Echale la culpa a Marí­a: el paso del huracán genera problemas en el acceso a Internet en la Argentina

Internet funciona mal en la Argentina. Y la razón hay que buscarla en los efectos del paso del huracán María por el Caribe. Una de las empresas de cable submarino que provee servicio de Internet internacional al país, Level 3, está reportando problemas desde hace un par de días, cuando se inició el fenómeno meteorológico se convirtió en huracán categoría 5.

Así lo señala Down Detector, una página que da cuenta del funcionamiento de empresas de telecomunicaciones y de Internet en el mundo. Al mirar lo que sucede con Level 3 se detallan inconvenientes desde las 10 de la mañana de este jueves 21 de septiembre, aunque se advierten problemas desde el pasado martes 19.

Si bien Level 3 cuenta, en la Argentina, con salida/ingreso en Las Toninas por el lado del Atlántico, y por la cordillera de Los Andes, desde Mendoza, hacia el Pacífico, el hecho de tener inconvenientes en una estación de amarre en la zona del Caribe, más precisamente en Puerto Rico, asolada por el paso de María, tiene sus consecuencias a nivel local.

El tráfico que no se puede derivar por el lado del Atlántico se cursa por vías terrestres y por la salida del Pacífico. Y de ahí proviene parte de la lentitud e imposibilidad de acceso que desde esta mañana se comprueba al intentar navegar en sitios en Internet o comunicarse mediante sistemas de mensajería on line o redes sociales.

iProfesional intentó obtener un reporte de parte de la filial local de Level 3, pero hasta el cierre de este artículo no tuvo respuesta. En tanto, también se hizo la respectiva consulta a Telefónica, por cuanto otro de los cables submarinos que rodean a la Argentina y atracan en el Caribe es el South American - 1 (SAM-1) y desde la compañía explicaron que, hasta el momento, no se habían reportado problemas de red. Y lo mismo indicó Telecom, que conecta al país mediante Bicentenario, el cable compartido que posee con Antel de Uruguay.

En Puerto Rico y en distintos puntos de las islas del Caribe se distribuyen diversas estaciones de amarre de cables submarinos. La violencia del huracán María y de la seguidilla de vientos huracanados y tormentas tropicales pudo haber generado inconvenientes en esos puntos de conectividad y, de ahí, la necesidad de derivar el tráfico por otro lado.

Al igual que los embotellamientos en una autopista, si el tráfico que debía ir por un lado debe redigirirse hacia otro, que ya venía ocupado, se produce un embotellamiento. Y eso hace que el tránsito se haga lento. Con Internet ocurre exactamente lo mismo y es una de las razones por las que este jueves 21 de septiembre conectarse y navegar esté siendo tan dificultoso.

Los problemas en Internet están registrándose en diversos países de la región y del mundo. De hecho, en zonas afectadas por las tormentas tropicales y no tanto por los huracanes, como en Venezuela, la Compañía Anónima Nacional de Telecomunicaciones (CANTV) informó que el paso del huracán había provocado inconvenientes en el acceso.

Inclusive, en las últimas horas María pasó por Punta Cana, donde generó grandes destrozos, tras pasar de categoría 2, a la que había caído tras haber asolado Puerto Rico, y volver a subir a categoría 3 cuando llegó a la isla, conocida por ser uno de los destinos turísticos más elegidos de esa zona.

La República Dominicana es también otro de los lugares en donde se amarran cables submarinos que no sólo "tocan" otras islas caribeñas sino que, además, llegan a Miami. Esta ciudad del estado de la Florida es el punto de recepción del NAP de las Américas, el principal nodo de telecomunicaciones de toda la región, y al que llegan gran cantidad de los principales operadores de cables submarinos del mundo.

De modo que las complicaciones en la zona del Caribe, vinculadas con las estaciones de amarre específicas que se encuentran en la zona, impactan en todo el mundo. La razón es sencilla: si bien las compañías tienen redundancia y, ante un inconveniente, derivan el tráfico por las rutas menos descongestionadas, esa bifurcación genera mayor tráfico en esas rutas y todo se hace más lento.

A esto se suma que, como la actividad del huracán no cesa, tampoco se pueden encarar las tareas de mantenimiento necesarias para resolver el tema lo más rápido posible. Excede la voluntad de las empresas afectadas. La naturaleza es, en estos casos, la que marcará los tiempos de resolución.

Los inconvenientes con Internet comenzaron a registrarse a nivel de los servicios. A primera hora de la mañana, miles de usuarios de sistemas de mensajería populares como Whatsapp comenzaron a quejarse de que funcionaba mal. En simultáneo, otros miles de personas advertían serios inconvenientes para poder conectarse a cualquier otro servicio de Internet. La intermitencia de la conectividad se mantiene aún constante en muchos países, incluida la Argentina.