Cavallo: "Es casi imposible imaginar a Massa lanzar un plan de estabilización"
El ex ministro de Economía Domingo Cavallo analizó las posibilidades de aplicar un programa de estabilización y cómo repercutiría electoralmente. "Se necesita concientización de la dirigencia política", afirmó. Y agregó que "Massa, de aquí a marzo, debería avanzar con las privatizaciones de las empresas, para empezar a eliminar el déficit fiscal".
El ex funcionario menemista y delarruísta se refirió al plan anti inflacionario de Gabriel Rubinstein para Sergio Massa: "Está bien pensado y diseñado aunque es difícil que el Gobierno lo aplique" ya que "no confían en la libertad de los mercados", sostuvo el economista en una entrevista con Radio Perfil. Por otro lado, agregó que "venimos de dos años de hacer todo en la dirección incorrecta".
Cuando le consultaron por qué lo llevó a participar del acto de Milei en el teatro Broadway, el ex ministro dijo: "Siempre que me invitan a hablar de economía le acepto a todos los candidatos que están dispuestos a encontrar soluciones".
Con respecto al programa de estabilización que analiza implementar el Gobierno, señaló que "si uno lee el programa que le preparó Rubinstein a Massa, que tiene fecha del 20 de agosto, cuando se especulaba con el ingreso de Rubinstein al equipo económico, es un plan de estabilización bien pensado, pero es imposible que este Gobierno lo aplique porque parte del hecho de la eliminación total del déficit fiscal". "Y además se necesita entender cómo funciona una economía de mercado, y este gobierno no lo entiende. Basta ver el mercado cambiario", agregó.
En ese punto, señaló que "se pueden controlar las transacciones comerciales, importaciones y exportaciones, pero no se puede controlar todos el resto de las transacciones financieras, turísticas, etc, para lo cual deberían dejar funcionar un mercado cambiario totalmente libre y de paso permitiría ingreso de capitales para financiar todos esos gastos que actualmente se financian desde el mercado oficial. Esto es porque no confían para nada en la libertad de los mercados".
Por ello consideró que "es casi imposible imaginar a Massa lanzando un plan de estabilización salvo que lograra convencer a toda la dirigencia política de su espacio de la necesidad de hacer un ajuste fiscal muy grande. Y deberían liberar todos los precios para que los valores relativos busquen su equilibrio. Recién, a partir de esta situación, se puede pensar en un programa de estabilización que produzca efectos como los que lograron el Austral o el de convertibilidad".
Cavallo: Massa y un plan de estabilización económica
Sobre el tiempo que se demora en producir un plan de estabilización, Cavallo respondió que hay que analizar qué aconteció antes. "Cuando yo lancé el plan, hacía un año y medio que el gobierno quería luchar contra el exceso de gasto público, el mal funcionamiento de mercado, los subsidios distorsivos, entre otras puntos, y se había avanzado en esos temas e incluso en las privatizaciones, que era la mejor forma de demostrar que se quería eliminar el déficit fiscal, aunque hasta ese momento no se habían hecho bien", añadió.
"Pero estaba clara la idea de avanzar hacia esa dirección. Por eso en dos meses pude ponerlo en marcha", enfatizó.
"Pero venimos de un periodo de dos años donde todo se direcciona mal. Se perdió un tiempo bárbaro buscando reestructurar la deuda, se demoró la negociación con el FMI y se perdió el crédito externo e interno. Es muy difícil pensar en un plan con este contexto", destacó.
También consideró que "Massa, de aquí a marzo debería avanzar con las privatizaciones con las empresas, ya que es enorme la pérdida de las empresas públicas que han sido reestatizadas. Y lograr la colaboración con los gobernadores para evitar las enormes transferencias que hace el Gobierno a las provincias, en particular a Buenos Aires".
"Para tener chance de buenos resultados económicos y, consecuentemente, tener posibilidades de resultados electorales positivos es hacer la tarea enorme en términos fiscales y de ajuste, y convencer de las bondades de una economía abierta, en donde el Gobierno no se mete en el funcionamiento de los mercados, pero se ocupa de imponer una disciplina fiscal que es imprescindible y, por supuesto, remover una gran cantidad de regulaciones y de trabas que pone el sector público", añadió. "Ahora bien, si no se proyecta la idea de que se va a hacer un ajuste fiscal, y si una buena parte del mismo no se hace previamente, no se van a obtener resultados ni siquiera en un corto lapso", concluyó.
Por último, dijo que "el punto de partida para un plan de estabilización es definir una adecuada organización económica, las reglas del juego que permitan producir las inversiones, el aumento de la productividad, la creación de empleos productivos, entre otras cosas fundamentales para empezar a buscar soluciones".