Un 25 de mayo con "grieta": Macri, entre el sermón del Tedeum, los actos contra el FMI y el locro "con la gente"
Este 25 de mayo rompió la calma que caracterizó a los anteriores festejos patrios de la gestión Macri.
A la agenda oficial para conmemorar los 208 años de la Revolución de Mayo, que repitió actos y ritos tradicionales, se opuso una multitudinaria manifestación en la Avenida 9 de Julio bajo el lema "La patria está en peligro: No al FMI".
"Un conjunto de organizaciones gremiales, sociales, barriales, de derechos humanos, cooperativistas, de la pequeña y mediana empresa, y destacadas personalidades de la cultura popular" convocaron "a un gran acto". En evento contó con un espectáculo musical, una feria de la economía social y la lectura de una proclama en la que se expondrá el descontento de los manifestantes con la política económica del Gobierno y, en especial, con la negociación que mantiene con el Fondo Monetario Internacional.
El acto, que apostó a la potencia de la territorialidad, se contrapuso con la más sobria estrategia comunicacional del Gobierno, que no toma a "la calle" como elemento de disputa, una táctica que hasta el momento le rindió frutos políticos y electorales.
Así las cosas, el presidente Mauricio Macri mantuvo una agenda similar a la de los dos años anteriores.
A las 9 se reunió con sus funcionarios en el salón de los Bustos de la Casa Rosada, con quienes compartió el tradicional chocolate caliente con churros. De allí, unió la distancia que separa Balcarce 50 de la Catedral Metropolitana, donde a partir de las 10 se realizó el tradicional Tedeum. El arzobispo de Buenos Aires, Mario Poli, encabezó la ceremonia.
El tono del acto religioso fue crítico con la situación social, como se esperaba. "La indiferencia de los ricos frente a los pobres no pasa inadvertida ante Dios", sentenció Poli en uno de los pasajes más duros.
Además, sostuvo que en el país no deben dominar "las fuerzas económicas, sino las espirituales". Y, en esta línea, agregó que "en la Argentina bicentenaria no sobra nadie, ninguna persona debe ser excluida".
El arzobispo de Buenos Aires también entró en la polémica sobre la ley de aborto legal, al señalar que se debe actuar "en defensa del inocente que no ha nacido". Enseguida, no obstante, viró nuevamente al tema social al enfatizar que "igualmente de sagrada es la vida de los pobres que han nacido".
Además, expandió la lectura política de la actualidad al destacar que "los cambios sociales y culturales se dan en procesos que demandan tiempos que nos trascienden y se extienden más allá de los períodos de un gobierno y debemos desconfiar de los logros instantáneos".
"Si comenzamos hoy, dentro de 10, 15 o 20 años se verán los frutos; el tiempo no lo podemos someter pero sí continuar unidos por el bien común, y el deber del Estado es cuidar la vida" especialmente "de los pobres y marginados", añadió.
En cuanto al Papa Francisco envió un mensaje institucional mesurado, aunque resaltó el tipo de país que desea.
"Con motivo de la fiesta nacional de Argentina, hago llegar a vuestra excelencia y a todos los hijos e hijas de ese amado país un cordial saludo. Y ruego a Dios nuestro Señor, por intercesión de la Virgen de Luján, que les conceda los dones necesarios en la construcción de una sociedad cada vez más justa, fraterna y solidaria", escribió desde el Vaticano el 22 de mayo.
Macri estuvo en la Catedral acompañado por su esposa, Juliana Awada; la vicepresidenta, Gabriela Michetti; el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta; el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo; el titular de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó; y el presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Ricardo Lorenzetti, entre otros.
También participaron del Tedeum porteño integrantes del gabinete nacional, los jefes de las Fuerzas Armadas y de Seguridad, legisladores, funcionarios judiciales, embajadores y representantes de distintas instituciones religiosas, entre otros.
Tras la celebración religiosa, el jefe de Estado se dirigió a la residencia presidencial de Olivos donde compartió un locro con "la gente", con la presencia de su familia, los miembros del gabinete y abuelos que pertenecen a un centro de jubilados. En Olivos el Presidente sostuvo que "hay oportunidad de progreso para todos" y pidió "seguir construyendo bases sólidas que permitan crecer".
"Hoy es un día para que nos reunamos y agradezcamos a Dios la Patria que tenemos", propuso Macri y agregó: "Todo pasa por ponernos de acuerdo, que sigamos construyendo esas bases sólidas que nos permitan crecer, no un año ni dos, sino 20 años seguidos y así derrotar definitivamente a la pobreza".
En este sentido, el mandatario aseguró que "hay oportunidad de progreso para todos" y afirmó: "Sentimos que trabajando juntos vamos a construir realmente lo que soñamos: un gran futuro para compartir. ¡Viva la Patria!".
