Se recalienta la interna entre el PRO y la UCR de cara a 2023: ¿benefician a Macri las críticas de Manes?
Las críticas del diputado de la UCR Facundo Manes al ex presidente Mauricio Macri renovaron la pelea de fondo que se libra en Juntos por el Cambio entre el radicalismo y el PRO de cara a las elecciones de 2023, donde el ex mandatario se empieza a ubicar en un rol central que es mirado de reojo por Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, mientras distintos sectores analizan lo que ocurrió en Brasil.
Manes, a quien un amplio sector de la UCR imagina como su candidato presidencial, exhibió una vez más sus diferencias con el PRO y especialmente con Macri, al que acusó de haber hecho "populismo institucional" durante su gestión y sostuvo que "hubo evidencia de que se espió a gente incluso de su gobierno". Sin embargo, en esta ocasión, la reacción a sus comentarios fue distinta.
Los dardos del radical -que se suman a los que cada tanto le tira el presidente de la UCR, Gerardo Morales- pusieron nuevamente a Macri en el centro de la escena. Sin siquiera salir a responder, el ex mandatario vio como su nombre se volvía tendencia en las redes sociales mientras se multiplicaban las críticas e improperios contra el diputado, así como los pedidos de expulsión de Juntos por el Cambio.
El ataque motivó una fuerte defensa de la figura de Macri por parte de dirigentes duros y moderados del PRO. Desde los diputados Fernando Iglesias y Silvia Lospennato, hasta los colaboradores más cercanos del ex presidente como el ex secretario de Cultura Pablo Avelluto y el legislador Darío Nieto, salieron al cruce de Manes.
Fuentes del PRO consultadas por iProfesional evaluaron que la nueva polémica -que posiblemente motivará una "cumbre" de los líderes de Juntos por el Cambio para los próximos días- les sirve mucho más a ellos para solidificar su base electoral e incluso ampliarla y que, en ese esquema, "beneficia a dirigentes como Mauricio y Patricia, e incluso a (Javier) Milei le puede servir".
La interna PRO-UCR: ¿se beneficia a Macri con las críticas de los "moderados"?
Mientras Manes intenta ubicarse por arriba de "la grieta" que, a su criterio, está dada por "dos liderazgos, Mauricio Macri y Cristina Kirchner" y que "impide pensar un país", en el PRO evalúan que "está ofreciendo algo que la ciudadanía no está demandando" y especialmente el votante más fiel a Juntos por el Cambio, por su rechazo al kirchnerismo.
En el sector de los "halcones" consideran que actualmente "no hay votos de centro" y ponen de ejemplo que en las elecciones legislativas de 2021 "(Florencio) Randazzo como anti grieta sacó el 3% en la Provincia" y el crecimiento que tuvieron tanto los liberales de Milei y José Luis Espert como la Izquierda, "que no son de centro".
Ante ese escenario, las críticas de Manes contra Macri podrían surtir el efecto contrario al que busca buena parte del radicalismo: fortalecer un poco más al PRO en la pulseada por liderar a la oposición para las elecciones de 2023 y posicionar mejor al ex presidente frente a Rodríguez Larreta, su rival más duro en el partido amarillo.
El ex mandatario estira el misterio sobre si será o no candidato presidencial nuevamente. Lo definirá en marzo, según deslizan en su entorno. Mientras tanto, da señales de querer moldear la identidad del partido que creó como la que ofreció la semana pasada, al avisar que va a "jugar" en la interna entre Larreta y Bullrich "si al final del camino alguno de los dos no garantiza el cambio".
Cuando habla de "cambio", Macri representa al votante más opositor al kirchnerismo y al Gobierno en general, el mismo al que le habla Bullrich. Ese electorado es el mismo que se abroquela y reivindica su presidencia cuando recibe críticas desde adentro de Juntos por el Cambio, como fue la de Manes.
A eso se le suma que entre quienes asesoran al ex presidente hay desde hace tiempo una creencia de que si decidiera ser candidato en 2023, el capital electoral de Bullrich se volcaría por él.
