Otro golpe para Alberto Fernández: el kirchnerismo se quedó con una comisión estratégica en Diputados
En una entrevista realizada el 18 de noviembre de 2019, el periodista de La Nación Carlos Pagni se manifestó acerca del episodio en el que el entonces presidente electo Alberto Fernadez visitó en su departamento de la calle Juncal a la vicepresidenta electa Cristina Kirchner en el que explicaba lo siguiente: "con esta visita quedó en evidencia que el poder político lo tiene Cristina hasta que no se demuestre lo contrario" y además advertía que "la única herramienta que tiene Alberto Fernadez es el éxito económico".
Lo cierto es que el anticipo o especie de premonición se cumplió. El poder lo tiene la vicepresidenta ya que por ahora no se ha demostrado lo contrario y el éxito económico parece algo muy lejano con una economía que se desangra poco a poco por una herida casi mortal que es la alta inflación.
En ese estado de cosas, las declaraciones del ministro de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires, el camporista Andrés "Cuervo" Larroque, contra la investidura presidencial además de ser temerarias han generado mucha incertidumbre en el mercado financiero y en el mundo empresario local.
No por la importancia ministerial de Larroque. Es un ministro de una provincia argentina que no fue votado por la gente. Es porque Larroque es uno de los tres líderes de la agrupación kirchnerista "La Cámpora" junto al diputado Máximo Kirchner y al ministro del Interior Wado de Pedro que responden directamente a CFK.
El politólogo Gustavo Marangoni explica a Iprofesional que: "Alberto Fernández es como un boxeador que está casi noqueado en el rincón y cualquiera que está en el ring side se acerca y le pega y el problema es hoy saber de qué modo se puede resolver el conflicto y por ahora no hay nadie que lo resuelva".
Lucas Romero, de la consultora Synopsis, manifiesta que: "la crítica de CFK respecto de la gestión presidencial le permite a ella realizar un control de daños sobre cómo la podría afectar la mala gestión del gobierno o en todo caso tratar de protegerse del gran enojo que la gente tiene por esta gestión y por la suba de la inflación".
El kirchnerismo se quedó con una comisión estratégica en Diputados
Lo llamativo es que en medio de la pelea dentro del Poder Ejecutivo en las últimas horas el kirchnerismo logró quedarse con la presidencia de la estratégica Comisión de Previsión y Seguridad Social de la Cámara de Diputados.
Esta comisión tiene la misión fundamental de controlar las políticas de la ANSES a cargo de la kirchnerista María Fernanda Raverta y estaba presidida por el diputado entrerriano Marcelo Casareto un hombre de la íntima confianza del Presidente Alberto Fernández quien fue reemplazado por la diputada camporista Maria Uceda que responde a la senadora mendocina Anabel Fernández Sagasti con llegada directa a la Vicepresidenta.
Esta comisión no tiene mucha actividad, pero en caso de algún cambio en la política previsional como por ejemplo un cambio en la fórmula para calcular los aumentos de las jubilaciones y pensiones en el futuro es clave. Hay que tener en consideración que una de las grandes críticas del kirchnerismo al ministro de Economía, Martín Guzmán, fue el cambio de la fórmula de indexación en el 2020 para calcular los haberes previsionales donde se reduce el impacto de la inflación. ¿Otro golpe para el ministro?
Con respecto a la posible solución del conflicto o una salida pacífica el Jefe de la Cámara de Diputados Sergio Massa se reunió el miércoles por la mañana en el senado con CFK y luego al mediodía almorzó con Alberto Fernández. Mucho se comentó en el mercado financiero y en el ambiente empresarial sobre esta especie de rol de mediador compulsivo que por lo general ejerce el hombre de Tigre como por ejemplo cuando logró que se apruebe en nuevo acuerdo con el FMI en el Congreso.
