¿Quién ganó el debate entre Massa y Milei?: el logro del ministro y el plan del libertario de volver a su origen
El debate entre Sergio Massa y Javier Milei rumbo al balotaje del 19 de noviembre fue muy distinto a los anteriores porque el formato cambió y permitió un intercambio más fluido entre los dos candidatos presidenciales. El oficialista fue quien mejor lo aprovechó con preguntas concretas que descolocaron al libertario, quien trató de volver a su rol original de referente de la "anti política".
Como ministro de Economía que debe responder por una inflación muy superior al 100% anual y una tensión cambiaria permanente (entre otros problemas), Massa debería haber sido el más presionado para dar explicaciones de cara a los votantes. Sin embargo, generó la situación inversa al poner a Milei a dar explicaciones sobre sus ideas más polémicas.
No por casualidad, el candidato de Unión por la Patria jugó al ataque frontal en el primer bloque del debate, donde el eje temático era la Economía. Dedicó casi la totalidad de sus 6 minutos a hacerle preguntarle insistentemente a su rival si va a dolarizar la economía, eliminar subsidios, cerrar el Banco Central y otros puntos de su plataforma y de sus diversas declaraciones durante la campaña.
Con esto descolocó a Milei, quien a pesar de su intento por salir de la encerrona usó todo su tiempo en responder, bajo presión, las preguntas de un ministro de Economía que salió indemne de ese bloque sin recibir si quiera un solo cuestionamiento de su rival sobre la inflación, palabra con la que no lo presionó ni una vez.
El candidato de La Libertad Avanza se recuperó un poco en la segunda parte del debate, cuando remarcó que la creación de empleo registrado "se estancó en 2011" y le arrojó a oficialista con el juicio político que el kirchnerismo lleva adelante contra la Corte Suprema, pero igualmente Massa esquivó los golpes y se llevó lo que fue a buscar: mostrarse "presidenciable" y exponer a Milei como alguien que no está preparado para gobernar.
¿Quién ganó el debate, Massa o Milei?: los golpes más duros del ministro
Resulta difícil que el debate cambie el voto de la gente que ya sabe a cuál de los dos candidatos va a elegir el próximo domingo. Es más probable que influya en alguno de los indecisos, pero tampoco está probado que esto se dé así a gran escala. El debate es en definitiva solo una herramienta más de campaña y, en ese sentido, Massa la usó mucho mejor que Milei.
Desde el arranque, el libertario mostró su intención de volver a su rol original. Habló del "modelo empobrecedor de la casta", de "políticos que roban" e insistió en que "el Estado es el origen del problema" en el mismo tono que lo hizo conocido, apenas más controlado. Pero inmediatamente quedó expuesto que el ministro llegó a la cita mejor preparado.
Massa bombardeó a Milei con preguntas para acusarlo de contradecir su propia plataforma electoral. Así, lo llevó a ratificar que va a "dolarizar" la economía y que también va a "terminar con el Banco Central" porque "es la forma con la que roban" los políticos. También lo acusó al ministro de "mentiroso" y de "engañar y asustar a la gente" con el tema de la suba de las tarifas de transporte por la quita de subsidios.
El oficialista metió al libertario donde quería y aprovechó para afirmar que Milei plantea "la vuelta de la AFJP" con las que hoy "hay 21.750 jubilados que cobran entre 5 y 20 mil pesos" y que "la dolarización que propone" implica "apropiarse del ahorro de la gente". Con ello, reforzó su mensaje de campaña de que la salida para la Argentina no es esa sino "potenciando exportaciones" que llevarán a ganar "40 mil millones de dólares más el año que viene".
Pero además, aprovechó la temperatura cada vez más alta de esa discusión para jugar una carta que nadie esperaba. En medio de una chicana con la idea de someterse ambos a un examen psicotécnico, Massa llevó a Milei a reconocer que una vez fue pasante en el Banco Central y lo desafió: "Contale a la gente por qué no te renovaron la pasantía".
El libertario se mostró incómodo y el oficialista logró dejar flotando en el aire dudas sobre la estabilidad emocional o incluso psicológica de su rival, para luego rematar que su idea de "terminar con el Banco Central" deriva de una mala experiencia personal: "Entiendo que estés enojado con el Banco Central porque te sentiste rechazado".
El uso del debate por parte de Massa: mostrar como inexperto a Milei
Ese fue uno de los momentos más tensos del debate, pero no el único. Massa también incomodó a Milei al momento de hablar sobre las relaciones de Argentina con el mundo. Allí, el ministro hizo hincapié en lo que hace al comercio internacional y trató de exponer al libertario como alguien que desconoce las funciones del Estado pero, además, que puede perjudicar a los sectores productivos que exportan.
Milei reiteró que él cree "en el comercio internacional y la apertura" de la economía al mundo pero que "el Estado no tiene por qué interferir en las relaciones comerciales", al tiempo que señaló que su idea de no relacionarse con Brasil o China no afectará el comercio porque "es una cuestión de los privados".
Por su parte, Massa reafirmó que esos dos países son socios estratégicos de la Argentina y que el comercio con ellos "le da trabajo a dos millones de argentinos". Milei respondió: "Vos pertenecés a un gobierno en el que Alberto Fernández no hablaba con (el ex presidente de Brasil, Jair) Bolsonaro".
Sin embargo, el ministro retrucó que "las relaciones las establecen los países, los aranceles los establecen los países" y que así "funciona el mundo", tras lo cual agregó: "No le estás diciendo a la gente que por prejuicio ideológico vas a dejar a dos millones de argentinos sin trabajo".