La interna del PRO: Macri, Larreta, Bullrich y una mirada sobre Brasil
Tal vez con el mismo análisis, en el larretismo especulan con que Macri se prepara para ser nuevamente candidato y con que al final, ya sea con PASO o con elecciones internas (el plan B de Juntos por el Cambio ante la suspensión que quieren los gobernadores peronistas) deberán enfrentarlo a él y no a la presidenta del PRO.
Cerca de Bullrich, según fuentes consultadas por iProfesional, confían en que Macri finalmente no será candidato porque "en las zonas periféricas de los grandes centros urbanos los números le dan mal y son mejores para Patricia". Les preocupa algo más Milei, cuyos votantes son clave para ella.
La titular del PRO avanza con su campaña centrada en marcar presencia en los conflictos más resonantes: participó de una marcha contra las "tomas mapuches" en Río Negro el fin de semana pasado y antes de eso visitó la sede de Firestone en pleno conflicto del neumático.
En su entorno consideran que Macri solo podría ser candidato en 2023 si Cristina Kirchner decide presentarse. La novedad es que se trata de un escenario que varios empezaron a imaginarse este lunes, después de las elecciones en Brasil, donde Luiz Inácio "Lula" Da Silvia se impuso por 5 puntos sobre el presidente Jair Bolsonaro y se encaminan a un balotaje muy peleado.
El auditor general y ex compañero de fórmula de Macri, Miguel Pichetto, alentó esa competencia al afirmar que "no se puede hacer política con los suplentes, lo que viene lo deben jugar los titulares" y poner de ejemplo precisamente las elecciones brasileñas.
Una puja electoral entre los dos ex presidentes polarizaría al extremo el escenario político y dejaría poco margen para el resto de los dirigentes que se preparan para competir. Se consagraría la "grieta" que Manes trata de saltar.
Silencio radical: ¿qué busca Manes?
Los radicales vienen de ensayar el fin de semana un importante gesto de unidad en la provincia de Córdoba, donde Manes y referentes como Mario Negri, Alfredo Cornejo y Martín Lousteau asistieron al acto que ubicó como nuevo líder del radicalismo cordobés a Rodrigo de Loredo. Sin embargo hubo silencio tras la polémica que generó el neurocientífico.
En las horas posteriores, distintos sectores del radicalismo esquivaron las consultas sobre las declaraciones de Manes respecto del gobierno de Macri. El diputado sigue siendo "favorito" en el radicalismo para la interna presidencial dado que las encuestas lo siguen ubicando por encima de Morales, pero los correligionarios optaron por mantenerse al margen.
Uno de los pocos que rompió ese silencio fue el diputado Martín Tetaz, cercano a Lousteau, quien sostuvo que Juntos por el Cambio "necesita a todos sus líderes juntos" y "espalda con espalda", al tiempo que mencionó precisamente a todos, de Macri a Manes, y de Elisa Carrió a Ricardo López Murphy.
Los dichos de Manes, de todas formas, no son nuevos y tienen su razón de ser en que su estrategia apuesta efectivamente a buscar votos fuera de "la grieta" para "ampliar la base electoral" propia y, en definitiva, de la coalición opositora.
Hasta pocos días antes de la nueva polémica, en el equipo de campaña del diputado radical solían señalar que "es un error creer que Facundo le puede robar votos de derecha a Macri". Explicaban de esa manera los frecuentes gestos diferenciación que ofrece el neurocientífico, como su negativa a firmar junto al resto de Juntos por el Cambio un pedido de juicio político contra el presidente Alberto Fernández.
Contrariamente a lo que piensan en el PRO de cara a las elecciones de 2023, en la UCR bonaerense que impulsa a Manes trabajaron hasta ahora en atraer al votante más moderado mientras observaban como "lógico" el posicionamiento de Macri para hablarle a los más "duros".
"El mercado nuestro es otro: ampliar la base electoral y apelar al voto útil", resumió días atrás uno de los asesores que trabaja en el "proyecto Manes".
No obstante, un sector del radicalismo que apuesta todo a la "nueva estrella" de la UCR también evalúa que la figura de Macri y la expectativa sobre su rol desordena al PRO, que tiene que definir una interna mucho más difícil que la del radicalismo.