Reclamo en la 9 de JulioEl "contra-acto" fue convocado por una multisectorial en la que se mezclaron sindicatos, organismos de derechos humanos y sociales, cooperativistas, empresarios Pymes y actores y actrices, quienes grabaron videos personales invitando a participar al evento.
El acto se realizó sobre la Avenida 9 de Julio desde las 13. A su vez, en las calles Cerrito y Carlos Pellegrini funciona una gran feria de la economía social.
El momento central sucedió a las 15.30, cuando dos actores leyeron la "Proclama Popular del 25 de Mayo de 2018: No al FMI". Lo hicieron desde el escenario donde se encontraban sentadas las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, recientemente nominadas al Premio Nobel de la Paz. Poco después de las 16 se cantó el Himno Nacional, como cierre del evento.
"No al FMI, la patria está en peligro", expresó el documento multisectorial leído por un grupo de actores en el marco de un acto que fue convocado bajo esa consigna, en el que se cuestionó la política económica del Gobierno.
En el documento, las organizaciones indicaron: "Enfrentamos al Gobierno en las calles y también lo haremos en las urnas. Nos disponemos a formar la unidad necesaria para construir definitivamente la Patria que soñamos".
También expresaron la "necesidad de defender la producción y el desarrollo" y afirmaron que "el colonialismo neoliberal solo puede ofrecer un futuro miserable".
Entre los artistas que llamaron a marchar se encuentran Pablo Echarri, Paola Barrientos, Darío Grandinetti, Leonardo Sbaraglia. "Este 25 de mayo voy al Obelisco con mi familia a cantar el himno porque con el FMI la patria está en peligro", dicen, palabra más o menos, en su mensaje grabado.
A su vez, la Asociación Argentina de Actores también difundió el acto. "Este 25 de Mayo a las 13 hs. convocamos a las actrices y actores al Obelisco, bajo la consigna "˜No al FMI - La Patria está en peligro'". Y se agregó en el mensaje: "Vení con tu familia a cantar el Himno y a expresarnos todos juntos contra el brutal ajuste que afecta al pueblo argentino, los tarifazos y el modelo de dependencia económica que propone el gobierno. Te esperamos".
Los dirigentes de las distintas organizaciones convocantes estuvieron sentados frente a la tarima, cercados por un vallado especial. Según informaron desde la organización, hubo 300 sillas.
"Es una convocatoria similar a la del 24 marzo. Esperamos mucha gente autoconvocada. Todo se referencia en la situación socio-económica que estamos viviendo", indicó a iProfesional uno de los organizadores.
Las partes que llamaron a sumarse a este acto "no oficial", amparados por un común denominador –rechazar la política económica del Gobierno que los perjudica-, mantienen distintos objetivos particulares en su pulseada con el Ejecutivo.
Desde los sindicatos, aparecen articulando la CTA y CTERA, Camioneros y La Bancaria, además de Canillitas y UDOCBA por citar algunos gremios. Representantes de estos sectores como Sergio Palazzo, Pablo Moyano, Hugo Yasky, Roberto Baradel y Sonia Alesso se reunieron este 24 de mayo en la sede de los bancarios para pulir los detalles del evento. También avanzaron sobre otras cuestiones políticas, sociales, sindicales y hasta legislativas. No escapa a ellos la construcción de una CGT más abarcativa –que contemple a los desocupados y a la CTA, por ejemplo- y mucho más dura que la actual.
También participaron del encuentro líderes de las organizaciones sociales, como referentes de la CTEP, CCC y Barrios de Pie.
"Fuimos a la reunión con Sergio Palazzo, Pablo Moyano y Hugo Yasky a plantearles una invitación a la Marcha Federal a realizarse el 28 de mayo, que va terminar el 1º de junio en el Congreso Nacional con un paquete de leyes de la agenda social", explicó a iProfesional Daniel Menéndez, de Barrios de Pie. Entre las mentadas medidas se destacan la Emergencia Alimentaria y la integración urbana de los barrios humildes.
Según afirmó el dirigente social, esperan una inmensa movilización para esas jornadas. También contó que habrá "misas con la Iglesia" y que las iniciativas sociales que esperan que apruebe el Congreso cuentan con el apoyo de la Pastoral Social, lo que indica cuál puede ser el tenor del Tedeum de este 25 de mayo.
Justamente, este viernes las organizaciones sociales realizaron ollas populares alrededor del Obelisco para acompañar el acto en rechazo al FMI. "Vamos a profundizar la articulación entre todos los sectores para encontrar un freno a estas políticas económicas que se están llevando", señaló Menéndez.
Atento a este escenario y con la crisis financiera aún fresca en la retina, desde el Gobierno se preparan para enfrentar un final de mayo con un alto nivel de protesta en las calles.