Efecto devaluación: ventas de autos 0Km paralizadas y reclamo por el impuesto interno
La suba de los precios por el salto del dólar juega contra las ventas de autos. Desde comienzos de junio se percibe en las concesionarias un freno en la demanda reflejado en la baja las ventas.
"Tenemos una caída de los boletos del orden del 15% contra junio del año pasado", señaló el gerente general de una concesionaria de marca líder a ímbito Financiero.
Hasta este martes, los registros de patentamientos de 0Km mostraban una baja de 3,6% respecto a igual cantidad de días del junio pasado y de 23% contra mayo último.
"Está todo parado hace poco más de una semana", dijo uno de los principales directivos de la Asociación de Concesionarias de Automotores (ACARA) al diario La Nación.
"No lo vamos a ver todavía en las estadísticas de junio, porque ahí van a aparecer muchas ventas del mes anterior. Pero hace poco más de una semana que no se mueve nada. Todos estamos esperando las nuevas listas de precios que elaboran las automotrices para el fin de semana o el lunes a más tardar".
En el caso de las importadoras de vehículos de extrazona, que venden sus productos a valor dólar tras haber abonado un arancel externo del 35%, directamente tienen sus ventas paralizadas, y no sólo porque el precio del dólar ya está 48% por arriba de la cotización de principios de año. Además, muchos de esos modelos ya superaron la frontera a partir de la cual comienzan a pagar 20% de impuestos internos.
Desde enero de este año, hay una única banda que separa a los vehículos que pagan impuestos de los que no. Formalmente es de $900.000, pero para hacer la cuenta final hay que agregarle impuestos y margen comercial minorista, hasta conformar un precio de entre $1,2 y $1,35 millón.
En enero, con la divisa a $18,82, un vehículo de $1,35 millones equivalía a 71.000 dólares. Pero como el valor en pesos para el impuesto no fue modificado, hoy quedan afectados todos los vehículos cuyo precio al público supere los 48.000 dólares.
Fuentes del sector aseguraron que en la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), la entidad que agrupa a las automotrices con fábrica en el país, ya iniciaron gestiones reservadas con el secretario de Industria, Fernando Grasso: habrían pedido que el Gobierno suba en una proporción similar al aumento del dólar la suba la vara para que los modelos alcanzados por ese impuesto, ya que muerde los talones de al menos dos vehículos de producción local: la Toyota SW4 (por ahora, justo abajo del límite) y la Mercedes Benz Vito. También hay varios modelos importados desde Brasil que se acercan a la frontera de $1,2/$1,4 millón.
En el caso de los importados de extrazona, ya son decenas los modelos que superaron la barrera. Cabe recordar que el impuesto interno es del 20%, pero su incidencia en el precio final encarece el vehículo en casi un 25%. De modo que además de tener que lidiar con un dólar cuyo precio está trepando día tras día, el impuesto termina de dejar sus productos fuera del mercado.
"Me parece que con esta disparada del dólar ya no tiene mucho sentido este impuesto. En mi opinión habría que suspenderlo hasta que haya un panorama mas claro", dijo Ernesto Cavicchioli, vicepresidente de Hyundai Argentina, una de las marcas importadas de extrazona con más presencia.
"No tiene sentido gravar algo que no se vende. Ante la no-venta lo que hay que buscar es vender, entonces se debería suspender al menos hasta 2019. El ejecutivo tiene la potestad de hacerlo x decreto en cualquier momento. Simplemente tiene que sacar un decreto para dejar sin efecto transitoriamente ese impuesto. No se necesita pasar por el Congreso".
Lo llamativo es que, hasta hace apenas unos días, las concesionarias vendían autos a más no poder: entre el 1 de enero y el 31 de mayo se patentaron 435.000 vehículos 0Km, sin contar vehículos pesados, en lo que hasta ahora es el mejor registro histórico de ventas.
Sin embargo desde ACARA ahora están hablando de una desaceleración brusca: "No hay ningún motivo para vender un millón de autos en estas condiciones. Lo más probable es que terminen siendo poco más de 700.000 unidades", agregó uno de sus directivos.
Pero las concesionarias se sigue apelando a las fuertes bonificaciones que en algunos casos supera el 10% del precio de lista. De esta manera, las redes de concesionarias logran cumplir con los objetivos de ventas que fijan las fábricas.
"Aún con los descuentos, la demanda no es la misma de fines del año pasado. Ahora, que comienza el Mundial, me imagino que la gente va a estar con la cabeza en otra parte", señalaron al matutino desde otra agencia.
La explicación de esta retracción del consumo se encuentra en el fuerte aumento de los 0Km desde comienzos de 2018 como consecuencia de la suba del dólar. Los precios crecieron más de 20% en estos seis meses y, pese a eso, no trasladaron todavía la devaluación del peso.