Paro del campo: ¿por qué para el Gobierno de Fernández es la madre de todas las batallas?
Este lunes comenzó el paro del campo a la comercialización de granos y hacienda convocado por la Mesa de Enlace en rechazo a la suba de tres puntos porcentuales en los derechos de exportación de la soja -que pasan de 30% a 33%-, impulsada por el Gobierno en busca de incrementar la recaudación.
Analistas advierten que este enfrentamiento puede generar una seguidilla de conflictos con el campo y otros sectores, que recuerdan el severo conflicto que hubo en 2008 durante 129 días, cuando la gestión de Cristina Fernández de Kirchner impulsó la Resolución 125 a favor de retenciones a las liquidaciones a las ventas de distintos cultivos.
La actual medida de fuerza impulsada por las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) se extenderá por un plazo de cuatro días, hasta el jueves 24 de marzo. En la misma también participan la Federación Agraria Argentina (FAA), Coninagro, y la Sociedad Rural Argentina (SRA).
Como particularidad de la protesta, quedan exceptuados los productos perecederos.
En cuanto a los grupos que participan de este paro en el campo, desde la FAA reconocieron que "hay diferentes posturas" entre las distintas entidades agrarias que no permitieron llegar a una posición oficial ante el cese de comercialización anunciado.
Por tal motivo, se decidió dejar en "libertad de acción a sus bases para que decidan la adhesión o no a la protesta".
A pesar de que los dirigentes de la Mesa de Enlace esperan un alto acatamiento, garantizaron que el paro "no provocará aumentos sobre los precios ni desabastecimiento".
"Una vez más los productores agropecuarios de todo el país nos vemos empujados a tomar medidas en defensa de la condición más dignificante del alma y del hombre como tal, nuestro trabajo", dijo la CRA, entidad presidida por Jorge Chemes.
Y agregó: "Pasan los tiempos, cambian los actores, las situaciones, la dialéctica (si era soberanía, seguridad alimentaria o solidaridad); pero la respuesta de los gobernantes sigue siendo la misma, frente a su incapacidad de solucionar los temas estructurales, y se repite en nuestra historia como si obedeciese a leyes naturales. Retenciones, derechos de exportación, en definitiva, más impuestos".
Malestar del campo con el Gobierno
Desde diciembre pasado, el campo viene manifestando su malestar por las decisiones del gobierno nacional de aumentar la presión impositiva, en un escenario de caída de los precios internacionales y falta de precipitaciones en las principales zonas productivas. Pero además, en diferentes asambleas y movilizaciones que se realizaron en los últimos tiempos, se escuchó el reclamo hacia el Estado y la clase política para que se baje el gasto.
Los dirigentes y productores explicaron que el sector agropecuario "siempre demostró solidaridad con el país". El aporte por retenciones y otros impuestos superó los u$s100 mil millones entre 2002 y 2019. Y alertaron que ese dinero no se utilizó para resolver los serios problemas económicos y sociales de la Argentina.
La CRA había advertido tiempo atrás que "si las medidas tomadas son empujadas por un espíritu recaudatorio" hay que tener en cuenta que es "un 'juego de suma cero' en el corto plazo". "Si son empujadas por un espíritu ideológico, entonces... Nos veremos en las rutas", apuntó.
Según el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) Matías de Velazco, la protesta tendrá un "alto acatamiento porque el campo está enojado". Y sobre el paro, el dirigente comentó que "se va a evitar vender lo que es hacienda gorda y grano, y el viernes que viene se normalizará la comercialización".
Además, puntualizó que "en algún lugar puede que se junte gente en la ruta, pero lo decidirán los productores del lugar".
De Velazco aseguró que "el enojo del campo no son los tres puntos de la soja: es por la presión impositiva que sufre, no solo por parte de este Gobierno, sino también de todos los anteriores".
"Todo el sector político tiene que entender que tienen que parar la mano con los impuestos y dejar de exprimir al sector privado. Nunca achican al Estado y cada vez es más caro de mantener", se quejó el titular de Carbap.
Por su parte, el presidente de Coninagro, Carlos Iannizzotto, aclaró: "no habrá cortes de ruta y no hay ninguna instrucción para que los haya".
"La protesta es la forma que encontramos para generar impacto. Es una medida que no afecta al ciudadano en general", evaluó.
