El presidente Macri recibió a Juan Guaidó, quien afirmó: "Vamos a terminar con la usurpación"

El Presidente Mauricio Macri recibió este viernes en la Quinta de Olivos al mandatario encargado de Venezuela, Juan Guaidó, quien aseguró que "se inicia una nueva etapa de relaciones" bilaterales "basada en valores fundamentales y no en intereses de unos pocos".

Si bien el encuentro estaba prevista para las 17, se desarró pasadas las 19 a raíz de una demora que sufrió el avión que trasladaba al venezolano desde la ciudad paraguaya de Asunción, revelaron fuentes diplomáticas.

"Cuando se veía todo oscuro en Venezuela, se oyó la voz de muchos líderes, entre ellos la de usted señor Presidente, lo que nos ayuda a seguir adelante", le dijo Guaidó al mandatario argentino y destacó que él fue una de las primeras voces en la región en denunciar al régimen de Maduro.

Tras la reunión, se trasladó a la Cancillería, en el barrio porteño de Retiro, en donde remarcó: "Hoy se inicia una nueva etapa de relaciones entre Venezuela y la Argentina, una etapa distinta, basada en valores fundamentales y no en intereses de unos pocos, basada en derechos fundamentales: democracia, libertad, respeto a los derechos humanos".

"Quiero agradecer profundamente al presidente Mauricio Macri, a la Argentina y al pueblo que ha acogido a muchos venezolanos", añadió el líder opositor caribeño.

"Hoy contamos con el respaldo de 60 naciones que no apoyan a Guaidó sino la Constitución de Venezuela y a la lucha por recuperar el país", indicó.

Además, señaló que hoy "el dilema es entre dictadura y democracia, entre pobreza y miseria y progreso y prosperidad. Por eso estamos aquí. Para hablar cómo será la transición".

También destacó la necesidad de mantener "la máxima presión" desde los países del Grupo de Lima para contrarrestar la vigencia de Nicolás Maduro en el poder. "Vamos a terminar con la usurpación del Gobierno", sentenció.

"Venezuela vive hoy un secuestro por parte de sus instituciones con una dictadura", advirtió.

Por otra parte, dijo que hubo "una labor de persecusión y tortura macabra" a unos 160 militares venezolanos que rechazaban las medidas del gobierno de Maduro y que deben "reestablecer la confianza con los militares" de su país porque aseguró que el 80% de las fuerzas armadas están dispuestos a ponerse a disposición de su presidencia.

"El principal rol de nuestras embajadas es mantener las relaciones" diplomáticas y "solicitar la protección de los activos venezolanos en el exterior". Esas, sostuvo, "son las labores principales en el corto plazo y prepararnos para la transición" para, entre otras cosas, "garantizar la cadena de suministros, medicamentos y gasolina". 

"Hoy Venezuela, aunque no se crea, está importando gasolina", añadió.

Además, dijo estar "consciente del riesgo que amenaza la vuelta" suya a Caracas, donde advirtió que "ya hay 600 militares que se ponen del lado de la Constitución".

Mañana visitará Ecuador e intentará visitar otras naciones de América Latina que expresaron su apoyo.