Un respiro para el Gobierno: la inversión de Telecom es récord y refuerza los argumentos de la fusión con Cablevisión
El Gobierno, muy ávido de nuevos proyectos de inversión por parte del sector privado, tiene por estos días un doble motivo de festejo:el anuncio de Telecom no sólo es uno de los más importantes en la historia de las telcomunicaciones, sino que también le sirve para rebatir críticas por no frenar la fusión con Cablevisión.
El dato clave es que, ahora que están juntas, el desembolso de la empresa fusionada es mayor a la suma de lo que invertían las dos partes cuando funcionaban por separado.
De hecho, los u$s5.000 millones que desembolsará la "nueva Telecom" en el trienio 2018-2020 representa prácticamente la mitad de lo que vino inyectando la totalidad del mercado de telecomunicaciones en los últimos tiempos.
El monto anunciado implica duplicar lo que la compañía había anunciado para el trienio 2016-2018, luego de que Telecom Italia se retirarse y David Martínez, de Fintech, tomara el control total.
Con nuevo management, subió la apuesta y en un primer momento anunció inversiones por $40.000 millones para el período 2016-2018 (unos u$s2.850 millones para ese lapso, tomando un dólar promedio a $14).
Los u$s5.000 millones de ahora -con una divisa por encima de los $19-, equivaldrían a unos $98.000 millones. Es decir, alrededor de un 130% más en pesos, sin el factor inflación. Y casi el doble en dólares.
Claro que no se trata de la misma compañía. En 2016 era sólo Telecom. En 2018 es Telecom-Cablevisión, en pleno proceso de fusión, más allá de que aún falta el veredicto final de la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC).
Si se suman los esfuerzos realizados por ambas compañías en estos últimos años, el desembolso anunciado terminará siendo superior al que ejecutaron de manera separada. Aunque de manera escalonada.
¿De dónde provendrá semejante monto? En el comunicado, la compañía informó que recurrirá a diversos instrumentos financieros. Es lo que ambas, separadas, vinieron haciendo en los últimos años.
Cuando se anunciaron los $40.000 millones, Telecom obtuvo parte de ese fondeo a través de la Corporación Financiera Internacional (CFI), el brazo financiero del Banco Mundial. Fueron u$s400 millones a seis años.
Cablevisión, en tanto, en junio de 2016, efectivizó una colocación de un bono internacional por u$s500 millones a 5 años a una tasa de 6,5%, la más baja para una empresa argentina en 15 años en aquel entonces.
Además, fue la primera operación de este tipo lograda por una compañía nacional luego de la resolución del conflicto con los holdouts.
A esto se suma que el año pasado, la otrora empresa de televisión paga obtuvo un préstamo por u$s750 millones para adquirir el 13,5% del capital de Telecom, de parte de un grupo de bancos, entre ellos, el Citibank, Goldman Sachs, Dubai Branch, Industrial Commercial Bank of China y el Itaú.
Apuesta capitalCablevisión venía efectuando aportes que rondaban los u$s450 millones promedio. En 2017, luego de que se le aprobara la compra de las cinco empresas para hacerse de espectro e ingresar en el negocio móvil a través de tecnología 4G, ya había hecho un anuncio por otros u$s500 millones sólo para despliegue de infraestructura.
Gran parte de ese monto se ejecutó antes del acuerdo de fusión de Telecom.
Es decir, que si se divide la inversión anunciada por Telecom para el trienio 2016-2018 y se le suma los u$s450 millones promedio que aportaba Cablevisión por año a su infraestructura, se puede inferir que, entre ambas, estuvieron realizando aportes que, sumados, dan unos u$s1.300 millones.
En estos años, los desembolsos totales previstos por las principales empresas del mercado -Telefónica, Telecom, Claro y Cablevisión- ascendían a unos u$s2.500 millones anuales.
En el marco del anuncio dado a conocer en la tarde del miércoles, luego de la reunión de directorio, Telecom aclaró que sólo para este 2018 el aporte superará los u$s1.300 millones. Es decir, una cifra idéntica a la que venían realizando las compañías de manera separada entre 2016 y 2017.
Pero al mirar la proyección sobre los años por venir, se observa que entre 2019 y 2020 se destinarían los u$s3.700 restantes, a razón de unos u$s1.800 millones por año.
Aquí sí se advierte el crecimiento de los desembolsos por parte de la empresa fusionada por sobre lo que venían haciendo hasta ahora de manera separada.
