El presidente del interbloque Cambiemos no quiso hablar en el cierre de la sesión: sus razones
Es habitual que el último discurso en un debate legislativo acapare todas las miradas. Suele ser el más importante porque corresponde al presidente del bloque que representa al oficialismo. Y mucho más cuando llega después de 12 horas de una discusión muy caliente, como fue la que se produjo entre este lunes y martes en la Cámara de Diputados por la reforma previsional impulsada por el gobierno de Mauricio Macri.
Sin embargo, esta vez el presidente del interbloque Cambiemos, el radical Mario Negri, eligió otra estrategia. Se llamó prácticamente a silencio.
"A diferencia de lo que normalmente hago, en esta oportunidad la responsabilidad me indica otra cosa", introdujo en su breve participación de apenas 30 segundos. "La oposición responsable no reparte fósforos a donde se andan con nafta; señor presidente, mande a votar", concluyó en referencia a los incidentes que se vivieron el ayer y hoy fuera del Congreso donde huboe enfrentamientos entre fuerzas de seguridad y manifestantes durante horas y que terminó con 160 heridos y más de 50 detenidos.
Para el kirchnerismo, la lectura es otra. "La ley es tan mala que no la defendió ni el jefe de bloque de Cambiemos", dijo el titular de la bancada Frente para la Victoria, Agustín Rossi.
"Estamos tristes. Hicimos todo lo posible para que no salga, pedimos que la sesión se levante, pero no lo conseguimos", se lamentó el legislador santafesino, en relación a las estrategias que usaron para tratar de impedir la sanción de la ley.
Y eso mismo le consultó el periodista Luis Novaresio a Negri en radio La Red tras sancionarse la ley. "Sentí que no quiso hablar porque usted estaba incómodo con esta reforma", le dijo. El diputado Negri chicaneó: "Lo que sucede es que son votaciones muy cercanas, que se definen por diez votos, me queda todo el año para hablar con Rossi del país que dejaron".