¿Javier Milei logra dar el salto para derrotar a Massa después del apoyo de Macri y Bullrich?
Fulminante fue el crecimiento de Javier Milei para algunos estudiosos de opinión pública, luego de recibir el apoyo de Mauricio Macri y Patricia Bullrich. Al punto de que horas después de la elección general que lo ubicó casi siete puntos por debajo de Sergio Massa, ambos postulantes estaban cabeza a cabeza de cara a la segunda vuelta que promete ser para el infarto.
Por cierto, muchos dudan del efecto real del pase en materia de traslado de votos. "Naturalmente, muchos votantes de Patricia están más cerca de Milei que de Massa, te diría que el 50% se hubiese mudado espontáneamente, aunque ella no se hubiese pronunciado", explica uno de los especialistas en opinión pública. "La expectativa es que el traslado se consolide en un 70% o más en los próximos días", concluye.
Por el lado de Milei hay una renovada esperanza. Es cierto que existen algunas resistencias y que fue perdiendo legisladores electos con la excusa del acuerdo, pero sus estrategas concluyen que los hubiesen perdido de todos modos. "Mira son la gente del peronismo que entró por nosotros. Estaban esperando entrar para romper y volver al redil. Lo previmos, no nos daba para armar las listas por la nuestra. Si no era ahora, era el día que asumieran, mejor ahora así sabemos con que contamos si ganamos", explica el encumbrando dirigente de LLA.
Respecto de sus listas de candidatos a diputados y senadores nacionales más relevantes, como los electos por la Ciudad de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires y Córdoba, hay conformidad por el acuerdo. Una diputada que obtuviese su banca por el distrito más populoso del país le decía a este cronista: "Está muy bien, recuperamos la expectativa, la depresión post electoral fue fuerte, ahora nos sentimos de vuelta en carrera y si llegamos a ganar, Macri y Bullrich tienen aportes para hacer en materia de dirigentes y proyectos que nosotros no tendríamos de donde sacar, acá nadie gestionó nada ni en lo privado te diría" concluye la dama.
Milei crece con el apoyo de Macri: el nuevo papel de los radicales
Por el lado de Sergio Massa, el acuerdo inquieta. El de Tigre fue perfectamente consciente de que no había ganado nada el domingo 22. Tenía una ventaja, dio una gran sorpresa hasta para él, pero la pelea continúa. Con sus matices, Daniel Scioli tuvo resultados parecidos en 2015 y pereció en la segunda vuelta. Su experiencia le dijo que no había nada que festejar todavía.
Hoy hace cuentas. Llama a un gobierno de unidad nacional, es cierto, pero lo que más dudas le merece es el valor electoral de los radicales en esa convocatoria. Y aquí uno de los fenómenos más confusos del proceso que viene. Gerardo Morales y Martín Lousteau se suben con singular entusiasmo al massismo, lo militan, pelean a capa y espada con Bullrich y Macri, pero el propio Massa, que les habría ofrecido dos ministerios: Interior para Morales y Producción para Lousteau, ya no está tan seguro de entregar dos carteras a dirigentes que parecen tener muy pocos votos. "Tres o cuatro puntos no valen dos ministerios" dicen en sus cercanías.
"Los radicales son una cáscara vacía. Nadie puede saber cuántos votos tienen porque desde 2015, que (Ernesto) Sanz compitió con Macri y sacó 3,5% no van a una elección nacional, siempre se escondieron detrás de alguien, pero todo indica que su volumen sigue siendo mas o menos ese", dice uno de los armadores massistas, más proclive a acentuar la campaña del miedo sobre la inestabilidad de Milei que de comprar "paquetes cerrados sin nada adentro", especula.
Sergio escucha a ese círculo íntimo. Recibe informes de los gobernadores que le dieron vuelta la elección a Milei en el interior y ninguno avala incorporación de los radicales a tan alto costo. Por otro lado, y por ahora, no se la han jugado tan abiertamente como un ballotage lo requiere, hablan todavía de neutralidad. "Imaginate que si tienen tres puntos y ni siquiera se vuelcan abiertamente ¿Qué estamos comprando?", se aventura uno de los más relevantes discípulos de Massa.
Hay claro, problemas de gobierno que afectan la campaña más que la irrelevancia radical. El ministro-candidato esta furioso porque nadie vio venir la crisis de los combustibles. La titular del área de Energía, Flavia Royón, ha recibido encendidas reprimendas. Y no es para menos. Mientras desde economía han consigo controlar la devaluación, dibujar la inflación y evitar deterioros mayores en el camino al 19 de noviembre, se les filtró una problemática más piantavotos que el dólar a mil pesos.
"Esas son las boludeces que no nos tienen que pasar. Tenemos un electorado que ya sabemos cómo contener, es ese 37% que ya nos votó. Pero con eso no alcanza, ahora hay que sumar tipos que votaron a otros. Jugamos con el miedo a Milei y puede resultar, pero si no dejamos a la gente sin combustible, sino el miedo lo damos nosotros", afirma la fuente massista, indignada.
El impacto de la crisis en los combustible
La crisis de los combustibles fue un impacto, y la comunicación sobre responsabilidades otro error. "Encima salimos a culpar a la gente por llenar el tanque del auto. Pero esos mismos son los que necesitamos que nos voten, una idiotez", se indigna el mismo dirigente.
Lo cierto es que faltan menos de tres semanas y nada está dicho. Convengamos que este problema de abastecimiento es mejor ahora que dentro de 15 días, todavía puede arreglarse y olvidarse, en un país de memoria cada vez más corta. Y hay una ciega confianza en los futuros errores de comunicación de Milei. "Los del PRO pueden esconder a algunos de los raros que tiene Javier. Pero no lo pueden esconder a él, y el tipo es una bomba de tiempo, se lo ve desequilibrado, el tiro en los pies es inminente", se ilusiona el estratega peronista.
Queda mucho tiempo por delante, y a la vez, muy poco, pero todo indica un final cabeza a cabeza, como aquel de Scioli contra Macri, en el que cualquier cosa puede pasar.