Qué riesgos enfrenta Argentina si el acuerdo no se envía al Congreso el 1 de marzo
El FMI y el Gobierno entraron en una discusión técnica que demora el acuerdo y su envío al Congreso a pesar de la expectativa que había generado el propio oficialismo y la posibilidad de que se dilate más allá del 1 de marzo plantea algunos riesgos en materia tanto política como económica.
La idea original del presidente Alberto Fernández y su equipo era que el entendimiento con el Fondo Monetario concluyera esta semana y fuera enviado al Congreso antes del 1 de marzo pero esto fue puesto en duda el último miércoles.
Tal como anticipó iProfesional, en el Gobierno ya manejaban como fecha más probable el 1 de marzo debido a las complicaciones que surgieron en la negociación con el board del FMI respecto de la reducción del déficit, que estaba planteado en 2,5% para este año. Desconfiado, el organismo quiere saber cómo se llegará a ese número y la discusión se trabó allí.
Sin embargo, desde Casa Rosada trascendió que ahora manejan como posibilidad más certera que el acuerdo entre al Congreso "en los primeros días de marzo", lo cual sugiere que podría demorarse más allá del martes 1.
En caso de darse esa situación, se trataría de un con cierta relevancia debido a la importancia que tiene de ese día en el calendario político: es el momento en que el Presidente asiste al Congreso para dar su discurso sobre el estado de la Nación y plantear los temas clave para el año.
¿Cuáles son los riesgos políticos si se demora el acuerdo con el FMI?
En este contexto, cuando Fernández ingrese al recinto de la Cámara de Diputados el próximo martes para hablar ante la Asamblea Legislativa tanto los oficialistas como los opositores estarán atentos a lo que diga sobre el acuerdo con el FMI.
No se trata de una expectativa injustificada. El propio jefe del bloque de diputados oficialista, Germán Martínez, fue uno de los que hizo notar días atrás que el ministro de Economía, Martín Guzmán, había hablado de cuatro semanas como período para cerrar el acuerdo y que la cuarta era, precisamente, la última de febrero.
Ante la dificultad de cumplir con ese plazo deseado, el 1 de marzo se convirtió en el "Día D". Una fuente gubernamental reconoció ante iProfesional que lo ideal era tener el acuerdo ya presentado en la última semana de febrero para que Alberto Fernández pudiera "concentrarse en los anuncios de gestión y la agenda de futuro" durante su discurso.
Si el 1 de marzo el Congreso todavía no tiene a la vista el acuerdo con el FMI será inevitable que empiece el ruido político. La oposición apuntará contra la demora y remarcará, como ya lo hicieron en otras oportunidades, que el plan económico de Guzmán "no es creíble" para el Fondo, con lo que reforzará sus críticas a la gestión.
En tanto, el oficialismo insistirá en que la discusión pasa por detalles técnicos pero que el acuerdo "defiende la soberanía y el poder de decisión" del país, como señaló recientemente la portavoz presidencial, Gabriela Cerruti, a la agencia NA, aunque al mismo tiempo podrían volver a ponerse de relieve las diferencias con el ala kirchnerista del Gobierno.
¿Cuáles son los riesgos económicos?
Los mercados también prestarán atención a lo que ocurra el 1 de marzo y la reacción podrá variar en función de si el proyecto que propone la aprobación del acuerdo está o no presentado para esa fecha.
Y es que empezará a cobrar importancia el hecho de que la Argentina tiene un vencimiento de deuda con el FMI el 22 de marzo por u$s2.870 millones, según indicó un informe del instituto IERAL de Fundación Mediterránea. Podría volver así el temor a un default y repetirse la situaciión que se vivió en enero pasado.
La Argentina se acercaba al vencimiento de un pago por u$s731 millones de dólares el 28 de enero y la incertidumbre de los días previos en torno a la decisión que adoptaría el Gobierno frente al FMI llevó a una fuerte caída de los bonos argentinos, un crecimiento del riesgo país y un aumento sostenido del dólar blue, que trepó hasta los $222.
Esa situación, que le generó más de un dolor de cabeza a Guzmán, empezó a revertirse el mismo 28 de enero por la mañana, cuando el Presidente anunció -antes de que abrieran los mercados- que se había llegado a un acuerdo con el Fondo Monetario. Inmediatamente los bonos subieron y el dólar blue se derrumbó hasta los $212.
Por todos esos motivos, el 1 de marzo se convirtió en una fecha clave para conocer el futuro del acuerdo entre el Gobierno y el FMI y, por lo tanto, del rumbo político que tomará el oficialismo y la realidad económica que tiene la Argentina por delante.