El directivo resaltó que el diálogo con el ministro de Agricultura Luis Basterra "es bueno, pero hay un aumento de retenciones".
También, reconoció que "dentro de la Mesa de Enlace hay unidad, pero miradas diferentes. Nosotros queremos que el campo pueda seguir produciendo alimentos. Tenemos la intención de dialogar y buscar otras alternativas" a la aplicación de retenciones.
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En tanto, el vicepresidente de esa entidad, Norberto Niclis, señaló que los productores no creen en la segmentación de las retenciones que aplicó el Gobierno: "en otra oportunidad pasó lo mismo y no se cumplió. Y además nosotros estamos en contra" de los derechos de exportación, enfatizó.
Paro del campo: medidas que lo impulsan
La medida de fuerza se definió tras el incremento de 3 puntos porcentuales en los derechos de exportación de soja (de 30% a 33%) y sus derivados, anunciado días atrás por el Presidente Alberto Fernández.
Se trata del segundo ajuste que el Poder Ejecutivo aplica a este cultivo ya que en diciembre pasado aumentó de 24,7 a 30% las retenciones a la soja, entre otros productos.
La posibilidad de aumentar retenciones fue autorizada por el Congreso, al sancionar la ley de "Solidaridad Social y Reactivación Productiva".
El paquete de medidas oficiales que modifican la relación con el campo también incluye un sistema de compensaciones para aquellos productores que comercialicen 1.000 toneladas anuales como máximo de soja.
Al mismo tiempo, se anunciaron bajas para más de 22 producciones, entre ellas, el girasol, la carne porcina, harina de trigo, garbanzos y maíz piscingallo. Con estas reducciones y segmentaciones, el oficialismo intentó evitar la unificación de todos los sectores del agro en un intento de quitarle potencia al reclamo y favorecer a algunas economías regionales.
Más allá de los derechos de exportación a la soja, el Ministerio de Agricultura había informado que las retenciones a arvejas, porotos, garbanzos y lentejas bajaban de 9% a 5%.
El maní hacía lo mismo, de 12% a 7%; la harina de trigo de 9 a 7% y el girasol de 12 a 7% (en girasol confitero y aceite de girasol de 12% a 5%).
En tanto, el maíz pisingallo, que se usa para pochoclo, del 9% ahora pagará 5%; el arroz paddy, del 12% al 6% y el arroz pulido, de 9% a 5%.
Según el decreto publicado este jueves en el Boletín Oficial, "resulta fundamental establecer políticas inclusivas de la actividad exportadora de las economías regionales, que mejoren su desempeño y que incrementen la competitividad de la exportación de bienes y servicios a medida que mayor sea su valor agregado".
También, para el Gobierno "resulta imprescindible mejorar los ingresos fiscales en un contexto económico de endeudamiento, alta inflación, recesión creciente, desempleo generalizado y emergencia alimentaria".
"Por los motivos expuestos deviene necesario modificar transitoriamente las alícuotas de los derechos de exportación para determinadas posiciones arancelarias de la Nomenclatura Común del Mercosur", de acuerdo con el texto oficial.
El decreto lleva las firmas del presidente Alberto Fernández, del jefe de Gabinete Santiago Cafiero y de los ministros de Economía, Martín Guzmán y de Agricultura, Luis Basterra.
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El INDEC informó que la soja y sus derivados fueron el mayor exportador durante 2019, al sumar casi 17 mil millones de dólares.
Voces en contra al paro del campo
También hubo voces en contra al paro del campo. El expresidente de Federación Agraria Argentina (FAA) Eduardo Buzzi calificó de "lamentable" la decisión de la Mesa de Enlace de ir a un cese de comercialización agropecuaria por cuatro días.
"Es lamentable la decisión de ir al paro. Alberto busca conciliar y le responden con esta protesta. Hay algunos productores que tienen vocación opositora", sostuvo este jueves Buzzi, quien en 2008 fue un fuerte referente de la lucha del campo contra el gobierno de Cristina Kirchner por las alícuotas móviles a las retenciones.
El exintegrante de la Mesa de Enlace manifestó: "Estoy sorprendido. Tengo contacto con algunos directivos actuales y no entiendo en qué momento aceptaron formar parte de esa protesta".
