Después de Lehman Brothers, en Wall Street reinó la euforia
Lehman Brothers fue una piedra en el zapato, según se desprende de las cifras que muestra Wall Street actualmente: son nueve años consecutivos al alza para los principales índices estadounidenses. Aunque la quiebra del gigante provocó que la Bolsa perdiera cerca de un 50% de su valor, ahora las cifras son bien distintas.
El Dow Jones está actualmente en valores que doblan los registrados a finales de 2007; el Nasdaq más que triplica los puntos básicos de ese año.
"La renta variable estadounidense debería seguir registrando una rentabilidad superior en los próximos meses", apunta Witold Bahrke, responsable sénior de estrategia macroeconómica de Nordea Asset Manager. Una tendencia al alza que sitúa a Wall Street como referente; su crecimiento no se detiene pese a los signos de ralentización de la economía mundial, aunque el país norteamericano continúa creciendo a buen ritmo.
Desde 2010 la riqueza de Estados Unidos ha aumentado anualmente entre el 1,6 y el 2,9%. Así, el sostenido auge de la economía norteamericana encuentra en las decisiones tomadas por la Reserva Federal (Fed) una de las razones comunes a todos los ejercicios.
La Fed acudió el mismo septiembre al rescate del sistema con un saco de millones que salvara las entidades por el riesgo sistémico. Una política que continuó durante años que se unió a una rebaja de los tipos de interés, siempre con el ojo en que Wall Street recibiría de buen grado los estímulos.
Y así fue. De hecho, Bahrke apunta a que "la rentabilidad positiva de las acciones se ha concentrado este año en Estados Unidos", frente al resto de índices de referencia mundiales que no terminan de recuperarse (salvo la Bolsa de Fráncfort en Alemania).
Por ello, ya hay quien habla de burbuja en la Bolsa norteamericana por esos crecimientos constantes. De hecho, Apple ha superado este año la marca del billón de dólares de capitalización bursátil y Amazon también ha tocado este hito. Aun así, los expertos consultados rechazan referirse a la situación actual como una burbuja real, sino como una cadena de estímulos que han tirado del mercado.
Ahora, según los analistas, el reto está en ver cómo los bancos centrales -en este caso la Fed- desinflan "la burbuja monetaria que almentaron durante años", explica Didier Saint-Georges, miembro del comité de inversión de Carmignac. Los expertos y el mercado de valores se mantiene pendientes ante la manera en que la Fed "ha empezado a destruir los 4,5 billones de dólares que inyectó entre 2008 y 2014", lo cual, a juicio, de Saint-Georges, es mucho más relevante que las subidas progresivas de los tipos de interés, según señala ABC.
Asimismo, los expertos también apuntan a la globalización de los últimos veinte años como uno de los factores fundamentales que explican la racha alcista de Wall Street. El bache de Lehman costó superarlo -siempre hablando en términos del mercado de valores- pero pronto se recuperaron los niveles de un año antes. A principios de 2011 se instaló en cifras cercanas, aunque con vaivenes.
Y, a partir de 2013, el crecimiento fue imparable, con ganadores y perdedores, como comenta Sandra Crowl, miembro del comité de inversión de Carmignac: "No todos han salido beneficiados de la inyección de generosidad de los bancos centrales, que ha sido el factor clave del auge de los partidos contra el orden establecido"