SENADO

El viaje de Milei complica el panorama de la Ley Bases: ¿qué pasa si hay empate y no está Villarruel?

La partida del Presidente hacia el G7 podría coincidir con la votación y la vice no podría definir. Qué dice el reglamento y cómo se moverá el oficialismo
POLÍTICA - 11 de Junio, 2024

El viaje del presidente Javier Milei a la cumbre del G7 en Italia agregó más incertidumbre al debate sobre la Ley Bases en el Senado porque hay una alta probabilidad de que se superponga con el momento de la votación y obligue a la vicepresidenta Victoria Villarruel a ausentarse, lo que podría complicar todavía más la discusión si hay empate debido a la función que tendrá que cumplir su reemplazo, el senador Bartolomé Abdala.

Milei partirá rumbo a Italia este miércoles alrededor de las 22:30 y si bien la sesión del Senado fue convocada para las 10:00, se calcula que por la cantidad de oradores que se estableció (serán 20 "en lo posible", según el acta de Labor Parlamentaria, más los cierres de los jefes de bloque, de 20 minutos cada uno) el debate podría durar unas 10 horas.

Cuando el mandatario salga del país, Villarruel no podrá presidir la sesión porque quedará a cargo del Ejecutivo y su lugar sería ocupado por Abdala, presidente provisional de la Cámara alta. Esto pone un foco más de tensión sobre el debate de la Ley Bases y el proyecto de Medidas Fiscales porque la votación se presenta hoy muy ajustada.

La posibilidad de un empate en la votación de la Ley Bases en el Senado, adelantada por iProfesional, tomó algo más de vuelo en las últimas horas. Si el Gobierno no logra acercar a los dos senadores por Santa Cruz y al indefinido Maximiliano Abad de la UCR, ese escenario podría volverse realidad y, sin la vice, la definición quedará en manos de Abdala, lo que podría abrir en el recinto una fuerte discusión con el kirchnerismo sobre el reglamento y la validez constitucional de la votación.

El viaje de Javier Milei y la Ley Bases: ¿qué pasa si hay empate y Villarruel no puede definir?

Si hubiera un empate, la definición queda en manos de Villarruel. El reglamento del Senado establece que "si una votación se empata se abrirá una nueva discusión, se repetirá en seguida la votación, y si esta vuelve a resultar empatada, decide el voto del presidente" de la Cámara.

En caso de que justo en ese momento la vicepresidenta estuviera reemplazando a Milei en el Ejecutivo, el desempate quedaría a cargo de Abdala. De cualquier manera, el resultado sería favorable al oficialismo pero no estaría exento de controversias porque el libertario tendría un doble voto: como senador primero y el definitorio como presidente del cuerpo.

Si Villarruel no está en el recinto y hay empate, la definición quedará en manos de Abdala (derecha) con un doble voto 

Y es que, según el artículo 33 del reglamento, "en los casos en que la Presidencia del cuerpo es ejercida por un senador, corresponde que este vote en las cuestiones sometidas a resolución de la Cámara, ejerciendo, en caso de empate de la votación, el derecho de decidir la misma". Esto lo habilitaría a votar por segunda vez (podría hacerlo a viva voz) para definir.

Sin embargo, la Constitución Nacional establece en su artículo 54 que "cada senador tendrá un voto". El kirchnerismo, que mantiene un rechazo férreo a la Ley Bases, podría agarrarse de este punto para cuestionar el procedimiento. Al menos eso especulan en La Libertad Avanza.

Una fuente de uno de los bloques aliados de la Libertad Avanza deslizó a iProfesional que "hay antecedentes de definición por parte del presidente provisional" que jugarían a favor del oficialismo, pero señaló que se ven venir la controversia si se diera esa situación.

¿Qué intentará el oficialismo para evitar una controversia que recaliente la sesión?

La tropa libertaria tiene dos formas de evitar esto. La obvia es asegurarse la mayoría de 37 votos o al menos impedir que Unión por la Patria no supere los 34 que podrían alcanzar si el radical Martín Lousteau vota en contra por tener su propio dictamen. Pero la otra es manejar los tiempos de la votación para que no se solape con la partida de Milei rumbo a Italia para participar del G7.

