El gremio bancario desafía el "modelo Vidal" y pide ajustes por inflación todos los meses

Mientras el Gobierno intenta contener los precios y reactivar el consumo mediante un acuerdo con los empresarios, los gremios pujan cada vez más por paritarias cortas con negociaciones que los protejan de la escalada inflacionaria. Uno de los propuestas más audaces es el ajuste mensual por inflación que hoy pondrá sobre la mesa la Asociación Bancaria, liderada por Sergio Palazzo, en lo que será la primera reunión del año con las cámaras convocada por la Secretaría de Trabajo, tras la solicitud en marzo de apertura formal de la paritaria, según confirmaron cerca del sindicalista a iProfesional.

El pedido gremial será acompañado desde hoy al mediodía hasta el viernes por una demostración de fuerza en la city porteña, en donde habrá asambleas diarias rotativas por banco y se movilizarán los delegados. De no haber avances, el plan de acción definido ayer por el plenario de la seccional Buenos Aires continuará con un paro cuya fecha podría ser definida hoy en un plenario de secretarios generales y con la huelga convocada el próximo martes por el Frente Sindical que integra el bancario junto al camionero Hugo Moyano y el mecánico Ricardo Pignanelli.

"La paritaria va en serio y no estamos dispuestos a resignar absolutamente nada", advirtió ayer Palazzo junto a Pablo Moyano, el canillita Omar Plaini y el exsindicalista y exdiputado Lorenzo Pepe, durante la presentación de un libro en la sede de La Bancaria sobre el centenario de la primera huelga bancaria en Argentina.

El bancario y el camionero aprovecharon para diferenciarse de la conducción de la CGT a la que cuestionaron por no convocar al paro del 30A, a la vez que rememoraron la protesta encabezada por ambos en noviembre de 2017, sin aval de la central, en rechazo a la reforma laboral negociada con el entonces ministro de Trabajo, Jorge Triaca.

En ese marco, tal como adelantó este medio en marzo, el bancario buscará reinstalar la cláusula gatillo, un sistema de renovación automática en función de la inflación del INDEC, con el que apunta a mantener a flote el poder adquisitivo de los salarios pero que desafía el esquema oficial de acuerdos semestrales con revisión sugerido por el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica.

La novedad ahora es que el sindicalista intentará enganchar las eventuales subas a los precios del mes previo, lo que implica una mayor indexación de los salarios que es rechazada por los bancos.

En su lugar, las entidades financieras proponen un acuerdo con subas trimestrales en base a la inflación, similar al entendimiento alcanzado la semana pasada por la gobernadora María Eugenia Vidal con los docentes. Siguiendo ese ejemplo, el mercantil Armando Cavalieri, un exponente de los "gordos" (grandes gremios de servicios") dio a conocer el lunes las gestiones iniciadas de manera informal con los empresarios para avanzar en aumentos mensuales de carácter no remunerativo sujetos a revisión, junto con una suma compensatoria por lo perdido en 2018.  

En el caso de los bancarios, Palazzo discutirá, además, el impacto del impuesto a las Ganancias sobre los salarios, el nivel de actividad y el de rentabilidad, un indicador que define el monto de participación de los empleados en los resultados.

El sindicalista viene de negociar un adelanto a cuenta de las paritarias del 7% por enero y febrero, junto con una suma mensual de $1.000 por ese bimestre. Mientras que el año pasado fue el único gremio, junto con el de los mecánicos, que logró superar la inflación del 47,6% con un aumento que, incluyendo beneficios extraordinarios, superó el 50%.