Aplican medidas proteccionistas para proteger a fabricantes de materiales de construcción
El Gobierno aplicó medidas antidumping para importaciones de porcelanato procedente de China, India, Vietnam, Malasia y Brasil.
La Comisión Nacional de Comercio Exterior del Ministerio de Producción estableció derechos de importación para los todos los tipos de los porcelanatos de Brasil, India, Vietnam y Malasia y sólo para el de tipo esmaltado de China, que ya tiene medidas para el producto sin esmaltar, según una resolución publicada este viernes en el Boletín Oficial.
Los aranceles para India se fijaron en 75,8%; Malasia, 32%; Vietnam, 31,15%; China, 27,7%, y Brasil, 10,06% para el exportador Cerámica Villagres -que obtuvo una determinación individual de dumping-, y 48,2% para el resto del país, excluyendo a las empresas PBG y CECRISA, que demostraron no hacer dumping.
Asimismo, se aceptó un compromiso de precios del exportador chino Foshan Junjing Industrial Co, según indicó la resolución del Ministerio de Producción.
La determinación surge de un pedido de la Cámara de Fabricantes de Pisos y Revestimientos Cerámicos y tiene lugar luego de los fuertes cuestionamientos que surgieron desde el arco industrial.
Cabe destacar que en enero se publicó un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que eliminó unas 300 posiciones arancelarias que se encontraban bajo el sistema de control de Licencias no Automáticas de Importación, permitiendo el ingreso de productos que podrían afectar el desempeño de la industria nacional
"Hoy se ve un ingreso de importaciones, y ante esto el Gobierno nacional argumenta que muchas son de bienes de capital, pero al tema hay que verlo en su conjunto, ya que si bien la industria tiene mucho componente importado, cuando todavía estamos con un mercado interno que no crece, cualquier incremento repercute fuerte en el consumo y la producción", afirmó días atrás el titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo.
La UIA tuvo una cumbre esta semana en la que los directivos plantearon quejas por el incremento de las compras al mundo, en un contexto en el que la producción fabril sigue amesetada.