Prórroga de impuestos: los tributos que el Gobierno quiere extender y por qué son clave para el plan de Massa
Después de varias postergaciones, el Gobierno empezó a mover en el Congreso el proyecto para prorrogar seis impuestos por 5 años con el apoyo de un puñado de aliados en la Cámara de Diputados y pese al rechazo de Juntos por el Cambio. La intención es garantizar la base de apoyo al Presupuesto 2023 y evitar un desfinanciamiento que podría ser grave.
El proyecto enviado por el Poder Ejecutivo en agosto se aprobó en la Cámara de Diputados con el número justo de 129 votos a favor, contra 100 negativos y 18 abstenciones y ahora pasará por el Senado. Plantea la extensión de la vigencia de los impuestos a las Ganancias; sobre Bienes Personales y sobre créditos y débitos bancarios, más conocido como impuesto al cheque.
También el gravamen sobre el precio final de venta de cigarrillos; los impuestos del régimen de monotributo y el de Capital de Cooperativas, además de las asignaciones específicas del IVA y el impuesto sobre los pasajes al exterior. Todos vencen a fin de este año y la iniciativa oficial los prorroga hasta el 31 de diciembre de 2027.
El tema estaba trabado debido a que el interbloque de Juntos por el Cambio presentó un dictamen de minoría donde mantenía la prórroga pero proponía modificaciones, entre las que se destacaba una rebaja en Bienes Personales. Esto abrió una negociación con el Frente de Todos.
Si bien no hubo un acuerdo, el Frente de Todos lo metió sorpresivamente en la sesión celebrada este jueves. La decisión se tomó luego de que el ministro de Economía, Sergio Massa, visitara de imprevisto la Cámara de Diputados el pasado miércoles y se reuniera con la autoridades del oficialismo.
Prórroga de impuestos: ¿por qué es clave para Massa?
Con su paso por Diputados a su regreso de Estados Unidos y en las horas previas a la presentación del Presupuesto 2023, Massa le dio el empuje que le faltaba al proyecto para prorrogar impuestos, mientras la bancada oficialista seguía negociando con los bloques más chicos para conseguir los votos.
El proyecto es clave para la gestión económica de Massa y, en cierta medida, del próximo gobierno cualquiera sea su signo político porque si todos esos tributos vencieran a fin de año el Estado sufriría una pérdida cercana al 32% de la recaudación.
Ese es el dato que maneja la subsecretaría de Ingresos Públicos del Ministerio de Economía y que transmitió a la Cámara de Diputados. Incluso, advirtieron que si se le suman las asignaciones específicas del IVA, la pérdida en concepto de recaudación alcanzaría el 39%. Esto implicaría una paralización grave del Estado.
La otra razón (vinculada al mismo punto) por la que Massa buscó destrabar el proyecto de prórroga lo más rápido posible fue porque todos los cálculos del Presupuesto 2023 se basan en la recaudación estimada a través de esos tributos.
"No se puede discutir ni negociar un Presupuesto Nacional si no se sabe cuál será la recaudación", deslizó una fuente parlamentaria del oficialismo a iProfesional ante la consulta sobre los motivos que llevaron a apurar el debate de la prórroga antes de tener garantizados siquiera los votos y el rol de Massa en el tema.
Según destacó el oficialismo, la recaudación de esos tributos destinados a a la coparticipación con las provincias (Ganancias y Bienes Personales), el INCUCAI (Bienes Personales), la Anses (impuesto al cheque y sobre venta final de cigarrillos). El impuesto sobre el capital de las cooperativas se coparticipa en un 50% y el otro 50% va al Fondo de Promoción y Educación Cooperativa.
La propuesta opositora y negociaciones contrarreloj
La Cámara de Diputados se reunió este jueves a instancias del Frente de Todos para tratar el proyecto que ratifica el Consenso Fiscal (un acuerdo entre la Nación y las provincias que habilita a los gobernadores a subir y crear impuestos) y también la prórroga de los tributos.
El hecho de que el oficialismo lograra abrir la sesión a último minuto y con el quórum justo (129 diputados) apareció como una evidencia más de las dificultades que tiene para abrir el recinto sin acuerdos. Juntos por el Cambio no bajó al recinto para el inicio del debate. No obstante, el resultado final fue una victoria para el oficialismo.
El Frente de Todos, con 117 diputados, logró el quórum con el acompañamiento del interbloque Provincias Unidas y del Federal, donde tiene peso la diputada Graciela Camaño, madrina política de Massa. Recién cuando el tablero electrónico del recinto marcó 129 presencias, Juntos por el Cambio se sumó al debate.
El principal espacio opositor está de acuerdo con la prórroga de impuestos tradicionales que permiten el funcionamiento del Estado, pero critica la política tributaria del Gobierno, que consideran más intensa que la de su gestión en 2015-2019.
En ese marco, la propuesta de Juntos por el Cambio, expresada en un dictamen de minoría, fue reducir las alícuotas del impuesto sobre Bienes Personales a los niveles de 2019: hoy van del 0,5% al 1,75%, mientras que la oposición plantea un mínimo de 0,25% y un máximo de 0,75%.
Además propuso que el impuesto al cheque pueda ser computado en un 60% como pago a cuenta del impuesto a las ganancias.
De todos modos, con la aprobación del proyecto en la Cámara de Diputados, la sanción de la ley no tendría mayores dificultades en el Senado, donde el Frente de Todos está mucho más cerca de la mayoría y cuenta con monobloques aliados que suelen acompañar en temas de gestión.