Massa, con el control del puerto de Quequén: denuncian tasas leoninas que cobra Jan De Nul por el dragado

Los acuerdos secretos entre el ex ministro y candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, están generando tensión en muchos organismos provinciales donde dirigentes que responden al Frente Renovador del tigrense buscan consolidar sus carreras políticas, cimentando sus aspiraciones electorales, al frente de importantes proyectos y organismos estatales.

El caso del Consorcio de Gestión del Puerto Quequén no es un ejemplo aislado ni, mucho menos, menor por la cantidad de divisas y licitaciones millonarias que realiza y por ser una de las principales plazas logísticas de la agroindustria.

Pues bien, el lunes 22 de enero, Jorge "El Pampa" Álvaro, amigo del extinto presidente Néstor Kirchner, del histórico diputado provincial kirchnerista, Carlos "Cuto" Moreno y del sindicalista Juan Carlos Schmidt ,de la Federación Sindical Marítima y Fluvial, presentó su renuncia al gobernador Axel Kicillof luego que el mandatario provincial consintiera que su dirigente de confianza, Carlos Bianco, se mostrara en un acto público en Necochea con María Jimena López, ex viceministra de Transporte de la Nación, de suma confianza de Sergio Massa, que utilizaría la presidencia del puerto para cimentar su carrera política en la región.

Si bien el gobernador Kicillof aún no confirmó el nombramiento de María Jimena López al frente del puerto de Quequén, el "Pampa" Álvaro se fue molesto de la gestión y en una conferencia de prensa realizada en las últimas horas, dejó trascender su malestar político con la situación y señaló a la empresa belga Jan De Nul de cobrar intereses leoninos al estado bonaerense.

Álvaro arremetió contra el actual directorio del puerto, criticó al intendente de Necochea, Arturo Rojas, al señalar que "...es un caradura y un maleducado, siempre me hizo críticas y nunca las fundamentó. Me separa un abismo moral del intendente", y advirtió acerca de la millonaria deuda en dólares que el ente portuario mantiene con el grupo Jan De Nul.

Contratos y licitaciones onerosas para el Estado

En ese sentido, Álvaro afirmó que es "escandalosa" la tasa de interés que abona el ente portuario por el dragado que acumula una millonaria deuda en moneda estadounidense con el grupo belga Jan De Nul, que además posee intereses en la Hidrovía, en el puerto de Buenos Aires y que constituye una empresa líder en el mundo en el sector de dragados.

En 2019, previo al de la asunción de Álvaro, el puerto pactó un préstamo de 32 millones de dólares con el Banco Macro y el estatal Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) para dragar el canal de acceso.

Los secretos entre Massa y Kicillog generan tensión en muchos organismos provinciales.

La obra fue adjudicada a Jan de Nul, pero, al día de hoy, se le deben a la compañía 2.500.000 de dólares. Para "El Pampa" Álvaro se trató de una maniobra financiera que terminó en "...un préstamo aceptado en términos leoninos porque nadie paga el 15% anual en dólares. Además, las compañías exportadoras pagan el 32% del dragado y el puerto el restante 68%".

El dragado permitiría que el puerto de Quequén, ubicado sobre las riberas de Necochea y Quequén, en el sudeste de la provincia de Buenos Aires encerrado entre dos escolleras y que opera unos 6 millones de toneladas embarcadas, se convirtiera en el puerto más profundo del país. Pero el funcionario saliente explicó que "...no es el puerto más profundo sino el canal más profundo de Argentina", que cuenta con un canal de mantenimiento.

El puerto paga una factura mensual de 882.000 dólares, una cifra creciente por la inflación estadounidense y argentina que afectó el precio del combustible utilizado para las operaciones, fuloil, y los convenios colectivos del sindicato de Dragado y Balizamiento. Jorge Álvaro señaló "Había que actualizar las tarifas por uso del muelle, pero el directorio del ente me votó en contra del cualquier aumento", a las empresas.

Acerca de su gestión (2020-2024) Álvaro rescató, la construcción de viviendas y locales comerciales para el hospital provincial Taraborelli y la instalación de una baliza en la escollera sur. Sin embargo, "...a pesar de muchos anuncios y chamuyos no se hicieron obras importantes como el nuevo puente y la escollera norte del puerto de Quequén". A pesar de ello, hay una licitación que está en el radar de Jan De Nul y de varios jugadores del sector.

La licitación de un elevador de granos

Una obra fundamental y millonaria que el gobernador Axel Kicillof licitará intentando obtener mejores condiciones e introducir nuevos operadores que no sean las empresas cerealeras con intereses en el puerto.

Fiel a su prédica estatista, en contraste con las razones que emanan desde el Gobierno Nacional, Kicillof ordenó que en el pliego se garantice prioridad a futuro para los intereses provinciales.

Asesores del gobernador señalaron que será fundamental "...que si el Estado necesita capacidad instalada de elevación tendrá la prioridad de su uso, abonando la tarifa correspondiente. Por ejemplo, si Banco Provincia o YPF Agro comprara granos y debiera embarcarlos tendría prioridad de uso del elevador".

En síntesis, Kicillof tratará que los usuarios de Quequén paguen un canon mayor por el uso de las instalaciones y, si el Estado las necesita, tendrá prioridad en su utilización.En todo caso, se trata de un paso más en el proyecto del gobernador de cambiar la ley de puertos que permitirá la estatización de Quequén y otras terminales pero que, por ahora, no puede presentar a consideración parlamentaria porque sabe que no tiene los números para su sanción.