Diputados tratan reforma tributaria, con cruces entre el oficialismo y el Frente para la Victoria
Este martes, a las 17, comenzó la sesión especial en Diputados sobre la reforma tributaria, cuyo arranque quedó envuelto en filosos enfrentamientos verbales entre los diputados del Frente para la Victoria-PJ e hijos de desaparecidos Juan Cabandié y Horacio Pietragalla de un lado del ring, y Nicolás Massot y Fernando Iglesias de Cambiemos en el otro rincón.
Todo empezó con una cuestión de privilegio planteada por el jefe de la bancada del PRO contra Cabandié, Pietragalla y el presidente del bloque FPV-PJ, Agustín Rossi, por las reiteradas referencias de esos legisladores al rol desempeñado por la familia Massot durante la Dictadura, en particular de Vicente Massot en Bahía Blanca.
Luego vino la respuesta de Cabandié, quien al ser interrumpido por Fernando Iglesias, perdió los estribos y, a los gritos, tildó al intelectual macrista de "odiador serial".
Massot recordó que había sido invitado por Cabandié a su casa meses atrás y que no esperaba "ese nivel de prejuicios" que, según dijo, demostró el camporista al vincular su apellido con prácticas de la dictadura.
"A mí no me tocó vivir esa época. Estoy orgulloso y agradecido de la familia a la que pertenezco y el apellido que cargo. Espero que muchos de ustedes sientan lo mismo", contestó Massot, antes de lanzar su contraataque contra los kirchneristas.
A Pietragalla y Cabandié, les dijo que deberían sentirse "muy incómodos" de pertenecer a un bloque conducido por quien designó al "genocida" César Milani como jefe del Ejército, en referencia a Rossi.
A su vez, a Cabandié en particular le advirtió sobre la "utilización política" de su historia personal. Y luego embistió contra el exministro de Defensa, quien lo había acusado de "botón" por haber acudido a la Justicia con una denuncia penal por los desmanes del jueves pasado dentro del recinto.
"Diputado Rossi, a veces ser botón es buscar la Justicia. Prefiero tener chapa de botón que de encubridor. Ustedes encubrieron un atentado en el que murieron 85 personas. Prefiero ser botón y no encubridor", concluyó, en alusión a la AMIA.
A su turno, Cabandié aclaró que no "trasladaba" al diputado del PRO la responsabilidad de la familia Massot en la desaparición de sus padres en la última dictadura.
"Yo hago responsable a la familia Massot de la desaparición de mis papás. Como también la familia Massot es responsable de desaparecidos de Bahía Blanca. Además, fue responsable e instrumento propagandístico de la dictadura. Incluso la familia Massot avaló la dictadura ya en democracia hasta poco tiempo antes de vender el grupo mediático. Eso no significa que yo traslade al diputado la responsabilidad de la desaparición de mi familia", explicó.
Al ser interrumpido por provocaciones ofensivas de Fernando Iglesias, Cabandié se deshizo en insultos contra el dirigente macrista: "Callate, callate, ridículo, irrespetuoso, basura, sos un odiador serial, miserable".
Luego tomó la palabra Pietragalla, quien remarcó que el tío de Massot, cuando era dueño del diario La Nueva Provincia en la época de la dictadura, "entregó a dos sindicalistas" que trabajaban en el matutino.
"No sólo entregó a trabajadores organizados sino que era propagandista de la dictadura a través de sus medios de comunicación. Cubría los operativos de las Fuerzas Armadas como 'enfrentamientos'", expresó.
"La acusación que hacés es de una ignorancia muy grande", le espetó a Massot respecto a los supuestos prejuicios contra él por su apellido, lo cual despertó el murmullo de desaprobación de la bancada oficialista, siendo Eduardo Amadeo el más alterado.
"íCerrá la boca Amadeo! ¡Sé respetuoso! Te estás metiendo en un lugar muy sensible. Mis abuelos se murieron golpeando puertas de políticos como ustedes y nadie me daba la respuesta. No me llegaron a conocer", lamentó.
