Diez fondos de inversión cerrados esperan para poder salir al mercado
Ya hay una decena de Fondos Comunes de Inversión Cerrados que esperan que la Comisión Nacional de Valores (CNV) reglamente la normativa que surgió a la luz de la nueva Ley de Financiamiento Productivo. Entre los distintos sectores de la economía donde invertirán se encuentra el de real estate y el financiamiento a las pequeñas y medianas empresas.
La semana pasada, la CNV le pidió a la industria de Fondos Comunes de Inversión que haga su evaluación sobre la nueva reglamentación sobre FCI cerrados, que comenzará a regir en los próximos días. Esta consulta pública se extenderá hasta finales de la semana próxima.
En tanto, la industria se prepara con diez proyectos que invertirán en distintos sectores de la economía real, como el financiamiento a las pyme, el agro, las energías renovables y nuevos desarrollos tecnológicos. Esta es la gracia de este tipo de instrumentos: atraen el capital inversor y lo canalizan hacia proyectos de la economía.
"¿Para qué sirve el mercado de capitales? El concepto es que es el lugar a través del cual se canaliza el ahorro del público en instrumentos financieros que terminan volcándose a la economía real. Podría ser un bono, una ON, pero también es muy bueno que haya un fondo cerrado que invierta directamente, por ejemplo, en la ganadería", explicó Jackie Maubré, directora de Cohen, que se manifestó conforme con las modificaciones que introduce la nueva regulación.
"En términos generales me parece que es correcta la reglamentación y que te permite tener creatividad y tener libertad. Después hay que ponerla a prueba y ver qué implicancia hay", dijo Maubré.
En Quinquela Asset Management, por ejemplo, se encuentran trabajando para estructurar dos fondos cerrados: uno que apunta al fondeo de capital de trabajo, para que las pyme puedan descontar cheques y facturas; y otro, que apunta al sector energético. Según adelantaron a El Cronista estos proyectos aún se encuentran en proceso de análisis y aún no solicitaron la autorización correspondiente a la CNV.
Los fondos cerrados son la esperanza postergada de la industria de los FCI. La expectativa es que esta nueva reglamentación le de el impulso que no supo darle la Ley de Sinceramiento Fiscal, en los comienzos del Gobierno. En aquel momento, cuestiones administrativas y regulatorias, dilataron su creación y finalmente sólo siete fondos fueron creados y lograron captar apenas u$s 300 millones de los casi u$s 117.000 millones blanqueados.