¿Cuánta gente irá a votar?: la abstención en las PASO y la pregunta que inquieta a los candidatos
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El nivel de participación ciudadana que habrá en las elecciones primarias (PASO) es una incógnita que inquieta a oficialistas y opositores hace ya varias semanas. Sobre el final de la campaña casi todos los candidatos mostraron su preocupación por este tema y el clima que se generó en los días previos potenció los temores.
Desde la recuperación de la democracia en 1983 la participación de la ciudadanía en elecciones presidenciales estuvo siempre entre el 75% y el 85%. Luego del debut de las PASO en 2011 se observa que el ausentismo suele ser mayor en esta instancia que en las generales, por lo que es esperable una diferencia entre agosto y octubre.
Sin embargo, la seguidilla de elecciones provinciales con una participación por debajo del 70% y el clima de insatisfacción política o hartazgo cultivado entre inestabilidad cambiaria, de precios y una llamativa coincidencia de hechos violentos (en robos y protestas) que resonaron en los medios sobre el cierre de la campaña prendió algunas alertas en los comandos de campaña.
Y es que una baja participación puede distorsionar el verdadero potencial de cada candidato rumbo a las generales de octubre. Alterar el panorama que, se supone, dibujan las PASO sobre los comicios definitivos. En el ausentismo hay votantes que pueden favorecer a uno o a otro y esto es lo que tienen bajo la lupa hoy casi todos los candidatos, en especial el oficialista Sergio Massa, pero también opositores como el libertario Javier Milei.
El viernes la Cámara Nacional Electoral (CNE) también puso atención sobre el asunto. En un comunicado, recordó que "este año la República Argentina cumple 40 años de democracia ininterrumpida" y consideró necesario "recordar el valor del sufragio como la función constitucional más importante encomendada a la ciudadanía para el nombramiento de los gobernantes y la participación en la decisión de los asuntos públicos".
¿Cuánta gente irá a votar en las PASO?: los cálculos previos y la inquietud política
Como contó iProfesional, en el oficialismo temían que vote apenas entre el 60% y el 65% del padrón. En la oposición evitaron hacer pronósticos ante las consultas por este tema, aunque hubo indicios. Milei, por ejemplo, en su cierre de campaña le pidió a sus seguidores que "no se queden en sus casas" y vayan a las urnas.
A pesar de ello, en el oficialismo creen que el ausentismo puede beneficiar al libertario o a Juntos por el Cambio. En su última aparición de campaña, al terminar un jueves caótico, Massa hizo hincapié en el llamado electoral. "Te pido que vayas a votar", remarcó varias veces. El ministro y candidato cree que en la abstención hay votantes que en 2019 acompañaron al Frente de Todos y hoy están desencantados. Estima entonces que una mayor participación le jugaría a favor.
No obstante, el nivel de concurrencia de la ciudadanía a las urnas es un factor clave para cualquiera de los candidatos. Esto lo saben bien en Juntos por el Cambio, por la experiencia del ex presidente Mauricio Macri en 2019, cuando recortó en las generales la diferencia que le sacó el actual presidente Alberto Fernández en las PASO.
En las primarias de 2019 la participación fue del 76% según los registros oficiales. Macri cosechó el 31% de los votos contra el 47% de Fernández. Para las generales, asistió a votar el 80% del padrón y el entonces presidente saltó al 40% mientras que su rival subió un punto.
Los números muestran así que, más allá de las preferencias de los votantes y de los intereses particulares de cualquier candidato, la participación de los ciudadanos en las elecciones marca la diferencia.
¿Cuál fue el nivel de abstención en las provincias que ya votaron?
Los resultados de las provincias donde ya hubo elecciones a gobernador o primarias agregan más incertidumbre al panorama sobre la participación. Entre las 17 que fueron a las urnas en lo que va del año, en 8 la participación estuvo por debajo del 70% y solo en una por arriba del 80%.
Entre las provincias que eligieron gobernador, Río Negro, Córdoba y San Juan tuvieron 68% de asistencia a las urnas sobre el total del padrón y Salta tuvo 69%. El registró más alto se dio en Tucumán, donde la participación fue del 83%, y le siguieron San Luis (76%); Neuquén (76%); Jujuy (74%); Formosa (74%); La Pampa (73%); Tierra del Fuego (71%); Misiones (71%) y La Rioja (70%).
En las PASO de Mendoza la concurrencia a a los centros de votación fue del 65%, mientras que en las de Chaco fue 62% y en las de Santa Fe apenas el 60%. En tanto, en Corrientes se realizaron elecciones legislativas (votará a gobernador en 2025) y la participación fue del 66%.
40 años de democracia: ¿cuál es la participación de los argentinos en elecciones presidenciales?
Desde 1983 la concurrencia a las urnas osciló entre el 75% y el 85%. Los registros más altos se dieron en la década de 1980: en las presidenciales de 1983 que marcaron el regreso de la democracia y consagraron a Raúl Alfonsín como presidente fue del 85,6% y en 1989, cuando ganó Carlos Menem, fue 85,3%.
Según los registros oficiales, en las siguientes dos elecciones presidenciales, la concurrencia a las urnas bajó levemente, pero se mantuvo alta: 82% en 1995, cuando Menem fue reelecto, y 82,3% en 1999, cuando triunfó la Alianza que lideró Fernando De la Rúa.
Luego de la crisis de 2001 la participación volvió a bajar y en las elecciones de 2003 fue del 78,2%. El ganador fue Menem pero renunció al balotaje y dejó así como presidente electo a Néstor Kirchner. En 2007, cuando concluyó su mandato y fue electa su esposa, Cristina Kirchner, la concurrencia fue del 76,2%.
En 2011 Cristina Kirchner fue reelecta como presidenta en una elección donde la participación fue del 78,6% y en 2015 fue de 74,9% en las generales y 80,77% en el balotaje donde Mauricio Macri se impuso sobre Daniel Scioli. Por último, en las elecciones de 2019 en las que fue electa el presidente Alberto Fernández la concurrencia fue del 80%.