Alberto Fernández y Cristina Kirchner, unidos contra la Corte: ¿qué hay detrás del nuevo reclamo de reforma?
En medio de la tregua política forzada el presidente Alberto Fernández se alineó con la nueva crítica de la vicepresidenta Cristina Kirchner a la Corte Suprema de Justicia, en un movimiento que por un lado reunifica el discurso político de un Gobierno hasta ahora atomizado y por el otro intenta destrabar el proyecto de reforma que perdió apoyos dentro del propio bloque oficialista del Senado.
"He reflexionado sobre el mensaje que ayer difundió Cristina Kirchner. He visto que muchos eligen criticar las formas para evitar el verdadero problema que enfrentamos: nuestra justicia está deslegitimada y necesita, de manera urgente, una reforma profunda y democrática", señaló el Presidente a través de Twitter.
El día anterior, la vicepresidenta había publicado un video y una carta en la que arremetió contra "la Corte de los 4", en referencia a la composición incompleta que tiene el tribunal actualmente y, tras una extensa enumeración de denuncias de tono institucional, sostuvo que "la persecución" en su contra "continúa" y que "ya tienen escrita y hasta firmada" la sentencia la llamada causa "Obra Pública" que la tiene como acusada.
El apoyo de Fernández a Cristina Kirchner en este tema se da en un contexto particular, definido por el tibio acercamiento entre ambos para tratar de encarar la crisis político-económica desatada por la propia interna del Gobierno y a pocos días de que el kirchnerismo suspendiera la sesión del Senado en la que preveía aprobar el proyecto para llevar la Corte Suprema a 25 miembros, por no contar con los votos suficientes.
La iniciativa fue impulsada por los gobernadores peronistas, recogida por el kirchnerismo y respaldada por Alberto Fernández pero a último momento el senador oficialista Adolfo Rodríguez Saá se desmarcó y anticipó su rechazo, lo que sumado a las dudas que había entre otros miembros del bloque, imposibilitó que el Frente de Todos pudiera avanzar.
"Hay que buscar acuerdos para avanzar con alguna reforma, puede ser la nuestra o haber cambios, pero hay que dar ese debate", deslizó una fuente parlamentaria del oficialismo ante una consulta de iProfesional tras los dichos del Presidente.
¿Qué hay detrás del pedido conjunto de Alberto Fernández y Cristina Kirchner para reformar la Corte?
Si bien el proyecto de reforma de la Corte ya tenía el apoyo conjunto del Presidente y su vice, incluso durante el momento más álgido de la interna, en las nuevas expresiones de ambos sobre el tema se destaca la coincidencia en el llamado a un acuerdo político amplio para reformar el máximo tribunal.
Cristina Kirchner sostuvo que "todos los partidos políticos de la República Argentina, de izquierda a derecha y pasando por el centro tienen un imperativo categórico y republicano" de "construir" una "Corte de la que todos y todas podamos volver a sentir orgullo". Fernández, en tanto, expresó: "Pueden hablar de las formas y del vídeo de Cristina, pero no dejemos de debatir el problema y buscar una solución". Le habla a la oposición.
En efecto, la dificultad que encontró en el Senado el Frente de Todos para avanzar con el proyecto de reforma lo puso ante una necesidad que nunca antes había tenido, de buscar acuerdos más amplios en el arco opositor.
Y es que era previsible que el tema se trabara en la Cámara de Diputados, donde el oficialismo está lejos de la mayoría, pero no en la Cámara alta, donde tiene más votos y aliados estables.
El rechazo de Rodríguez Saá dentro del bloque propio; el del rionegrino Alberto Weretilneck que había sido en casi todos los temas un aliado bastante sólido y las dudas que, según supo iProfesional, tenían algunos otros senadores oficialistas y aliados sobre la oportunidad elegida para tratar el proyecto, en medio de una crisis política y económica que días después recrudeció, cambiaron sensiblemente el panorama para el Frente de Todos.
La nueva unidad y la teoría que impulsa el kirchnerismo
A ese objetivo de buscar acuerdos para avanzar con una reforma del máximo tribunal que el Gobierno cree necesaria (aunque parece imposible dado el rechazo cerrado de Juntos por el Cambio) se le suma uno de los puntos centrales de la tregua que sellaron Fernández y Cristina Kirchner, con la intermediación de Sergio Massa: unificar el discurso del oficialismo.
Tras meses de una interna a cielo abierto, el Gobierno necesita fortalecer el frente político para encarar la tormenta económica que asoma en el horizonte. Y las críticas al funcionamiento del Poder Judicial que desde siempre comparten el Presidente y la vice son un elemento unificador que sirve a ese propósito.
No obstante, montado sobre esa unidad conceptual del Frente de Todos el sector kirchnerista impulsa ahora otra teoría para reforzar el pedido de reforma de la Corte: la de un posible intento de "proscripción" de Cristina Kirchner.