Si esto se cumple de esta manera, con esta lectura líneal, también se cumplirá la premisa que, desde el momento en que se informó el acuerdo de fusión, defendieron a rajatabla desde Cablevisión: que la integración de ambas empresas, lejos de desincentivar proyectos, obligaría a elevar la apuesta. Es decir, a inyectar más capital.
Y fundamentaban tal aseveración en que, cuando en 20026/2007 se fusionaron Multicanal y Cablevisión, las inversiones en despliegue de infraestructura, lejos de decrecer, se incrementaron.
Cambios para los usuarios¿Y en qué le cambiará el servicio a los millones de clientes de Telecom y Cablevisión que la empresa fusionada ponga más dinero en infraestructura de red fija y móvil, tal como lo afirmó?
El dinero se destinará a incrementar en un 20% la cantidad de radiobases de telefonía e Internet móvil.
Es decir, que los 19 millones de clientes de Personal deberían ser los primeros en advertir los cambios en la calidad de servicio, sea cuando hacen una llamada de voz por el celular o cuando se conectan a Internet a través de un dispositivo móvil.
Esto, a su vez, se verá potenciado por la sinergia entre la red de Personal, que ya cuenta con los recursos de Nextel (básicamente sitios para instalar nuevo equipamiento de telecomunicaciones) y la fibra óptica de Fibertel.
Si bien no será inmediato, a medida que se ejecuten los desembolsos las mejoras deberían ser notorias. Que eso ocurra dependerá, a su vez, de los controles que se establezcan desde el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), a cargo de Miguel de Godoy.
El dinero también se orientará a desarrollar redes de nueva generación (NGN, por su sigla en inglés) con el objetivo de consolidar la infraestructura convergente, según destacó la empresa en el comunicado.
En otras palabras, desplegarán más redes de fibra óptica, la tecnología más eficiente conocida hasta ahora para brindar servicios de banda ancha de calidad y montar sobre ella prestaciones de valor agregado, como el streaming de video, entre muchas otras cosas.
Esto impactará, especialmente, en los clientes de banda ancha de Arnet y de los que sumó Cablevisión, más allá de cómo las regulaciones faltantes diriman esta cuestión a futuro.
Y no se tratará sólo de montar servicios de video propios como los de las plataformas de contenidos Arnet (Telecom) o Flow (Cablevisión). El objetivo será transportar todo tipo de contenidos digitales, no sólo los que pertenezcan a la compañía sino lo que pudieran ofrecer terceros.
El acondicionamiento de la plataforma con estas capacidades permitirá no sólo dar diversos servicios empaquetados, también habilitará la posibilidad de que los clientes contraten otras prestaciones, por fuera de lo que proponga la compañía.
Todo eso dependerá, una vez más de la rapidez con que se vayan habilitando esas posibilidades y también de cómo vaya evolucionando el entorno de la competencia.
Será esta base la que preparará a la compañía ya no sólo para brindar cuádruple play sino prestaciones multiplay.
Si bien tiene la habilitación para ofrecer televisión, banda ancha, y telefonía fija y móvil en un mismo combo, aún no está en condiciones técnicas de hacerlo.
La integración tecnológica de ambas compañías llevará su tiempo y, se prevé, se irá haciendo a paso seguro, con foco en el cliente.
Justamente, esta es la mayor experiencia que aportará Cablevisión a la fusión, porque esto ya fue vivido por sus máximos ejecutivos en los tiempos de la fusión con Multicanal. Uno de los cambios más fuertes que se introdujeron en el marco de aquel proceso fue el servicio de atención al cliente.
Lo que debería ocurrir, en este contexto, es que en el corto plazo se adviertan mejoras en la calidad de los servicios básicos. Luego se irán sumando prestaciones cada vez más sofisticadas que no tendrán que ver sólo con el entretenimiento.
Y, a medida que avance la ejecución de la inversión, se estará llegando al 2020, año en que a nivel mundial se definirán los estándares de las redes 5G, que habilitarán de manera masiva la Internet de las Cosas (IoT).
Esto obligará a tomar decisiones a nivel local de parte de los organismos regulatorios.
Uno de los lugares donde podrían verse las primeras aplicaciones a nivel hogareño en la Argentina comenzarían a ocurrir para ese entonces.
No porque no existan ya algunas prestaciones de IoT aplicado al hogar o a otros sectores, más corporativos, como el de transporte o de servicios públicos, sino porque se necesitan redes que sean eficientes para soportar el creciente tráfico de datos que eso acarreará.
Lo concreto es que Telecom ya definió su nuevo plan de inversiones. Y todo indica que esto también provocará reacciones en el resto del mercado de las telecomunicaciones.