El detalle clave está en que durante la reunión de Labor Parlamentaria que se realizó el último martes por la noche, el kirchnerismo logró que la Ley Bases y el proyecto fiscal se discutan por separado. Esto no estaba en los planes originales de La Libertad Avanza, que quería un único debate, pero en el escenario actual podría darles una ventaja.

Ocurre que la Ley Bases se tratará primero y existe la posibilidad de que la discusión de ese proyecto puntual dure unas siete u ocho horas antes de la votación. Si se estirara, el oficialismo y sus aliados podrían acotar la lista de sus oradores. En ese caso, el tema se resolvería en las últimas horas de la tarde y si hubiera un empate, Villarruel podría estar presente para definir y esquivar una discusión engorrosa sobre el reglamento.

Milei parte al G7 por la noche y el oficialismo apuntará a que la Ley Bases se vote antes para evitar controversias

Igualmente, en ese caso, el debate y la votación sobre el proyecto de Medidas Fiscales, que incluye la restitución del Impuesto a las Ganancias (el punto que más chances tiene de ser rechazado) y el blanqueo de capitales sí tendría a Villarruel afuera del recinto y a Abdala a cargo de la sesión. Si hubiera empate en la Ley Bases, es posible que se repita en el paquete fiscal.

¿Cómo está el conteo de votos para la Ley Bases?

Si bien el Gobierno es optimista en torno a la aprobación de los proyectos, en el oficialismo ya no ocultan que están muy ajustados. Mientras Unión por la Patria asegura que tiene totalmente alineados a sus 33 senadores -a pesar de que algunos gobernadores del peronismo empezaron a presionar- en el oficialismo ya cuentan como voto en contra a Lousteau.

De esa forma, el rechazo a la Ley Bases estaría sumando 34 voluntades mientras que La Libertad Avanza contaría con 36 gracias al apoyo del PRO, de la mayor parte de la UCR y bloques provinciales, pero siempre y cuando tenga el acompañamiento de Abad, que preside el radicalismo bonaerense y talla en la espinosa interna partidaria.

El senador radical mantiene en suspenso su voto y no atiende consultas de la prensa. Su entorno se volvió hermético. Las dudas pasan por el hecho de que en la votación del "mega DNU" que el Senado le rechazó a Milei él eligió abstenerse. La explicación que le dio a los suyos, según confirmó iProfesional, fue que no quería ir a contramano de su bloque -que votó a favor- pero tampoco contrariar a Lousteau, por ser el presidente de la UCR a nivel nacional.

La situación actual es muy similar. Si decidiera abstenerse también en la votación de la Ley Bases, el "sí" quedaría clavado en 35 votos. Un dato a tener en cuenta es que Abad tiene muy buena relación con Villarruel, con quien conversa casi a diario. En el oficialismo esperan que la vicepresidenta logre convencerlo de acompañar.

El rol clave de los senadores de Santa Cruz

En el medio quedaron los santacruceños Carambia y Gadano. Si votan en contra, el resultado sería de empate (con Abad a favor y Lousteau en contra) o de derrota para el oficialismo (si Abad se abstiene). Por esa razón, sus votos son clave y el Gobierno negocia contrarreloj un acuerdo. Pero el kirchnerismo también busca convencerlos de rechazar los proyectos.

La votación se perfila muy ajustada y el Gobierno negocia contrarreloj para acercar tres votos clave que le asegurarían el triunfo

Además, Unión por la Patria empezó a ejercer presión sobre la neuquina Lucila Crexell porque según trascendió en los últimos días el oficialismo le habría ofrecido el cargo de embajadora ante la Unesco, con sede en París. Horas antes de la sesión, el kirchnerismo filtró que esa designación ya está en trámite en la Cancillería con el fin de empañar su voto y tal vez alejarla del oficialismo.

El Gobierno necesita ganar como sea la votación de la Ley Bases aunque la oposición dialoguista diluya su contenido con más modificaciones de las previstas, debido a que de su aprobación depende el humor de los mercados y la sensación de estabilidad política de una gestión que todavía no tiene una sola ley aprobada.

El viaje de Javier Milei le agrega algo de incertidumbre a la sesión sobre la Ley Bases, pero el empate, si se diera, no sería algo trágico ni con Victoria Villarruel ni con Bartolomé Abdala en el recinto, porque la resolución será favorable al Gobierno. Lo único inconcebible para el oficialismo en este contexto es una derrota.

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