La ciencia dio la respuesta al enigma del vestido que recorre las redes sociales
Las redes sociales se han sumergido en lo que podría llamarse 'la guerra de los colores', todo por un vestido que, al parecer, cambia de color según quién lo mire.
La polémica que dividió a muchos entre una opción u otra, tenía un ganador indiscutido: 1,5 millones de votos para el blanco y dorado, y 615 mil votos para la opción azul y negro.
El viral llevó a que incluso figuras como Taylor Swift, Kim Kardashian, Justin Bieber y el Primer Ministro de Singapur dieran a conocer su opinión sobre el color del vestido.
De inmediato, las teorías comenzaron a aflorar, con depresión, traumas de la niñez, la forma de los ojos o problemas en la córnea como supuestas explicaciones "científicas".
Es por ello que profesionales de la fotografía, como Hope Taylor salieron al paso para resolver el enigma.
Así, utilizando el software Adobe Lightroom, ajustó el balance y demostró que llevándolo a tonalidades cálidas es posible ver el vestido como blanco y dorado, mientras que acercándonos a tonalidades frías aparece como azul y negro, que por cierto, es el verdadero color de la prenda.
Después de largos debates y especulaciones, la ciencia dio una respuesta.
Como todo fenómeno vinculado íntimamente a la luz y a su refracción, los tonos diferentes que parece tener el vestido tienen su origen en la forma en que el ojo humano percibe el color.
En condiciones normales, este mecanismo funciona perfectamente e igual para todos, y no hay debate respecto a los colores de lo que nos rodea; pero bajo ciertas condiciones lumínicas las cosas cambian considerablemente.
Bajo esas condiciones lumínicas especiales, entonces, ocurre que el cerebro interpreta las longitudes de onda en forma diferente para cada persona, según afirma la revista Wired.
Así, en el caso del vestido de marras, la forma en que está iluminado hace que el cerebro de cada persona reaccione diferente ante la información que recibe: lo que para uno es información descartable, para el otro es la condición necesaria del color.
"Lo que pasa acá es que el sistema visual está percibiendo la imagen y busca descartar cierta información transmitida por la iluminación de la foto", explica Bevil Conway, neurocientífico de la Wellesley College.
Conclusión: "Hay personas que descartan el color azul dentro de la imagen, son quienes ven el vestido blanco y dorado, y los que descartan el dorado, y terminan viendo la prenda de color azul y negro", precisa Conway.
Ello ocurre, por ejemplo, cuando cambiamos el fondo de la imagen o la miramos en otras condiciones que no sean las habituales, como la pantalla de un teléfono celular o el monitor de la PC.