Tras convalidar un nuevo tipo de cambio en torno de $25, el Gobierno apuesta a que hoy se inicie el fin de la corrida
Afuera, en la calle, los bancos terminaron la jornada vendiendo dólares a un récord de $25,52 promedio. Incluso, en algunas casas de cambio del microcentro llevaron esa cotización unos 20 centavos más arriba.
Lo que hasta hace un par de semanas parecía un valor ridículo y fuera del alcance de los análisis más pesimistas, ahora se convirtió en realidad.
Para la mayoría de los argentinos, ese número se traduce en una mayor tensión e incertidumbre. Y es por eso que desde los despachos oficiales la premisa es clara: hay que transmitir confianza y aquietar las aguas.
Fuentes de Casa Rosada, Palacio de Hacienda y el Banco Central emitieron señales en este sentido, no bien cerraron los mercados financieros.
Los funcionarios coinciden en señalar que el cambio de estrategia implementado este lunes resultará exitoso y enfatizan que el techo en la cotización del dólar seguirá siendo de $25 "a como dé lugar".
Tanto el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, como los directivos del BCRA descartan que el sistema de libre flotación cambiaria sea una de las condiciones del Fondo Monetario para cerrar el acuerdo "stand by" con la Argentina, tal como había trascendido en las últimas jornadas.
"La tasa de cambio flotante ralentiza el proceso de desinflación", aseguró Dujovne sobre el cierre de la jornada. "Argentina no está acostumbrada a que se vean movimientos bruscos en el mercado de divisas", añadió.
Día clave
En la antesala del voluminoso vencimiento de Lebac de este martes -y en el marco de las negociaciones con el FMI- el Gobierno avaló que el precio del dólar mayorista se deslizara de $23,26 a $25 en la apertura de las operaciones del lunes.
En forma complementaria, puso a disposición de inversores nada menos que u$s5.000 millones.
Estas iniciativas fueron una clara señal de que los funcionarios estaban dispuestos a convalidar una devaluación adicional a la de las últimas traumáticas jornadas, pero también que esa disparada del billete verde iba a tener un techo: $25.
En rigor de verdad, desde hace al menos una semana tanto en la City como en Wall Street ya existía la percepción de que el tipo de cambio podría deslizarse hasta ese valor.
El Gobierno optó por sacrificar reservas en un intento por evitar los típicos daños que una devaluación desordenada le traslada a la economía. Pero lo cierto es que no pudo.
En principio, este lunes logró establecer una "trinchera" en los $25 para, a partir de ahí, defender el equilibrio. Esto estuvo acompañado por tasas superiores al 40% anual en el mercado secundario.
Para terminar en ese precio, el Banco Central debió vender u$s408 millones y otros u$s75 millones en el mercado de futuros.
En medio de tantas turbulencias, los funcionarios establecieron como objetivo central llegar con la mayor tranquilidad posible al megavencimiento de Lebac de este martes.
Es que una operatoria exitosa le otorga margen para desinflar las expectativas devaluatorias.
Optimismo con las Lebac
Pese al agitado contexto, desde el Banco Central aseguran a iProfesional que hubo "satisfacción" en el Directorio del organismo.
Además, aventuran que en la operación de Lebac se logrará refinanciar más del 80% del total a vencer. Es decir, "un porcentaje similar al de las últimas operaciones", señalan.
La cuenta que hacen los funcionarios es la siguiente:
1.- Un 60% de las Lebac que vencen en la tarde del martes está en poder de bancos y organismos estatales, como la ANSES. Es el monto crítico que entra en la negociación.
2.- Otro 5% todavía se encuentra en poder de extranjeros. Según razonan en la "mesa chica" del Banco Central, seguramente aceptarán la invitación ya que, de otra manera, ya se hubieran ido en busca de otras inversiones.
3.- El 35% está en manos de fondos comunes de inversión y de pequeños inversores individuales. "La gran mayoría renovará", dicen muy confiados a iProfesional desde el entorno de Federico Sturzenegger.
En total, la autoridad monetaria debe hacer frente a un vencimiento de $617.000 millones.
Se trata de un monto inferior a los $678.000 millones que fuera previsto originalmente. Esta reducción se debe a que el Banco Central, en la previa, se encargó de recomprar parte de las Lebac en circulación a precios bajos. De hecho, este lunes absorbió $24.000 millones adicionales.
A su vez, través de una resolución, el BCRA avanzó en una medida tendiente a facilitarle a los bancos la decisión de volcarse a las Lebac.
Concretamente, eximió (a los bancos comerciales) del cumplimiento del efectivo mínimo de los depósitos en pesos durante mayo, para que así puedan adquirir más cantidad de estos títulos en moneda local.
Desde Reconquista 266 daban cuenta de otra novedad que, a esta altura de la crisis cambiaria, era una suerte de maná caído del cielo: la reaparición de particulares vendiendo dólares en la ventanilla del Central.
De todas formas, el argumento más potente para pensar en un éxito de la operación refiere al rendimiento esperado.
Es que la tasa implícita de las Lebac en el mercado secundario se acercó al 42% anual para las de más corto plazo.
"Es una zanahoria enorme", reconocían en los pasillos oficiales. Con dólar a $25 y un tipo de interés del 42% se hace difícil decir que no.
De eso, justamente, charlaron durante la tarde del sábado Sturzenegger y los ejecutivos de los principales bancos de la City.
En el encuentro, el banquero central no sólo les reclamó una participación masiva sino que también les pidió que incrementen sus tenencias de estos títulos.
La apuesta a la estabilización
"Lo que ocurra en la licitación también es clave", sintetiza el economista Miguel Kiguel.
"La nueva combinación de tipo de cambio y tasa de interés apunta en esa dirección, si bien es fundamental que los factores psicológicos también se vean estabilizados lo más rápidamente posible y que la confianza de los inversores se recupere, al menos parcialmente", añade.
La sensación que ha quedado flotando en las mesas de dinero de los principales bancos de la City es que "la suba del dólar hasta acá llegó".
"En estos niveles tiene que frenarse. Además, porque hay una decisión política detrás de esto. El mix conformado por tasas arriba del 40% y un dólar a $25 debería ser lo suficientemente contundente", agregan.
Desde otra entidad, una de las que más fuerte opera en el mercado de cambios se muestran confiados y aseguran: "Por fin el Banco Central hizo lo que tenía que hacer".
"Nadie compra hasta el infinito. A un determinado precio aparece un freno y pareciera que el Gobierno va a defender este valor de $25 a rajatabla. Hay que ver cuánto les cuesta", expresan.
El ex ministro Roque Fernández es partidario a esta idea. En su visión, una vez superada la renovación de las Lebac, la esperada falta de liquidez en el mercado ayudará a calmar definitivamente las agitadas aguas en el mercado de cambios "en las próximas semanas".
De todas formas, en la City todavía no termina de reflejarse esa visión tan optimista que tienen los funcionarios. En el mercado de futuros, el dólar se negoció a $30,65 para fin de año.