Por presunto espionaje a jueces, allanaron a un dirigente de La Cámpora y subdirector de AFIP
Las oficinas del subdirector de la AFIP y dirigente de La Cámpora, Fabián "Conu" Rodríguez y su casa, fueron allanadas este lunes luego de que se recuperaron mensajes borrados del celular del ex policía preso, Ariel Zanchetta, en el marco de la investigación por el espionaje a un grupo de jueces, entre ellos miembros de la Corte Suprema.
Los procedimientos fueron ordenados por el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi, estuvieron al cargo de efectivos de la Gendarmería y se llevaron a cabo en la sede de la AFIP y en la vivienda del Rodríguez, que es un ex miembro del gobierno bonaerense de Axel Kicillof.
Martínez Di Giorgi secuestró celulares, documentos y computadoras de la oficina por pedido del fiscal Gerardo Pollicita y fuentes judiciales indicaron que lo que se buscan son más pruebas de los vínculos entre Zanchetta y Rodríguez, así como de la empresa Sudamericana de la cual el policía detenido sacaban informes de antecedentes de jueces, fiscales y opositores.
El magistrado está realizando otros allanamientos luego de haber levantado el secreto de sumario en la causa y los voceros señalaron que en la causa se anexó un informe que demuestra que en el teléfono de Zanchetta también aparecen diálogos con el diputado kirchnerista Rodolfo Tailhade, quien estaba agendado entre sus contactos.
En tanto, señalaron que no se pueden allanar las oficinas de Tailhade en la cámara de Diputados por los fueros que tiene el legislador que acaba de extender su mandato, en las últimas elecciones por cuatro años más.
Espionaje a jueces: la causa
La causa por el espionaje a los jueces se inició primero para buscar esclarecer las líneas creadas en Misiones a nombre del presidente de la Corte Suprema, Horacio Rosatti, que fueron el origen de la denuncia. A partir de allí se descubrió que esas líneas truchas habían tenido contacto con otra generada a nombre del vicepresidente de la Corte, Carlos Rosenkrantz. Con el curso de la investigación, apareció además otra línea a nombre del juez del máximo tribunal Ricardo Lorenzetti.
En tanto, la causa tiene un segundo foco que apunta a saber por qué hackearon al mismo tiempo a dos jueces de Casación, Mariano Borinsky y Gustavo Hornos, y a dos jueces que llevaban adelante el juicio contra Cristina Kirchner, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso. Esa pista llevó a la detención de un hacker misionero, Ezequiel Núñes Pinheiro, que aseguró haber sido contactado por Telegram por un desconocido para tomar el control de una lista de personas que él desconocía y entre los que había varios jueces, el diputado Diego Santilli y el ex jefe de Seguridad de la ciudad, Marcelo D’Alessandro.
La investigación también desencadenó la detención de Zanchetta, quien dice ser periodista y es quien buscó los datos de los jueces Gustavo Hornos, Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi, Ernesto Kreplak y de los ministros de la Corte Suprema Ricardo Lorenzetti, Juan Carlos Maqueda y Horacio Rosatti. El contenido del teléfono de Zanchetta disparó una tercera causa anexa y es la que investiga lo que apareció en sus dispositivos y revelan los detalles de una actividad de recolección de información, incluso de bases clandestinas, que apuntó contra políticos y dirigentes opositores.