Massa y Capitanich buscan recomponer el Gobierno
Por lo que pudo saber iProfesional, Massa y una gran parte del PJ liderado por algunos gobernadores como el chaqueño Jorge Capitanich,quien es mencionado como un posible ministro de Economía o Jefe de Gabinete en el caso que haya cambios de ministros, buscan recomponer el gobierno. Capitanich fue uno de los únicos que habló ayer con la prensa en el acto realizado en "Tecnópolis" por la Federación Argentina de Municipios donde estaban presentes el gobernador Axel Kicillof, el Jefe de Gabinete Juan Manzur junto a la vicegobernadora Veronica Magario y el intendente de La Matanza Ferrando Espinoza.
Por el momento se observa una gran inestabilidad emocional dentro del Poder Ejecutivo que se suma a la inestabilidad económica y social de un Poder Ejecutivo que está perdiendo la administración del poder, donde el kirchnerismo le discute la legalidad del poder a Alberto Fernández y donde la suba de la tasa de inflación se ha transformado en el mayor problema económico de la Argentina como en septiembre del 75 con el Rodrigazo, en el 89 con la hiperinflación y a fines del 2001 con el fin de la Convertibilidad.
Hay una similitud riesgosa entre este gobierno de Alberto Fernández y el de Mauricio Macri. Ambos tuvieron que firmar acuerdos con el FMI en el tercer año de su mandato. La gran diferencia fue que a Macri el golpe de gracia se lo dio el mercado financiero con dos corridas cambiarias que llevaron el valor del dólar de 17 a 60 pesos mientras que a Alberto Fernández el golpe se lo está propinando el kirchnerismo a través de CFK y "La Cámpora" y el mercado todavía estará la expectativa de algún cambio positivo.
Este gobierno firmó con el FMI un mejor acuerdo que el de Mauricio Macri
La ventaja de este gobierno es que el nuevo acuerdo con el FMI es mucho más benévolo que el que firmó el macrismo. Para explicarlo de una manera sencilla: lo que esté gobierno debería pagar hasta el 2024 recién lo empezaría a pagar otro gobierno desde el 2026 y lo tendría que terminar de pagar el gobierno que esté en el 2036.
Además todo lo que este gobierno pagó el año pasado y parte de este año el FMI se lo devolvió y además de eso por cada vencimiento que caiga el FMI desembolsará ese dinero hasta fines de 2024 si se cumplen las metas trimestrales. El gobierno de Macri firmó un Stand By por 3 años que nunca podría cumplir y este gobierno firmó un Extended Fund Facility a 10 años que algún otro gobierno tendrá que refinanciar. El problema para este gobierno es que desde ayer la Reserva Federal de los Estados Unidos ha comenzado a subir fuertemente las tasas de interés de corto plazo para frenar la suba de la inflación más alta de los últimos 40 años en ese país.
Al respecto hay que señalar que la Argentina tenía un régimen de alta inflación al 40 / 50% anual desde 2018 hasta fines del año pasado pero ahora ya está en un rango que va del 60 al 70 por ciento anual. El dato del IPC de abril que el Indec dará a conocer el próximo 13 de mayo podría ser un golpe de nocaut para el ministro Martín Guzmán si la inflación mensual vuelve a superar el 6% frente al 6,7 % computado en marzo pasado.
Lo qué hay que considerar es que en los últimos 51 meses
- no hubo ni un solo mes con la inflación debajo de 1% mensual;
- que apenas cuatro dieron menos de 2% (uno allá por principios de 2018 y los otros tres en medio de la híper - cuarentena 2020);
- en quince la inflación flotó entre 2 y 3% mensual;
- en veintinueve (la gran mayoría) los números fueron de 3% mensual o más,
- y el último mes fue el mayor de todos con una suba del 6,7 % mensual en marzo.
Es una inflación estructuralmente alta que además es persistente donde los precios libres suben más fuerte que los regulados o controlados, pero los estacionales y los regulados no se quedan muy atrás. Una suba que no tiene que ver con un producto en particular como alimentos, ni con remarcaciones de un sector puntual como los supermercados , ni pasa por un mes especial, ni tampoco es inflación importada, ni es el impacto de la exportación sobre la mesa de los argentinos. Es una típica inflación de carácter macroeconómico a la que será muy difícil derrotar si la situación actual empeora.