Milei y la transición: por qué el Presupuesto 2024 será una prueba clave para su gobierno
Para el presidente electo, Javier Milei, el Presupuesto 2024 es un tema central porque las medidas económicas que ya anunció requerirán modificar varios puntos del proyecto de ley que ya fue enviado al Congreso por el ministro de Economía saliente y candidato derrotado, Sergio Massa, y, por esa misma razón, es el tema clave en la agenda de la transición que, hasta ahora, viene al menos accidentada.
Milei tiene una reunión pendiente con el presidente saliente Alberto Fernández, con quién ya habló por teléfono, pero los desencuentros de las últimas horas con Massa complicaron ese paso institucional. Fuentes del oficialismo señalaron a iProfesional que, a pesar de las versiones sobre un paso al costado del ministro, hay "predisposición para hacer una transición ordenada".
Sin embargo, en el entorno de Milei cayó mal que, tras la derrota, Massa dijera que la responsabilidad de lo que ocurra a partir de hoy es del presidente electo. En ese cortocircuito se advierte el tironeo por quién se hace cargo de transmitir el mensaje más tranquilizador posible al mercado ante la expectativa de una dolarización que haría saltar el tipo de cambio y también del ajuste que todos saben que es inevitable para la nueva etapa.
Aquí entra la cuestión del Presupuesto 2024 por las proyecciones que hizo el ministro saliente, la herencia que le dejará al nuevo gobierno y las medidas que se tomarían a partir del 10 de diciembre, con el agregado de que Milei necesitará apoyo para aprobarlo en el Congreso, donde no le sobra ningún voto y deberá tender algún puente con sectores del peronismo.
El Presupuesto 2024, clave para Milei en la transición
Milei señaló varias veces -y reflejó en su plataforma electoral- su intención de hacer un recorte del 15% del gasto público. Más allá de que esa medida drástica se haga en el primer año o de manera progresiva, el nivel del ajuste deberá reflejarse necesariamente en el primer presupuesto del nuevo Gobierno
"Estamos cerca de los 3 puntos del PBI en déficit. Es fundamental que se corrija lo más rápido posible", señaló el presidente electo en el raid mediático que protagonizó este lunes. Eso también requiere un nuevo proyecto de presupuesto o correcciones al que ya fue enviado, que estima un déficit del 1,9%, un número todavía alto para el plan del nuevo gobierno.
Además, medidas como el recorte de los subsidios a las tarifas o la privatización de los medios de comunicación públicos también dependen de cambios en el proyecto que está en la Cámara de Diputados desde septiembre o del envío de uno nuevo porque todo ello tiene asignación de recursos en el proyecto.
Para ordenar las nuevas proyecciones, será necesario que los equipos de Milei y de Massa conversen y se pongan de acuerdo sobre los números concretos de la macroeconomía que el ministro saliente -que hasta ahora tuvo el mando del Gobierno- le dejará al presidente entrante.
Se sabe que la herencia es pesada. Milei y su equipo esperan sinceridad por parte de la gestión saliente y también colaboración. Es por ello que el tono de la transición es clave para el diseño del nuevo Presupuesto 2024 que tendrá diferencias marcadas con lo que envió Massa.
Si bien el ministro negó categóricamente que vaya a renunciar o tomarse licencia como trascendió en la noche del domingo, quiere que sea Alberto Fernández el que se haga cargo de ordenar el proceso mano a mano con Milei. Así lo confirmó al comunicar este lunes que "puso a disposición del Presidente" el equipo de transición de Economía, el cual estará estará a cargo de Gabriel Rubinstein, Leonardo Madcur, Raul Rigo y Miguel Pesce por el Banco Central.
¿Cuáles son los números del Presupuesto 2024 que mandó Massa y que Milei modificará?
A esta situación, se suma que, luego de las elecciones primarias (PASO) de agosto y cuando Massa ultimaba los detalles del proyecto de Presupuesto 2024 que, por ley, debía ser enviado al Congreso antes del 15 de septiembre, hubo un acuerdo entre el ministro y el entonces candidato.
Milei pidió dilatar el debate del Presupuesto en el Congreso hasta después de los comicios que definirían al nuevo presidente y el ministro de Economía lo aceptó. Fue una especie de acuerdo simulado porque es usual que, en años electorales, el tratamiento de este tema se postergue.
De hecho, había caído mal en Juntos por el Cambio el intercambio entre Milei y Massa porque entendían que era parte del juego que ambos desplegaban para polarizar la elección y desplazar a Patricia Bullrich del camino al balotaje. Todo en la Argentina cambia muy rápido: hoy el PRO se alía a Milei y poco queda de aquel entendimiento político sobre la ley más importante para la economía.
El Presupuesto 2024 que envió Massa preveía un total de gastos de $67,8 billones y recursos por $55 billones, con un crecimiento estimado para la economía de 2,75% del PBI, una inflación anual del 70% y un déficit fiscal del 1,9%.
El valor del dólar oficial fue calculado en $600 pesos para fines de 2024 y se preveía una suba de ingresos a través de los derechos de exportación, la recaudación del Impuesto País y la reducción de subsidios energéticos. Muchas de esas proyecciones serán cambiadas por el gobierno de Milei.
¿Por qué el tema será la prueba de fuego para el nuevo Gobierno?
Milei necesitará mucho apoyo en el Congreso para aprobar el Presupuesto 2024, al cual se sumará una nueva ley de reforma del Estado para reducir la cantidad de ministerios y darle forma al esquema que tiene en mente para su Gobierno. El debate sobre estas leyes dará el primer indicio sobre el futuro de la nueva gestión.
Y es que el Presupuesto 2024 y la ley de reforma del Estado pondrán a prueba, en primer lugar, la fuerza parlamentaria de la alianza entre La Libertad Avanza y el sector "halcón" del PRO que lo apoyó en la campaña y, en segundo lugar, la capacidad del Gobierno de Milei de tender puentes con otras fuerzas políticas.
Es que Milei no tendrá los votos suficientes en ninguna de las dos cámaras del Congreso. A partir de diciembre La Libertad Avanza contará con 38 diputados de 257 y 7 senadores de 72. Necesitará de los legisladores del PRO y, según fuentes parlamentarias consultadas por iProfesional, con eso podría llegar a tener unos 60 votos en la Cámara baja y alrededor de 12 en el Senado.
Son números muy alejados de lo que necesitará para aprobar cualquier ley. Si bien la UCR ya expresó su voluntad de colaborar con la gobernabilidad en la primera etapa de Gobierno, Milei requerirá para aprobar su primer presupuesto votos del variopinto universo peronista y de bloques provinciales alineados con gobernadores independientes que, en la campaña, jugaron para Massa.
En ese sentido, en La Libertad Avanza ya mencionan a Guillermo Francos, futuro ministro del Interior, como el hombre clave para tejer acuerdos por su amplio conocimiento y experiencia dentro del mundo de la política. Por su parte, Milei también mencionó con interés al diputado electo por Juntos por el Cambio Miguel Pichetto, quien conoce como nadie la mecánica del Congreso y cumplió un rol central para el gobierno de Mauricio Macri desde el peronismo.
La aprobación de estas primeras leyes básicas para el arranque de la gestión de Milei serán así una especie de iniciación para el outsider de la política que desde el 10 de diciembre se sentará en el Sillón de Rivadavia. El Congreso será la prueba de fuego.