"Hoy se impone un sector que alienta la protesta más allá de la lógica política. Los están llevando a la rastra. La negociación está abierta", completó.
Cabe recordar que días atrás el senador del Frente de Todos y presidente del Instituto Patria, Oscar Parrilli , consideró un "orgullo" que los sectores agropecuarios sean los "primeros" que "ataquen" al gobierno de Alberto Fernández , después del cese de comercialización convocado por las entidades vinculadas en la Mesa de Enlace .
"Qué raro que el primer paro que le decretan a este Gobierno venga de dónde viene, precisamente del sector que más ganó, se enriqueció, fugó la plata y es el responsable de la crisis que tiene la Argentina", advirtió Parrilli en referencia a los agropecuarios.
Fuerte discusión de Tenembaum con un productor
Por su parte, el periodista Ernesto Tenembaun tuvo una discusión en su programa de radio con el productor agropecuario cordobés (Alejandro Dalmasso) que protesta contra la suba de las retenciones a la soja.
En dicha charla el periodista le dijo al sojero: "Si en 2018 y 2019 perdí plata, es muy distinto que me digas que ganaste 100.000 dólares por mes".
A lo que Dalmasso respondió: "¿Y en qué cambiaría, a ver?".
Tenembaun aseguró que, si en 2018 y en 2019 había ganado, el productor tendría margen para decirle al Gobierno nacional: "No estoy ahogado. Negociemos".
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A lo que el entrevistado arremetió: "Si yo gané fue porque laburé, porque invertí, porque arriesgué... No porque me quedé de brazos cruzados". Y completó: "Gané mucha plata y por eso estoy en la ruta acá, cagándome de calor".
Y Tenembaum respondió: "La gente que tiene plata sostiene a toda la sociedad. La gente que tiene tierra sostiene al resto de la sociedad. Tenés campo, tenés propiedades, tus hijos se educan bien y hay un montón de gente menesterosa en Argentina".
"Me parece que sos muy egoísta, Alejandro", cerró su comentario el periodista.
Nuevo esquema de retenciones que llevó al paro
El esquema de retenciones a la actividad agropecuaria que formalizó este jueves el Gobierno contempla una baja de este impuesto para 22 productos, otros 20 no tendrán cambios y sólo una suba, para la soja.
Según el decreto publicado este jueves, estas son las alícuotas que se deberán pagar por derechos de exportación:
Modificaciones a la baja:
-- Girasol 7% (-5 puntos porcentuales respecto a la retención que ya tenía)
-- Aceite de Girasol 7% (-5)
-- Harina de trigo 7% (-2)
-- Maní 7% (-5)
-- Lana sucia 7% (-2)
-- Pescado congelado 7% (-2)
-- Arroz paddy 6% (-6)
-- Harina de maíz 5% (-4)
-- Arroz pulido 5% (-4)
-- Carne porcina 5% (-4)
-- Embutidos 5% (-4)
-- Carne ovina 5% (-4)
-- Lana limpia 5% (-4)
-- Girasol confitero 5% (-7)
-- Maíz pisingallo 5% (-4)
-- Maíz flint envasado 5% (-7)
-- Arvejas 5% (-4)
-- Porotos 5% (-4)
-- Garbanzos 5% (-4)
-- Lentejas 5% (-4)
-- Pescado fresco 5% (-4)
-- Pescado en góndola 5% (-4)
Productos sin modificaciones:
-- Maíz 12%
-- Trigo 12%
-- Sorgo 12%
-- Leche en polvo 9%
-- Carne bovina 9%
-- Carne bovina con hueso 9%
-- Carne aviar 9%
-- Economías regionales 5%
-- Harina de sorgo 5%
-- Lácteos 5%
-- Algodón 5%
-- Hortalizas 5%
-- Papa 5%
-- Tomate 5%
-- Lechuga 5%
-- Vino 5%
-- Frutilla 5%
-- Limones 5%
-- Manzanas 5%
-- Uvas 5%
Modificación al alza:
-- Soja y derivados 33% (+3%)
Las nuevas reglas están planteadas y los perjudicados comenzaron a realizar protestas. El tema ahora pasó a manos del Gobierno para ver cómo controla a los sectores disconformes y para que el descontento del campo no se incremente de forma espiralizada.