitraria, que no vamos a permitir".
Los voceros adelantaron que el plan de lucha se podría profundizar en los próximos días "si no existen respuestas por parte de la cámara". El cierre del año se recalentó en el plano laboral, con conflictos en sectores como judiciales, metalúrgicos, camioneros y ahora textiles.
Los empresarios confirman baja de ventas y pérdida del empleo
Ha pocos días, la Fundación ProTejer realizó una nueva Encuesta de Coyuntura de las empresas de la cadena textil e indumentaria, correspondiente al tercer trimestre del año, donde explicaron que, a pesar de una desaceleración en la caída con respecto a los primeros meses, la producción en dicha actividad se encuentra un 19 por ciento por debajo del año pasado.
La encuesta relevó a más de 100 empresas de los distintos eslabones textiles e indumentaria sobre la evolución de las principales variables de ventas, producción, uso de capacidad instalada, inversiones y comercio exterior en el III trimestre de 2024. Este rubro genera 540.000 puestos de trabajo y, por ende, da sustento a 2.000.000 de personas a nivel federal.
El estudio confirmó nueve meses consecutivos de fuerte contracción interanual de la actividad, con perjuicios crecientes de afectación al empleo y posible cierre de establecimientos productivos en caso de mantenerse la capacidad instalada ociosa.
En desglose, 7 de cada 10 empresas encuestadas vio reducidas sus ventas y su producción en el tercer bimestre del año. En tanto que el 43 por ciento de las empresas indica que cayó el empleo al comparar septiembre 2024 con diciembre 2024 y sólo un 8 por ciento registró un aumento en la cantidad de puestos de trabajo, cifra que refleja una situación preocupante sobre todo si comparamos con el primer bimestre del año, cuando sólo el 21 por ciento registraba menos puestos de trabajo que en diciembre 2023.
Las principales razones que explican la caída de la producción es la pérdida del poder adquisitivo de la población (casi la totalidad de las empresas consideran esta causante como relevante), cambios de participación de bienes importados en el consumo (3 de cada 10 empresas) y las expectativas macroeconómicas y cambio del clima de negocios respecto al futuro (4 de cada 10 empresas). Con estos datos, se denota que la crisis está impactando de forma conjunta en todos los rubros de la cadena de valor: desde la fabricación de hilados, telas, indumentaria y la comercialización de máquinas, insumos y bienes finales.