Aprender inglés "in company", un beneficio cada vez más valorado dentro de las empresas
La avanzada tecnológica plantea innumerables ventajas en el mundo corporativo. Baja de costos, productividad y ahorro de tiempo, se presentan como algunas de las mejoras que pueden lograrse.
Sin embargo, en un contexto de mayor regionalización, la tecnología también plantea desafíos.
Una actividad ya muy cotidiana en las empresas de diversos tamaños, como una conference call con proveedores, consultores, casas matrices o clientes del exterior, puede implicar un obstáculo para los ejecutivos no multilingí¼es, así como también para el personal de todo tipo de jerarquías.
Si bien en un informe elaborado por un grupo de especialistas convocados por "El Diálogo Interamericano", con sede en Washington, consignó que la Argentina es de los pocos países latinoamericanos con un nivel "alto" de idioma inglés en personas mayores de 18 años, la realidad es que, al interior de las compañías, todavía hay falencias por cubrir.
En ese contexto es que en este último tiempo se incrementó la inversión que el sector corporativo destina para capacitar a su personal en idiomas, y no ya únicamente al que pertenece a su staff directivo.
Consultado sobre esta tendencia, Jorge Leporace, director de GLS Argentina (www.glsargentina.com.ar), compañía de soluciones de capacitación en inglés que trabaja con empresas de primera línea, confirmó que "cada vez son más las firmas que están recurriendo a la capacitación de sus recursos humanos como forma de dar un beneficio".
"La mayoría de los empleados de cualquier tipo de empresa necesitan manejar el inglés. Ya no es una cuestión de pensar que porque un postulante maneja el idioma le va a ir mejor en una búsqueda. Hoy, casi todas las compañías están reclutando personal mucho más calificado que años atrás. Antes, saber inglés era un plus, hoy es un requerimiento decisivo", afirmó Leporace.
A esto, el experto agregó que "la mayoría de las empresas necesitan mantenerse lo más competitivas posibles y, en un mercado global, que sus empleados sepan inglés es una de las formas que tienen para alcanzar sus objetivos".
Por eso es que, como forma de ganar en competitividad, más compañías en la Argentina están recurriendo a la capacitación in company, de manera de potenciar a sus recursos humanos. Y esto implica diagramar planes específicos y a medida de los requerimientos de cada firma.
"Ahora, la tendencia es diseñar cursos en base a las necesidades específicas. Por ejemplo, preparamos abogados para rendir exámenes internacionales; también a profesionales que van a ingresar en escuelas de negocios extranjeras o, incluso, ayudamos a crear programas para la capacitación del personal de atención al cliente o del staff de secretarias, que deben conocer técnicas de comunicación y negociación", enumeró a modo de ejemplo Leporace.
Las Pymes se suman a la tendencia
Consultado sobre los sectores que están liderando la contratación de clases in company, el director de GLS Argentina afirmó que, en primer lugar, se destacan las empresas que operan en el rubro gas y petróleo. También, en este último tiempo se ha notado una mayor demanda por parte de firmas del rubro tecnología y servicios.
Y, contrariamente a lo que algunos podrían suponer, esta tendencia no está encapsulada únicamente en firmas grandes.
"La realidad es que más y más Pymes están priorizando la capacitación de sus empleados. Si de alguna manera están relacionadas con el mercado global, entonces no importa el tamaño de la operación que tenga la empresa", opinó Leporace.
"Ya no es como en otros tiempos cuando sólo las empresas grandes invertían fuerte en capacitar a sus empleados", agregó.
La ventaja de la experiencia presencial
En los últimos años han surgido diversas aplicaciones y cursos online, que aseguran brindar capacitación con horarios flexibles.
Y si bien Leporace considera que el aprendizaje virtual es el futuro, advirtió que "todavía el mercado está muy lejos de encontrar una única herramienta que nos pueda dar todo lo que necesitamos los profesores para poder satisfacer las necesidades específicas que tienen nuestros clientes".
En este punto, advirtió que aún existe una limitante, vinculada con cuán familiarizados están los empleados con este tipo de tecnología.
Y, en segundo lugar, marcó un aspecto no menor: el nivel de seguimiento y de compromiso que tienen los profesores, variables que sí se pueden trabajar de manera más ajustada en la modalidad in company.
"Lo que nos diferencia de la competencia en estos ya 20 años que nos estamos dedicando a la capacitación de inglés a domicilio es que nosotros evaluamos muy bien a nuestros clientes y diseñamos un plan 100% personalizado, fijando metas y objetivos a alcanzar en un tiempo estipulado en conjunto con quienes nos contratan", detalló el experto.
Así, al tener la ventaja de que los profesores se dediquen en forma exclusiva a cada alumno es que se pueden maximizar y optimizar los tiempos de aprendizaje.
Para reforzar este concepto, el directivo enfatizó que "la ventaja esencial de las clases presenciales 1 a 1 es que se aprovecha el 100% la atención y dedicación de un profesor para ayudar al alumno, midiendo su avance y regulando la capacitación de acuerdo con su propia performance".
Para atender las diferentes necesidades de las compañías –en función del tamaño y el número de empleados que necesitan tomar clases- GLS Argentina ofrece, por ejemplo, paquetes de 24, 50 y 100 horas.
En cuanto a la mecánica, el paquete de 24 horas de clases tiene un vencimiento a los 90 días de contratado el servicio, mientras que el de 50 horas vence a los 120 días y el de 100 horas tienen una vigencia de un año.
Además, todos los paquetes de capacitación que ofrece la compañía incluyen la totalidad de los materiales de estudio y los viáticos del profesor a lo largo de la capacitación.
A modo de conclusión, Leporace plantea que, en un mundo tan exigente y competitivo como el de hoy en día, la clave no es brindar tan solo un servicio de aprendizaje de idiomas: "Nosotros aseguramos resultados a nuestros clientes", concluyó.