El plan para Vicentin de Perotti acordado con Fernández desplaza actuales directivos: qué dice el proyecto
El gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, indicó que la nueva propuesta para intervenir la agroexportadora Vicentin sin expropiarla pretende el "desplazamiento de los actuales directivos" y destacó que el presidente Alberto Fernández tiene "altas expectativas de que sea la herramienta que funcione".
El viernes a última hora, el mandatario provincial anunció la iniciativa que, según aseguró, cuenta con el apoyo del Gobierno nacional porque permitiría destrabar el conflicto con la empresa.
La propuesta establece la creación de un Órgano Interventor, integrado por Gabriel Delgado y Luciano Zarich, que habían sido designado oportunamente por el Poder Ejecutivo central mediante el Decreto de Necesidad y Urgencia 522/20, y por Alejandro Alberto.
"Es una instancia de fondo y sustentable que nos da, a nuestro entender, una herramienta", remarcó Perotti este sábado en declaraciones radiales.
En ese sentido, subrayó: "El Presidente lo que quiere es que, si van a afectar recursos de todos los argentinos, el manejo de esos recursos tenga total garantía y confianza de todos".
Aclaró que la intervención pretende el "desplazamiento de los actuales directivos" porque "la misma administración que llevó a esta situación a la empresa no es la que debe continuar".
Sostuvo que no tiene "duda" respecto de que con esa alternativa los trabajadores tendrán garantizado el salario y apuntó: "Cada día que pase es un día de deterioro".
El gobernador describió su alternativa como "una intervención judicial en el marco del proceso concursal" y enfatizó: "Ojalá el juez la valore adecuadamente porque eso es lo que se está buscando".
En declaraciones a la prensa en el acto central por el 20 de junio, resaltó que el Presidente tiene "altas expectativas de que sea la herramienta que funcione".
"Nos permite poner todas las energías detrás del objetivo de rescatar la empresa, de constituir un sociedad justa que nos permita seguir teniendo en manos argentinas la posibilidad de un creciente jugador de alimentos", remarcó y argumentó que "no es ninguna cosa tirada de los pelos ni mucho menos".
"El Presidente hoy está avalando la presentación, honrando su palabra de que si había una propuesta superadora, la iba a analizar", puntualizó e insistió en que tiene "los fundamentos suficientes" y un "compromiso nacional".
Respecto de las movilizaciones convocadas por la situación de Vicentin, evaluó: "Cada uno tiene derecho a manifestarse.
Ojalá esas energías podamos ponerlas para acompañar el surgimiento de una empresa que sea el orgullo de los argentinos".
Apoyo del campo
Representantes del campo subrayaron que "la palabra expropiación es algo que preocupa", por lo que pidieron tomar en cuenta alternativas para Vicentin, como la del gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, para "poder llevar adelante una situación que terminebien para todos los acreedores y actores".
El titular de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (CONINAGRO), Carlos Iannizzotto, indicó: "Nosotros manifestamos al Presidente que había una profunda disconformidad con la expropiación y que había alternativas posibles dentro del proceso judicial para que se preservaran los bienes de la empresa".
Así, evaluó que "ojalá se puedan canalizar las ideas del gobernador de Santa Fe para poder llevar adelante una situación que termine bien para todos los acreedores y actores".
En declaraciones radiales, insistió en que "la palabra expropiación es algo que preocupa" y argumentó que prevalece el pensamiento de "si lo hacen con una empresa, luego vendrán por la mía".
Por su parte, el presidente de la Sociedad Rural (SRA), Daniel Pelegrina, señaló: "Nosotros siempre tuvimos una posición clara". Al criticar la "intromisión de un poder sobre otro", destacó la propuesta de Perotti por entender que "respeta" las decisiones de la Justicia.
"Esperamos que siga por ese marco de la ley", remarcó el dirigente, quien respecto de la posibilidad de la marcha atrás con la expropiación, apuntó: "Tengo dudas".
"Las señales son muy confusas", consideró y afirmó que el de Vicentin constituye "un negocio difícil y un mercado muy transparente".
"Nonos trae mucho aliento que el Estado se meta en un negocio dificultoso", analizó.
Al ser consultado respecto de las protestas del campo, justificó: "No son por Vicentin, sino que son por los atropellos a la libertad".
"En muchos pueblos y ciudades suman otras cuestiones. No es el del campo solo, sino de todos los que quieren restablecer los mecanismos de la república", analizó.
Sin expropiación
El proyecto de expropiación de Vicentin anunciado por el Gobierno no fue enviado al Congreso y el panorama para el caso de que finalmente se avance en esa alternativa era complejo para el oficialismo, que tiene una cómoda mayoría en el Senado pero le faltaban votos en la Cámara de Diputados.
Tras el anuncio de la expropiación de la cerealera, distintos referentes del oficialismo confirmaron que el proyecto ingresaría por el Senado, donde el Frente de Todos cuenta con 41 legisladores que garantizarían una aprobación sin inconvenientes.
La elección de esa Cámara como iniciadora del debate estaba relacionada también con que el presidente Alberto Fernández anunció el proyecto acompañado por la senadora mendocina Anabel Fernández Sagasti, estrecha colaboradora de la presidenta del Senado, Cristina Kirchner, y una de las redactoras del proyecto.
Sin embargo, a medida que la discusión sobre el tema fue escalando comenzaron las dudas en torno al proyecto, principalmente por la dificultad del oficialismo de reunir los votos necesarios en la Cámara de Diputados que preside Sergio Massa.
Allí, la bancada del Frente de Todos que lidera Máximo Kirchner cuenta con 119 miembros, pero como el presidente de la Cámara no vota el oficialismo se vería obligado a contar con el apoyo de once diputados de otros bloques para alcanzar la ajustada mayoría de 129.
En este sentido, serían clave los votos del Interbloque Federal que preside Eduardo "Bali" Bucca y que cuenta con 11 diputados, y Unidad Federal, encabezada por el mendocino José Luis Ramón, que tiene 8 legisladores.
El problema para el oficialismo es que el Interbloque Federal, que integra además la experimentada diputada Graciela Camaño, se referencia en el ex ministro de Economía y ex candidato presidencial Roberto Lavagna, quien pese a su cercanía con el Presidente expresó críticas ante la eventual expropiación.
Los integrantes de esa bancada no tardaron en sumarse a esos cuestionamientos y señalaron: "No advertimos que existan fundamentos para que las acciones realizadas por el Gobierno nacional constituyan una razón que ´procure el bien común´".
Ante esa postura, la alternativa para el oficialismo sería buscar los ocho votos de Unidad Federal, que se expresó de manera más favorable a la eventual expropiación, en tanto le faltarían tres más y tendría que obtenerlos en el Frente de Izquierda, donde Nicolás del Caño y Romina del Plá están a favor de la medida.
Pero al Gobierno nacional se le sumó en las últimas horas el problema de los legisladores de Córdoba y de Santa Fe, que responden a los gobernadores Juan Schiaretti y Omar Perotti, respectivamente.
Ambos mandatarios comenzaron a mostrarse alejados de la posibilidad de una expropiación, lo que complicó aún más el panorama para el proyecto.