Consultado en una entrevista radial sobre si uno de los objetivos de la Corte podría ser condenar a la vicepresidenta "para proscribirla", el ministro de Justicia, Martín Soria, respondió: "Tranquilamente podría ser uno de los objetivos. Desde hace mucho tiempo persiguen a todo lo que tenga que ver con el peronismo".
"La Corte está jugando políticamente contra el peronismo y el Gobierno", subrayó Soria al insistir en la necesidad de avanzar con una reforma judicial.
En paralelo, el senador nacional del Frente de Todos Mariano Recalde sostuvo que "a algunos les gustaría ver a Cristina presa" y agregó: "No tengo la menor duda de que hay una política general y regional que busca proscribir a dirigentes políticos populares".
Punto por punto, el apoyo de Alberto Fernández a Cristina Kirchner
En su apoyo a Cristina Kirchner, el Presidente compartió prácticamente todos los argumentos expresados por su vice, incluida la preocupación por una eventual condena en la causa que investiga el presunto direccionamiento de la obra pública durante la gestión kirchnerista.
"La Vicepresidenta ha afirmado que en una causa en la que se la enjuicia y en la que el fiscal aún no ha formulado su acusación, su sentencia ya está escrita. Esa afirmación pone en crisis la objetividad del sistema de justicia y la idoneidad moral de los miembros del tribunal", afirmó Fernández.
Asimismo reforzó uno por uno los argumentos de Cristina Kirchner en su crítica al máximo tribunal, empezando por la aceptación de los jueces Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti de ser nombrados por decreto durante la gestión del ex presidente Mauricio Macri, en lo que Fernández calificó como una "decisión de manipular la justicia".
También remarcó que el hecho de que Rosatti, presidente del máximo tribunal, "sea, al mismo tiempo, el presidente del Consejo de la Magistratura y se haya erigido en tal función poniendo en vigencia una norma derogada y votándose a sí mismo, solo deja en evidencia su desapego a la ley y a elementales normas éticas".
Fernández también subrayó que "durante el macrismo, la Justicia Federal construyó 'doctrinas' que resultaron patéticos instrumentos para perseguir opositores y aplicar la prisión preventiva como penas anticipadas" y agregó: "Cuando todo eso ocurría, el máximo tribunal del país adoptó una posición pasiva que permitió que tanto maltrato a la justicia por parte de la Justicia Federal fuera posible"
"He repetido una y mil veces que debemos reconstruir una Justicia Federal que respete y haga respetar los derechos constitucionales", subrayó el jefe de Estado, al tiempo que defendió la necesidad de una reforma judicial.
¿Cómo reaccionó la oposición?
Los referentes de Juntos por el Cambio no tardaron en salir al cruce de Alberto Fernández tras su apoyo a Cristina Kichner y en ratificar su rechazo al proyecto de reforma del máximo tribunal que impulsaron ambos junto a los gobernadores del peronismo por considerar que no persigue el objetivo de mejorar la institucionalidad del Poder Judicial.
En este sentido, el jefe del bloque de diputados de la UCR, Mario Negri, señaló: "Sr presidente: su gobierno está impulsando un proyecto para llevar a 25 la Corte Suprema. Sean serios, nadie puede creer que semejante grotesco es para mejorar las instituciones. Sólo buscan que cada gobernador nomine a un amigo y que la Corte sea un organismo dominado por el PJ".
Por su parte, el presidente del interbloque de senadores de Juntos por el Cambio, Alfredo Cornejo, calificó como "patética" la actitud de Fernández y disparó: "Todo el país sumergido en la crisis económica que no quieren ni pueden solucionar y él sólo pretende taparla con los problemas judiciales de su jefa. Nada le importan los argentinos".
En tanto, el diputado del PRO Pablo Torello indicó: "Capituló Alberto Fernández luego del embate de Cristina Kirchner. Vienen días muy complicados. Y lo único que faltaba es que ataquen al poder judicial".
A su turno, su compañero de bancada Waldo Wolff hizo hincapié en la crisis económica e ironizó: "¿Tiene tiempo para reflexionar Alberto Fernández? El blue quebró los $300. Marchan desde el Campo hasta los movimientos sociales y falta gas. Por las trabas a la importación perderemos u$s2.000 millones. La inflación es récord. El único plan es la impunidad. ¿Cuánto daño más van a hacer?"
La diputada radical Carla Carrizo, por su parte, le pidió al Presidente que "atienda los verdaderos problemas del país y deje a su vicepresidenta con su propia agenda de la impunidad" y agregó: "Atacar a la Justicia no baja la inflación, no genera trabajo, no controla el dólar y no devuelve la confianza. Prioridades por favor".