Tensión en el PRO: Larreta y Bullrich se meten de lleno en la interna para 2023, con Cristina Kirchner en el medio
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La polémica por el operativo de seguridad ante las manifestaciones kirchneristas en Recoleta aceleraron la interna por la candidatura presidencial del PRO entre el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, y la titular del partido, Patricia Bullrich, quienes ratificaron sus diferencias de criterio ante la mirada del propio Mauricio Macri y dejaron planteada una carrera que recién empieza.
La cúpula del PRO se reunió este martes en el restorán Happening para tratar de bajar la tensión luego de los cruces mediáticos entre ambos por la forma de encarar la permanente concentración de militantes frente al departamento de la vicepresidenta Cristina Kirchner. Si bien dieron "por cerrado" el hecho, no hubo un verdadero acuerdo.
Según supo iProfesional, se consensuó bajar el tono de la pelea pública, pero nada más. Al ratificar ambos su postura con vehemencia, la sensación que quedó entre los dirigentes del partido fue que esta polémica inauguró la pulseada para 2023, a donde ambos aspiran a llegar como candidatos presidenciales.
El eje del almuerzo fue el accionar del Gobierno porteño ante la situación de Recoleta: Rodríguez Larreta defendió su decisión de poner vallas en la zona y retirarlas luego para evitar que recrudecieran los incidentes registrados el último sábado y Bullrich ratificó su postura de que debió mantenerse y evitar que el kirchnerismo copara la calle.
A pesar de su intención, fue poco lo que Macri pudo mediar entre ambos. Si bien su posición ante todo lo que involucre a Cristina Kirchner es más cercana al "ala dura" de Bullrich, evitó meterse en la disputa. El ex mandatario intenta mantener su rol de "ordenador", aunque la posibilidad de que compita y que complique tanto a Larreta como a Bullrich, sigue latente.
Tensión PRO: ¿punto de partida para la interna Rodríguez Larreta-Bullrich 2023?
En el PRO y en casi todo Juntos por el Cambio hay una coincidencia general sobre este tema: la pelea de fondo no es por el operativo de seguridad sino por el posicionamiento para 2023 y el perfil que el espacio debe adoptar ante el kirchnerismo. El estilo de Larreta, que busca saltar "la grieta" con un estilo menos confrontativo choca de frente con el de Bullrich, que cultiva votos dentro de ella.
La situación generada a partir de las marchas a favor de Cristina Kirchner y la vigilia de militantes en Recoleta aceleró esa disputa y puso de manifiesto que, entre las diferencias que existen entre Larreta y Bullrich, la forma de encarar la seguridad es una de ellas.
Como contó iProfesional, la idea de Rodríguez Larreta es encontrar una solución al reclamo que le hacen los vecinos de la zona por las manifestaciones, pero sin caer en hechos de violencia y confrontaciones como las que se vieron el sábado pasado.
Si bien sostiene ante la Justicia su decisión de mantener a la Policía de la Ciudad en el lugar, en el entorno alcalde porteño y referente del PRO no descartan "armar una nueva reunión" con representantes del Gobierno nacional cercanos a Cristina Kirchner para acordar un orden para que los militantes puedan visitar la esquina de Juncal y Uruguay pero sin alterar la vida de quienes residen allí.
Según pudo averiguar iProfesional, el jefe de Gobierno consiguió vía libre para gestionar el asunto a su manera. Tuvo apoyo de dirigentes como los diputados María Eugenia Vidal y Cristian Ritondo, quien en las horas previas ya había dejado asentada esa postura al sentenciar que "el que gobierna es Larreta".
No obstante, a Bullrich no le agrada la idea. Durante el cónclave -que según distintas fuentes fue tenso- hubo reproches por la primera reunión que mantuvieron el sábado por la noche los funcionarios de la Ciudad con los de la Nación, entre ellos el ministro del Interior y hombre de confianza de la vicepresidenta, Eduardo "Wado" de Pedro.
"Hacerse cargo de las decisiones": el mensaje de Bullrich a Larreta
La reunión de la cúpula del PRO sirvió solo para acordar que las diferencias no se expresaran en público, no para solucionarlas. La relación entre Rodríguez Larreta y Bullrich quedó tan tensa como estaba antes. La presidenta del PRO lo dejó entrever a la salida del encuentro.
"Cuando el Gobierno de la Ciudad toma previas consultas a todos nosotros debe de mantener la posición tomada. En caso contrario, lo que tiene que hacer el Gobierno de la Ciudad es no preguntar" y "hacerse cargo de las decisiones que toma", lanzó la dirigente.
De esta manera, confirmó que Larreta tiene vía libre para gestionar el problema pero también advirtió que las consecuencias de lo que haga pesarán solo sobre él. Se desprende de sus dichos que no seguirá criticando con dureza al mandatario porteño en público, pero tampoco lo apoyará si su estrategia fracasara.
Con Macri en una postura neutral y tratando de no enfrentarse con ninguno de los dos dirigentes, en lo que aseguran es una forma de cuidar su rol de "ordenador" del partido, el PRO intentó dar señales de distensión a través de Diego Santilli y Cristian Ritondo, los otros dos protagonistas de la carrera por 2023.
Ambos diputados se preparan para ser candidatos a gobernador bonaerense y, tras la cumbre partidaria, salieron juntos a hablar con la prensa en un intento por mostrar que el clima dentro del partido amarillo no es tan malo. Defendieron la gestión de Bullrich como ministra de Seguridad entre 2015 y 2019 y también la posición de Larreta ante el conflicto de Recoleta.
Al unísono Ritondo y Santilli criticaron al juez Roberto Gallardo por ordenar el retiro de la Policía de la Ciudad del departamento de la vicepresidenta y esquivaron las preguntas sobre la pelea entre la presidenta del PRO y el jefe de Gobierno.
Cada uno por su lado
Tanto Larreta como Bullrich llegaron al cónclave con su posición tomada y sin dar el brazo a torcer, en otra señal de que la tensión entre ambos se controló por ahora pero la disputa recién empieza.
"Nos pasó en nuestro gobierno, que nos querían correr con el helicóptero, que nos tiraron 14 toneladas de piedras y que nos fueron debilitando el poder", había expresado Bullrich en las horas previas, durante una recorrida por el partido bonaerense de Almirante Brown.
En el video de esa actividad que difundió por sus redes sociales, la presidenta del PRO subrayó: "Por eso yo grito y le digo a Horacio: 'Horacio, si vas a poner un operativo, ¡bancalo! ¡Hay que bancarlo' (...) Lo que no quiero es que la gente empiece a decir ‘voy a votar a Juntos por el Cambio, pero van a ser tan debiluchos que les va a pasar de nuevo lo mismo, los van a sacar'".
A su turno, Larreta ratificó su postura a través de Twitter, donde señaló: "Nosotros siempre lo dejamos claro: la violencia es el límite, y nunca se la combate con más violencia. El kirchnerismo incita a esto, por eso tenemos que tener paciencia y templanza para aislar a los violentos, y mostrarles que no es el camino".
Tras anunciar que la Ciudad apeló el fallo del juez Gallardo, envió un mensaje a Cristina Kirchner, a quien le reclamó que "no siga incitando a las agresiones y la violencia", y agregó: "Los argentinos necesitamos vivir unidos y en paz. Sus declaraciones son solamente una distracción que no está alineada con las prioridades de los argentinos".