La industria automotriz se reconvierte con pick ups, importados y menos empleo
La industria automotriz se prepara para ser el motor de la industria en 2018, con inversiones y nuevos lanzamientos.
El repunte llegará en medio de una marcada reconversión del sector, orientada a la fabricación de pick ups, una fuerte presencia de modelos importados y un menor empleo que años atrás, asegura Clarín.
Esas son algunas de las principales tendencias que anticipan los expertos, en momentos que las terminales retoman su producción tras las vacaciones, y el Gobierno busca a avanzar en la baja del costo logístico en el marco de su plan para fabricar un millón de autos.
Luego de cerrar el 2017 con 900.000 unidades patentadas, el mercado prevé vender 975.000, una suba del 8,2% respecto del año pasado. El impulso se lo darán los anuncios previstos y la recuperación en marcha de Brasil tras la recesión de 2015 y 2016.
"De cumplirse los programas de producción previstos, el sector automotriz será la rama industrial más dinámica y aportará un tercio del crecimiento manufacturero", dijo el analista del sector automotriz de Abeceb, Nicolás Vanoli.
Las terminales proyectan una producción de 565.000 unidades, 20% más que las 472.000 del 2017, según la Asociación de Fabricantes (Adefa).
En Córdoba, Nissan lanzará su nueva pick up y Fiat prepara su modelo secreto. Toyota, en tanto, continúa su expansión, con la exportación de camionetas a Centroamérica.
Se trata de un "nuevo patrón de especialización", con las fabricantes japonesas a la cabeza, que se desplazan de los productos de gama de entrada hacia las pick ups.
Así, mientras en 2010 se fabricaban un 70% de automóviles y un 21% de camionetas, la relación se invirtió en 2017 con un mix de 37% y 42%, respectivamente.
"Las perspectivas para 2018 indican que podría ser el año de despegue de la industria, siempre teniendo como pilar la producción de pick-ups en un marco expansivo de la demanda externa", señaló en un informe Alejandro Ovando, director de IES Consultores.
La contracara es el creciente peso de las importaciones. Para 2018 se espera que el "share" de importados se mantenga en un 70%, luego de que el año pasado se alcanzara un récord de 600.000 autos extranjeros. Y el rojo comercial alcanzará los u$S11.800 millones, según abeceb.
Esto es así por la estrategia de las terminales, que aprovechan el flex (el tope para importar hasta 1,5 dólar por cada dólar exportado) para enfocarse en modelos de mayor valor e importar más productos de Brasil. "El boom de la demanda doméstica no está siendo captado por la oferta local", señala Ecolatina en su informe de enero.
La especialización y la caída de ventas a Brasil no fueron neutrales: desde 2011 la producción se redujo un 40% y el empleo 5,6%, según datos de abeceb. Las terminales vienen de reducir personal mediante retiros voluntarios tras aplicar suspensiones, y en las últimas semanas cerraron las autopartistas Itec, Stockl y Plascar, con más de 700 despidos.