Docentes bonaerenses paran jueves y viernes y amenazan con no volver a clase tras las vacaciones de invierno
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Tras tres meses de clases y sin demasiados cambios en las negociaciones paritarias, el conflicto docente se profundiza en la provincia de Buenos Aires.
Los sindicatos que integran el Frente de Unidad Docente convocaron a una huelga de 48 horas para el jueves y el viernes y evalúan no volver a clases luego del receso de invierno.
La medida de fuerza horas fue resuelta por la Federación de Educadores Bonaerenses (FEB), la Unión Docentes de Buenos Aires (Udocba) y el Sindicato Unificado de Trabajadores de la Educación (Suteba), al adherir al paro de la CTA de pasado mañana y llamar para el viernes a una huelga en las escuelas bonaerenses. Ese día se sumarán la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET) y los docentes privados del Sadop.
A su vez el martes 15 habrá una "jornada provincial de lucha".
Los gremios cuestionan que el gobierno de María Eugenia Vidal no convoca a una reunión paritaria desde hace cincuenta días, lapso en el que hubo un fuerte proceso inflacionario, corrida cambiaria y tarifazo.
"El salario docente está congelado desde octubre de 2017, sin embargo la política económica ha impactado fuertemente en el poder adquisitivo con un deterioro superior al 12%", afirmaron desde el FUD en un comunicado.
Con esta medida los docentes presionan al gobierno para que llame a paritarias, donde pedirán un incremento del 27% tras la corrida cambiaria y los tarifazos. Esa cifra se condice con las proyecciones de consultoras privadas. A su vez el conflicto se agudiza en medio de la incertidumbre por el futuro de la economía tras el acuerdo con el FMI.
El gobierno bonaerense espera ahora conocer los detalles finos del ajuste que le tocará a la provincia de Buenos Aires, tras el acuerdo del gobierno de Mauricio Macri con el FMI para volver a sentarse a negociar.
La mandataria sabe, además, que posiblemente la recaudación de ARBA se desacelere en el segundo y tercer trimestre, y no quiere arriesgar una oferta antes de estar segura del dinero que dispondrá en sus arcas para mejorar los salarios de los 280.000 docentes de la provincia.
Las propuestas salariales del gobierno bonaerense fueron siempre del 15% mientras que la última fue del 10% para el primer semestre, sin cláusula gatillo, variable que los gremios confirmaron que no van a ceder para no perder con la inflación.
Vidal concretó por decreto una serie de aumentos salariales como adelanto al acuerdo y depositó el 10% en abril, mayo y junio a cuenta del convenio que finalmente se pueda lograr.
Los gremios consideran que fue de modo "inconsulto" y le exigen que la resolución del conflicto sea en la mesa paritaria.
Protesta nacional
El paro del jueves en las escuelas bonaerenses coincide con la huelga convocada por la Ctera, en adhesión a la jornada de protesta de la CTA. Se espera que los gremios docentes bonaerenses marchen a la Plaza de Mayo, junto con otras organizaciones.
El gobierno de Vidal volverá a descontar los días de paro y analiza cómo recuperar los ocho días de clases perdidos. En principio ya se resolvió usar las jornadas destinadas al perfeccionamiento docente para recuperar contenidos en las escuelas afectadas por los paros.
Se analiza, además, extender las clases en las vacaciones de invierno o de verano. El año pasado Vidal firmó una resolución para recuperar los días perdidos. Pero no se hizo efectiva, dado un recurso de amparo a favor de los sindicatos.
Ahora ante la profundización del conflicto, el director general de Cultura y Educación, Gabriel Sánchez Zinny, considera las alternativas para no perder más contenidos. Hasta las últimas horas no se consideraba una nueva convocatoria a los docentes en una mesa de negociación.