La previa
Luego de terminar de sancionar la denominada reforma previsional, la cámara de Diputados debate los proyectos que modifican el esquema tributario a nivel nacional. Este paquete de leyes ya fue acordado por el Poder Ejecutivo con 22 de los 23 gobernadores de todo el país más el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Solo San Luis la rechazó.
El primer paso se dio con la sanción de la reforma previsional, ya que de allí se sacarán los fondos para compensar a las provincias por las modificaciones impositivas y el pago a la provincia de Buenos Aires por el denominado Fondo del Conurbano.
Antes de fin de año, la Casa Rosada quiere sancionar un paquete que además de las reformas tributarias y previsionales incluya la ley deResponsabilidad fiscal, el Pacto fiscal, el Presupuesto 2018 y el revalúo inmobiliario.
Durante esta semana, trece gobernadores y el jefe del gobierno porteño respaldaron abiertamente el plan del oficialismo.
Los mandatarios que asistieron a esa convocatoria fueron la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, el porteño Horacio Rodríguez Larreta, y los mandatarios de Jujuy, Gerardo Morales; Corrientes, Eduardo Valdés; Salta, Juan Manuel Urtubey; Entre Ríos, Gustavo Bordet; La Rioja, Sergio Casas; Tucumán, Juan Manzur, y Chaco, Domingo Peppo.
Acompañaron Rosana Bertone (Tierra del Fuego), Alberto Weretilneck (Río Negro), Mariano Arcioni (Chubut), Hugo Passalacqua (Misiones), y Alfredo Cornejo (Mendoza).
Además, el oficialismo buscará volver a sesionar el jueves para la aprobación de un extenso paquete, que incluirá la sanción definitiva del Pacto Fiscal y la Ley de Responsabilidad Fiscal, acordados por la Casa Rosada con 23 gobernadores, en un paquete donde era esencial, primero, convertir en ley la reforma jubilatoria, con cuyo ahorro se financiará la baja de impuestos en las provincias y también la "solución política" al Fondo del Conurbano sin afectar la coparticipación de las provincias.
"Sé que ha habido incomodidades, pero todos sabemos que tenemos una responsabilidad enorme y no podemos esperar porque hay cuestiones de pobreza y empleo que debemos resolver", afirmó al sentarse a la mesa con los mandatarios provinciales.
"No es fácil un acuerdo de este tipo con puntos de partida tan distintos pero estamos convencidos de que se dio un gran paso adelane", agregó en su momento el presidente Mauricio Macri.
Antes de la firma, el jefe de Estado sostuvo que este es un avance "hacia el reformismo".
A nivel general, la semana próxima, Diputados buscará darle la media sanción que le falta al acuerdo que prevé una solución al conflicto por el Fondo del Conurbano, a partir de una redistribución de la coparticipación y un compromiso para reducir gastos e impuestos.
En paralelo, el Gobierno nacional y las provincias acordaron desestimar los juicios cruzados por deudas entre las jurisdicciones.
Puntos relevantes
El proyecto contempla un nuevo sistema de distribución del impuesto a las Ganancias entre Nación y provincias, grava la renta financiera y aumenta determinados impuestos internos como los que se aplicará a la cerveza y el cigarrillo.
La iniciativa impulsada por el Gobierno recibió significativos cambios como en el caso de las bebidas azucaradas, donde se decidió mantener el actual impuesto de 4% para aquellas gaseosas que tienen jugo de limón y 8% para las analcohólicas, con o sin azúcar.
Uno de los principales puntos de proyecto es la derogación del Fondo del Conurbano -que se solventaba con el 10 por ciento de Ganancias- y la distribución del 20 por ciento de Ganancias que se derivaba a la ANSeS entre las provincias y Nación por el sistema de Coparticipación Federal, en tanto que el sistema previsional se financiará con la totalidad de la recaudación del impuesto al Cheque.
Otro eje de la reforma es la exención del impuesto a las Ganancias para los inversores no residentes, salvo en el caso de Lebacs.
Un cambio significativo fue rebajar a la mitad el IVA a la carne de pollos, cerdos y conejos, con el fin de permitir que bajen los precios de esos productos alimenticios de neto corte proteico y que son claves de la canasta familiar.