Si bien nunca perdió la compostura, Milei reiteró varias veces su visión de que el Estado está formado por "políticos que roban" y que por ello no debe intervenir, sino que los privados pueden "comercializar con todos los que quieran", pero Massa logró exponer el desconocimiento de su rival sobre la forma en la que se rigen ese tipo de relaciones entre países.
"El principal comprador de soja en el mundo es China, que sepan los productores agropecuarios" que "desgraciadamente lo que estamos viendo es alguien que por prejuicio ideológico antepone su propia mirada al interés de los argentinos", apuntó Massa, al tiempo que señaló que Milei está "mandando a los exportadores a Brasl o a China a triangular vía Panamá o paraísos fiscales".
El contragolpe de Milei: pobreza, kirchnerismo y recuerdos incómodos
El candidato de La Libertad Avanza tardó en entender el juego de Massa y adaptarse. Empezó a encontrarle la vuelta al debate como recurso de campaña cuando discutieron sobre Educación y Salud, momento en el que el oficialista reiteró su propuesta de destinar "8 puntos del PBI a la inversión educativa" y de incluir la robótica en la educación primaria, al tiempo que planteó la intención de crear un "seguro de salud universal para los ciudadanos argentinos".
"Interesantes las propuestas del ministro Massa. Su signo político lleva 16 años en el poder, no sé por qué no lo hicieron", lanzó el libertario. Además, al subrayar que "solo el 16% de los chicos termina el secundario en tiempo y forma" y que "el 50% no entiende lo que lee", Milei logró responsabilizar a Massa por el crecimiento de la pobreza infantil y poner esto como el problema original en materia de educación.
De allí en adelante, el libertario se adaptó al juego de las chicanas y el desarme del rival que propuso el oficialista. En esa línea, señaló que el candidato de Unión por la Patria "pertenece a un espacio que le hizo 14 paros a Alfonsín y lo sacó a De la Rúa para voltear la convertibilidad", al tiempo que tocó otros temas que son medulares para el votante opositor.
Entre ellos, sostuvo que con el kirchnerismo el país "estuvo al borde de una guerra civil" durante la pelea por la Resolución 125 sobre retenciones al agro, recordó la sospechosa muerte del fiscal Alberto Nisman después haber denunciado a Cristina Kirchner, a quien calificó como "jefa" del espacio político de Massa.
Si bien no logró esbozar propuestas concretas y en cambio se metió en las explicaciones teóricas sobre economía liberal que lo hicieron tan famoso como su discurso contra "la casta política", Milei consiguió con esas críticas mostrarse recuperado frente a Massa, aunque a esa altura del debate el ministro ya había logrado su objetivo y no le costó recuperar la ofensiva.
Massa retomó su estrategia de poner a Milei a dar explicaciones y lo presionó para que respondiera si va a "arancelar las universidades", a lo que finalmente el libertario dijo que "en el corto plazo no". Eso fue suficiente para que el oficialista volviera a tomar la ofensiva y le hablara a los padres sobre la cifra millonaria que costaría la educación universitaria de sus hijos.
Ni Macri ni Cristina, es Massa o Milei: las jugadas finales del ministro y el libertario
La pelea se emparejó y el debate se convirtió rápidamente en un cruce permanente de chicanas. Milei remarcó la alianza de Massa con el kirchnerismo y el oficialista le retrucó con su acercamiento al ex presidente Mauricio Macri tras perder en la primera vuelta. También se tiraron mutuamente con sus amistades empresariales.
En ese intercambio, Milei se mostró descolocado varias veces. Massa señaló que su último libro fue denunciado tres veces por "plagio", ante lo que el libertario solo sonrío. Más adelante, cuando exponían sobre Seguridad, el referente de La Libertad Avanza guardó silencio unos segundos sin saber qué hacer cuando el oficialista terminó de hablar y simplemente le volvió a ceder la palabra.
Sin embargo, uno de los puntos clave de la pelea de cara al balotaje fue el desafío que lanzó Massa en dos oportunidades a su rival al afirmar: "Esto no es entre Macri o Cristina, esto es vos o yo. Ellos ya tuvieron su oportunidad, ahora es vos o yo y los Argentinos deciden sobre eso".
Con esa idea, Massa cumplió un doble objetivo: seguir el camino de la "deskirchnerización" de su campaña y forzar la comparación entre ambos en términos de la capacidad de cada uno para gobernar, que fue el objetivo central de Massa en todo el debate. Milei no se inmutó por ese desafío y se enfocó en lo que, sin dudas, tenía más ensayado: su discurso de cierre.
En ese bloque final, ambos tenían que decir por qué quieren ser presidente. Massa fue a lo concreto y le habló a las mujeres, a "los abuelos", a los chicos que quieren estudiar en la universidad pública y remarcó su idea de un gran acuerdo nacional sobre 10 políticas de Estado.
En cambio, Milei fue más directo y efectivo en cuanto al balotaje que lo enfrenta a Massa, al apelar al hartazgo del votante con la situación económica. "Te pido que al momento de evaluar tu voto te preguntes si querés seguir con la inflación", lanzó y remató: "Que cuando vayas a votar lo hagas sin miedo, porque el miedo paraliza y se te paralizás gana el statuso quo".
Así resumió su campaña al tiempo que atacó a la de Massa, cuyo mayor capital como candidato es precisamente tener enfrente a un outsider que genera dudas y temores por sus controvertidas expresiones en temas muy sensibles para vastos sectores de la sociedad.
Segundos afuera. El próximo domingo se define quién de los dos será el nuevo presidente.