Lobby | La sucesión de Massa al frente de Diputados, el nuevo desafío para las tribus que conviven en el FdT
Con la confirmación de la salida de Sergio Massa de la presidencia de Diputados para asumir al frente de un nuevo superministerio de Economía, el bloque del Frente de Todos en la Cámara Baja tiene un nuevo desafío: ordenar a sus tribus internas para definir quién será el sucesor del tigrense.
Apenas Massa formalice su renuncia a la conducción del cuerpo y a su banca, comenzará el mecanismo para reemplazarlo. Ya fue convocada una sesión especial para este martes a las 14 donde el cuerpo le aceptará la renuncia.
El nuevo titular de Diputados debe ser elegido por el recinto, aunque primará la regla no escrita entre los bloques parlamentarios para garantizar que el puesto quede en manos de la fuerza que controla el Gobierno. El último antecedente cercano data de abril de 1989, cuando el entonces presidente de la Cámara, Juan Carlos Pugliese, presentó la renuncia para asumir como ministro de Economía de Raúl Alfonsín.
En ese momento el recinto no le aceptó la renuncia y le dio una licencia sin goce de sueldo. Pero puso en marcha la elección de un sucesor que también fue respaldado por el peronismo para mantener a un presidente del cuerpo del mismo signo que la fuerza gobernante en ese momento. Así se ha mantenido ese acuerdo hasta la actualidad y es el mismo que le permitió a Emilio Monzó ser el presidente del cuerpo durante la presidencia de Mauricio Macri, aún sin contar con una mayoría propia.
Con ese mismo tono, en Juntos por el Cambio sostienen que no entorpecerán que el oficialismo mantenga el control del cuerpo. Con esa señal queda allanado el camino para que el bloque del Frente de Todos, liderado por el santafesino German Martínez, elija quien será el representante que suceda a Massa.
Quién es la elegida de Massa para estar al frente de Diputados
El tigrense quiere que el Frente Renovador siga al frente del cuerpo y para eso instala a Cecilia Moreau como la aspirante con mejores chances. Otros sectores del bloque consideran que si el massismo se muda al Ejecutivo y logra el control de tres ministerios dentro de una superestructura, es el momento de otros socios de la coalición oficialista.
En ese contexto, fuentes cercanas al Presidente deslizan el interés de la Casa Rosada para que el sucesor sea el titular de la Comisión de Presupuesto, Carlos Heller, reconocido como uno de los más experimentados del recinto y del espacio oficialista.
A esa escudería se sumaron los nombres de la fueguina Rosana Bertone, y del propio Martínez, ponderado por sus colegas por el manejo del bloque luego del portazo de Máximo Kirchner a su presidencia. También apareció el tres veces gobernador sanjuanino José Luis Gioja y otras fuentes arriesgaron al titular de la comisión de Relaciones Exteriores, Eduardo Valdés.
Cecilia Moreau también tiene el apoyo de Cristina
La variedad de aspirantes refleja que el panperonismo todavía tiene un trecho para ordenarse y convalidad el deseo de Massa o desconocerlo. "Nadie se anima a desautorizar al nuevo superministro en este momento, no tiene sentido", explicó un habitante del recinto de la Cámara Baja para asegurar que Moreau es la que tiene más chances de suceder al tigrense, porque también cuenta con el respaldo de Kirchner y de su madre, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En el Senado no hicieron declaraciones porque se trata de un tema exclusivo del otro lado del Salón de Pasos Perdidos, pero si la postulación de Moreau se confirma, las dos cámaras del Congreso serán encabezadas por mujeres. El enigma se develará este martes y será el disparador de un nuevo esquema de poder del panperonismo para conducir Diputados, aunque en el Frente Renovador no tienen ningún interés en perder el sillón que sigue ocupando Massa hasta que formalice su renuncia.
Cuando haya concluído el proceso de reemplazo comenzará el último tramo del periodo de sesiones ordinarias que concluirá el 30 de noviembre.
En agosto las grandes espectativas giran en torno a la próxima la agenda de trabajo legislativo, aunque será el tramo previo al envío del Presupuesto 2023, donde el oficialismo deberá conjugar las obligaciones pactadas con el Fondo Monetario Internacional para cumplir con la renegociación de la deuda y la necesidad de contar con un plan de cuentas para el año electoral.