Nueve de cada 10 empleos no se generan en la industria
En la Argentina existían 20 millones de puestos de trabajo en el segundo trimestre de 2017, según datos del INDEC. De ese total, la participación del empleo generado por la industria apenas supera el 11%.
Además, dentro de la masa de trabajadores considerada por el INDEC el componente principal son los asalariados registrados, que son poco más de la mitad. Luego sigue un 25% de asalariados no registrados ("en negro", mientras que el resto corresponde a puestos de trabajo no asalariados (generalmente, cuentapropistas).
El Centro de Estudios de la Nueva Economía (CENE) de la Universidad de Belgrano, analizó cómo se distribuyen los puestos de trabajo según las distintas ramas de actividad económica.
El informe señala que entre la administración pública en todas sus jurisdicciones y el comercio se genera un 35% del total de puestos de trabajo del país.
En tanto, la industria manufacturera aporta un 11,5%, mientras que el sector agropecuario, la pesca y la minería generan apenas un 7,1%.
Según el CENE, la preponderancia en el sentido común de la industria y el agro como fuertes empleadores es solamente una "fantasía ideológica".
"La realidad es que el sector terciario en su conjunto representa en la Argentina el 73% de los puestos de trabajo, como ocurre en la mayoría de las economías modernas", subraya el estudio dirigido por Víctor Beker.
Con respecto al nivel de formalidad, el trabajo no registrado -que representa un 23% del total- se concentra en el servicio doméstico (1.166.000 puestos de trabajo contabiliza el INDEC), en el comercio (665.000) y en la construcción (534.000).
En cuanto a los puestos de trabajo no asalariado (cuentapropistas) se concentran en el comercio (1.632.000), la construcción (725.000), la industria manufacturera (629.000) y el sector agropecuario (433.000).
Finalmente, en cuanto a la participación de los factores de la producción en el ingreso, la remuneración al trabajo asalariado absorbía en el segundo trimestre de este año un 49,9%, frente a un 48,1% en igual período de 2016.
Por su parte, el excedente de explotación bruto -valor agregado menos remuneración de los asalariados e impuestos más subsidios- cayó de 44,7% a 42,3% en igual lapso.