La empresa de Nicolás Caputo quiere quedarse con una de las plantas de Mercedes Benz en el país

A fines del mes pasado, el grupo Mirgor desembarcó en un nuevo negocio como es el hotelero que, de ese modo, sumó a su pool de actividades que se expanden por varios sectores industriales, domésticos y también del exterior.

El holding propiedad de Nicolás Caputo, uno de los mejores amigos del expresidente Mauricio Macri y sobrino del ministro de Economía, Luis Caputo, sumó la hotelería como parte de un plan para internacionalizar sus negocios más allá de las fronteras de Tierra del Fuego y del régimen de promoción industrial provincial.

El objetivo es contar con negocios en los principales mercados de la región con el foco puesto en la electrónica y los celulares, aunque desembarcando en nuevos sectores, como en el caso del hotelero, el agro hasta la producción de acero.

Ahora, el grupo busca quedarse con una de las plantas de Mercedes Benz en la Argentina, teniendo en cuenta que la marca alemana puso a la venta la mayoría de sus activos locales

Mirgor abastece a las principales automotrices que fabrican en el país

En este contexto, Mirgor también se desenvuelve en el sector automotriz, en el que abastece a las principales terminales que fabrican en el país y que es, de hecho, el negocio más antiguo de la compañía que lo inició con la producción de autopartes.

Hasta ahora, se concentró en la fabricación de sistemas de climatización, pero con el paso del tiempo sumó equipos de infoentretenimiento y módulos de electrónica para la industria.

De hecho, Mirgor nació en 1983 precisamente como una autopartista fabricando climatizadores para autos de la marca Peugeot 504, pero en la actualidad ya es una de las principales proveedoras de piezas para toda la industria automotriz que se suma a las ocho plantas industriales que opera en el país, mayormente ubicadas en el sur, además de ser distribuidor de exclusivo de muchas empresas internacionales como Samsung; Apple y JBL, entre otras.

En la actualidad, el grupo ya tiene presencia en 14 países de la región –incluyendo Estados Unidos, América Central y la mayoría de los mercados sudamericanos, en el marco de negocios que le permiten alcanzar una facturación anual que roza los u$s300 millones.

También opera un hub logístico en Miami y desde el estado de Florida, atiende a mercados como Uruguay, Paraguay, Chile, Colombia, Bolivia, Nicaragua, El Salvador, Panamá, Honduras y República Dominicana.

El año pasado sumó la actividad del procesamiento de acero para lo cual compró una planta Garín que pertenecía a la finlandesa Outokumpu, a lo cual se agrega la división Mirgor Agro, con la que exporta commodities y es una de las tres principales vendedoras de soja al exterior.

El grupo quiere seguir creciendo en el sector automotriz

Actualmente, está iniciando la puesta en marcha de un proyecto para la producción de porcinos, con la idea de convertir la proteína vegetal en proteína animal, a lo cual le suma el plan para elaborar malta, apuntando 100% a la exportación.

A todo esto, el grupo quiere seguir creciendo en el sector automotriz de la mano de la posibilidad de quedarse con una de las plantas de Mercedes Benz en la Argentina, teniendo en cuenta que la marca alemana se encuentra "en retirada" y puso a la venta la mayoría de sus activos locales.

La posibilidad fue dada a conocer por miembros del sindicato de mecánicos SMATA quienes por estos días mantuvieron encuentros con ejecutivos de Mirgor y de otro grupo local también interesado en algunos negocios de Mercedes Benz.

El sindicato que lidera Ricardo Pignanelli envió varios de sus delegados a esas reuniones con representantes del grupo de Caputo y de otra empresa local liderada por un banquero, Pablo Peralta que, según el portal A Rodar, es asesorado por el ex CEO de Toyota Daniel Herrero.

Los dos parecen haber puesto en la mira la planta de Mercedes-Benz ubicada en la localidad bonaerense de Virrey del Pino en donde Mercedes Benz produce el utilitario Sprinter.

Asegurar el trabajo

En caso de Mirgor, fuentes de la compañía prefirieron no hacer declaraciones sobre la posibilidad de sumar la planta bonaerense a sus activos.

"No tenemos nada para comentar al respecto", sostuvieron ante la consulta de iProfesional que también se comunicó con voceros de Mercedes Benz quienes, de igual modo, explicaron que no pueden hacer declaraciones ante lo que consideran rumores.

Lo cierto es que el interés del gremio se vincula con la necesidad de que el grupo que continúe con las actividades de la marca alemana mantenga los derechos de los trabajadores y asegure la continuidad laboral.

Según el sitio infogremiales, el propio Pignanelli aseguró que los dos candidatos presentaron sus planes de negocios al sindicato, asegurando que no tienen intenciones de despedir personal ni de realizar cambios en el convenio colectivo de trabajo.