Por la brecha cambiaria y el goteo de dólares, el mercado espera más controles
PCon la aparición de los controles cambiarios renació en la última semana un mercado paralelo al dólar oficial.
Es el llamado dólar de Contado Con Liquidación (CCL), un mecanismo legal para adquirir con pesos billetes verdes a través de operaciones de compra y venta de bonos o acciones, y la acreditación se hace en una cuenta en el exterior. Es un instrumento al que recurren por ejemplo, las empresas que ahora no pueden comprar para atesorar.
En la primera semana de restricciones, la brecha entre el valor del dólar oficial y el CCL fue alrededor del 10% aunque trepó hasta el 15% sobre el cierre del viernes y los operadores prevén que en las próximas semanas irá escalando.
Depende del nivel, puede convertirse en un problema. Paralelamente, el retiro de depósitos en dólares si bien aminoró un poco el ritmo continúa siendo elevado, lo que a su vez impacta en las reservas.
Desde la derrota oficial en las PASO la sangría de reservas fue de u$s15.300 millones, y el stock de depósitos dolarizados del sector privado cayó u$s8.330 millones. En este escenario, los analistas plantean que la brecha con el CCL y el drenaje de depósitos son las dos variables claves a monitorear en las próximas semanas, y advierten que podrían derivar en un endurecimiento del cepo.
¿Hasta dónde la brecha entre el dólar oficial y el CCL es tolerable y cuándo puede generar presión inflacionaria y de devaluación? Mauro Mazza, de Bull Market Brokers, señaló a Perfil que con el actual control cambiario "aguantás una brecha de hasta 20%, pero si pasa el tiempo y sigue arriba del 20%, se necesitarán más restricciones, con 50% estás al borde del abismo, y el nivel crítico es 75 u 80%, ya hay que tomar decisiones fuertes".
Para el analista, hay riesgo de alcanzar ese nivel "a fines de diciembre o primera quincena de enero". Según su visión, los controles "no solo se van a prorrogar sino que podríamos ir a un cepo total".
El financista Christian Buteler alertó que "se puede ampliar más la brecha" del dólar CCL porque lo usará mucho la empresa que exporta". Avizora que "en momentos de liquidación de exportación fuerte, la empresa cobra y no creo que se quede en pesos en el país, se va a dar vuelta y usar el CCL para dolarizar su tenencia". Buteler aclaró que si bien "son operaciones entre privados y el BCRA no pierde reservas, el problema de que la brecha se incremente es que pase a ser el dólar de referencia para la economía, que algunos precios se muevan en base a ese dólar y no al oficial, porque el de referencia siempre es el que más se negocia, o el más libre".
Para Diego Martínez Burzaco, de MB Inversiones, la actual brecha "es razonable porque a ese mercado pueden recurrir todos sin restricciones", pero "en la medida que se amplíe y genere expectativas sobre la inflación o sobre el tipo de cambio oficial, seguramente habrá una limitación".
Diego Falcone, de Cohen SA señaló a Perfil que es "probable que la brecha vaya para arriba, con el kirchnerismo tuvimos al principio entre 10% y 15% y después se fue a 70%, no creo que durante el gobierno de Macri tengamos un margen tan alto". No obstante, ve "un BCRA subiendo un poco las restricciones, una vez que esta primera etapa, pero este control vino para endurecerse, veo dificil recuperar la confianza".
Norberto Sosa, de Invertir en Bolsa, señaló que "con un escenario internacional favorable esta semana la brecha quedó instalada en un piso de 10%" que es un nivel que "no genera ruido", y estimó que "es inexorable que en las próximas semanas se vaya ampliando despacito".
El analista sostuvo que "cuando la brecha ya se va acercando al 50% lleva a una presión devaluatoria sobre el tipo de cambio oficial". En ese sentido, recordó que "en Argentina hubo momentos pico como en 2013 donde el tipo de cambio oficial estaba en $ 5 y el contado con liquidación arriba $ 9, una brecha de casi 100%, cuando la brecha ya es tan grande se viene una devaluación como fue a inicios de 2014".
Sosa también previno que "el tema de los depósitos en dólares es el talón de Aquiles". Cree que con el actual escenario de incertidumbre la tendencia a la dolarización seguirá. En ese marco, opinó que "más que controles transitorios da la sensación que se van a ir profundizando con el tiempo".
El analista dijo que "en el cortísimo plazo lo que más afecta las reservas es el movimiento de los depósitos, pero hacia adelante, septiembre y octubre, el gran tema es si entra la plata del FMI, si llega te puede acomodar un poco la brecha, si no se podría ir al 50 por ciento".