Naranpol cerró sus puertas y los empleados la tomaron

Los trabajadores de la firma fabricante de bebidas gaseosas Naranpol denunciaron en los tribunales de Santa Fe y Rosario a los propietarios de la empresa por "insolvencia fraudulenta, desabastecimiento de las plantas y cierre intempestivo", dijeron este jueves fuentes judiciales.

La denuncia alcanza a los empresarios Martín y Lucas Galán, quienes tomaron el control de la empresa tras la muerte de Carlos Galán, padre de ambos y fundador de la firma Productora Alimentaria, dueña de Naranpol.

Martín Galán, presidente de la empresa Productora Alimentaria Sociedad Anónima, expresó en declaraciones a la prensa que "hasta ahora no tenemos ningún pedido de quiebra normal. Sólo hay versiones del sindicato que a nuestro entender no son serias".

En tanto, el delegado de producción, Cristian Farinelli, dijo este jueves en declaraciones radiales que la presentación se debió al "abandono" que realizaron los empresarios de "sus trabajadores y las unidades productivas".

Una vez que Naranpol cerró sus puertas los trabajadores resolvieron tomar la planta para resguardar sus puestos de trabajo, los insumos, la mercadería y las máquinas, según informó Télam.

La empresa cerró todas las oficinas de la firma en el país y envió telegramas de licencia obligatoria, sin goce de sueldo para los trabajadores.

La última oferta que hizo la compañía de reestructuración fue rechazado de plano por el el Sindicato de Unico de Trabajadores de Aguas Gaseosas (Sutiaga).

"Pidieron 30 millones de pesos, ya sea a la provincia o la nación, para poder poner en marcha la producción", explicó un representante de los trabajadores. "Y no sólo eso -añadió-, propusieron 140 despidos y la escala salarial muy por debajo de lo que habían propuesto con anterioridad".

La empresa se habría presentado en convocatoria de acreedores en mayo, pero los empleados advierten que podría tratarse de una maniobra para bajar los salarios, porque según ellos mantiene una alta rentabilidad y porque desde ese mes, les pagan el mínimo vital y móvil de $1800 a los obreros de planta.

Ahora, el objetivo de los trabajadores es reactivar la producción bajo la modalidad de empresa recuperada, para lo cual realizan gestiones ante el Movimiento Nacional de Empresas Recuperadas (MNERT) que opera bajo el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.